Nubes de blanco y suave algodón,
Hermosas, grandes y cálidas figuras,
Rosagantes y fuertes como caparazón,
Reinas y dueñas de las grandes alturas.
Vuelan con su amigo el fuerte viento,
Llevando consigo un triste lamento,
Viajeras de un mundo imperfecto,
Derramando lágrimas sin un efecto.
Dulces nubes calladas y muy tristes,
Pues nadie les cuenta algunos chistes,
Solas están en el gran espacio sideral,
Recordando un viejo mundo espectral.
Nubes llenas de tanta electricidad,
Presentes siempre toda la eternidad,
No importa si hay luz u oscuridad,
Siempre observando a la humanidad.
Nubes de blanco y suave algodón,
Hermosas, grandes y cálidas figuras,
Rosagantes y fuertes como caparazón,
Reinas y dueñas de las grandes alturas.