Fulgura en tus ojos
un misterio,
caminos amorosos
totalmente en cautiverio.
Tan llenos de paz,
pero con ganas de gritar,
por un amor tenaz
que no quiero ocultar.
Sé que crece
en mi pecho una flor,
cuyo recuerdo florece
sin miradas de dolor.
Recuerda: el rocío
de tus amores
propició
infinitas flores.
No quiero la vida
sino estoy cerca de tí,
mejor tu amor sin medida,
siempre para mí.