Estamos rotos
Estamos rotos, cariño. Yo miro la luna y me fijo en la oscuridad. Tú, inocentemente, eres una de esas estrellas que quiere ser luna; crees poder tener el poder de dar luz al mundo entero, pero eres pequeño, eres un niño buscando atención.
Te daré mi atención, pero no te daré todo mi amor.
Suficientes lágrimas han sido derramadas.
Saco lo que hay dentro de mí y lo escondo en lo profundo del mar. No somos monstruos, simplemente estamos rotos.
¿Quién puede reparar un corazón roto cuando su propia sangre lo hiere todos los días?
Búscame en la noche, en los días fríos y cuando haya una tormenta fuerte. Te daré mis brazos y lloraré por dentro como cada vez que te abrazo.
Entonces te diré: Niño mío, no somos monstruos, simplemente estamos rotos.