Te deslizas por ese cielo inmenso
que de apoco las nubes negras cubren por completo
y la luz del sol se apaga lento
y la noche está a punto de caer.
Oh, querida golondrina
que vuelas muy alto
hacia distintos lugares
exaltando tú libertad.
Oh, querida golondrina
que te refugias en algunos de esos nidos
en los aleros de aquel edificio en ruinas
esperando la hora de alzar el vuelo.
Oh, querida golondrina
partirás por la mañana
volverás a casa
y en el cielo quedara tu esencia.
Oh, querida golondrina
ve con cuidado a casa
que el cielo que te vio volar te espera
para verte volar muy cerca de él.
Oh, pequeña criatura
vuelve pronto a visitarme.
Vuelve sana
y deshazte de tu incertidumbre.