Padre Celestial, he aquí, aquí estoy Señor, oh Jesucristo Señor, lléname con tu Santo Espíritu, y te pido, y te ruego; te suplico que me ayudes a resistir tanta maldad que se está viendo en este mundo, ayúdame Señor a soportar lo que es tan difícil de soportar, lléname de una fuerza que va más allá del entendimiento, porque la carne es débil. Y el mundo está lleno de maldad, porque se está peleando con espíritus inmundos que no descansan; que utilizan personas para atacar de múltiples maneras, oh Jehová Dios de los ejércitos, necesito una fuerza más allá de mi entendimiento, una fuerza que me haga caminar por encima de todos los problemas y dificultades que el enemigo quiera lanzar, porque sin tu fuerza Señor Jesucristo; yo no soy nada, no me dejes y no me desampares, porque hay muchos que quieren ver mi mal, y no se les ha hecho mal, sino bien. Señor, tú lo ves todo, tú eres justicia y verdad, líbrame de todo mal y peligro, libra también a mis parientes, y lléname con tu Santo Espíritu. Amen.