Te odio tanto. Te odio por ser como los demás
Tus malditas promesas se fueron a la basura al igual que el amor infinito que procesabas.
¿Dónde quedaron tus “por siempre”? Fueron tan frágiles como tu amor
Te odio tanto. Te odio por quitarme un pedazo de alma.
Deseo que me arranques este dolor así como me arrancaste el amor que te tenía.
¿Sabias que el amor y el odio son igual de intensos? Yo ahora deseo sentir nada por ti, porque este odio quema al igual que haberte amado.
Podrías haberme arrancado el maldito corazón en lugar de irte y dejarme sangrando, empapando las sábanas con lágrimas y sangre.
Pudiste tener piedad pero hiciste lo que tanto odiaba de los demás.
¿Que tu eras diferente? ¿Que tu no harías lo que los demás me hicieron?¿Que deje de tener miedo y me atreva a amar sin creer que voy a perder?
Te hice caso. Acepté necesitarte, tuve expectativas, dejé de temer ¿para que me dejaras? Sin oportunidad de alegar nada.
Mil veces maldita. Mil veces y más.
Te odio tanto que te prometo si un dia decides volver a verme, solo encontraras escombros donde una vez encontraste riquezas.
¿Es lo que querias? Magistralmente lograste hundirme. Dejarme en la miseria, en la penumbra insaciable, leyendo una y otra vez tu letanía que no es más que basura.
Quemame, entierrame viva, ahogame con tus insultos, cualquier cosa menos esa despedida.
Te odio. No tenías que irte así. No tenias que hacerme esto. Yo confiaba en ti.