Sí, me dolió
Sí, me dolió, pero así se escribieron mis poemas favoritos.
Sí, me dolió, pero el sentimiento era el más hermoso que nunca antes había sentido.
Sí, me dolió, pero su preocupación hacia mí me hacía soñar en mundos de fantasía.
Sí, me dolió, pero que me regalara una sonrisa era lo más fantástico que pudieran darme.
Sí, me dolió, pero sus miradas eran lo más cálido que había sentido.
Sí, me dolió, pero sentir su mano en mi cintura me transportó a un universo diferente.
Sí, me dolió que él no me mirara con los mismos ojos con los que yo lo miraba.
Sí, dolió el simple hecho de saber que no me pertenecía.
Por ese dolor, me alejé.