Tu voz son como notas musicales de amor; suaves y dulces al oír. Tu corazón es frágil como los pétalos de una flor; hermoso al contemplar pero delicado al tacto. Tu sonrisa brilla más que el sol y tu risa resuena aún en los lugares más oscuros y silenciosos. Tus ojos poseen un brillo tan mágico y magnético como la luna; brillan a pesar de la oscuridad, de las circunstancias y de las dificultades de los días.
Tu rostro se ve tan suave y hermoso como las rosas.
Tienes tantas cualidades hermosas y cada una de ellas las amo a la distancia y en el más absoluto silencio de los días. Cada latido de mi corazón late por tu presencia en la oscuridad silenciosa y tú belleza hace que mis ojos se pierdan como todas aquellas miradas que se perdieron en la luna buscando una respuesta, una conexión o quizás solo quizás buscando amor en lo lejano y brillante como tú.
En la distancia admiro tu delicada y distraída presencia, en el silencio digo todas aquellas notas musicales de amor que me haces sentir, en la oscuridad tu brillo ilumina mi vida de una forma tan suave y única pero lo suficientemente fuerte para no dejarme en la oscuridad. En la distancia imagino que tan suave y cómoda se sentirá tu mano junto a la mía y quizás nunca lo sepa pero la sensación de querer averiguarlo me invade mas de lo que me gustaría admitir.