PARTE 8
el clima parecía estar en su contra, pues apenas cruzo la puerta de la casa la lluvia incremento, se hizo tan densa que con dificultad podía verse más allá de los pies, además de que haya oscurecido tanto por el encapotado cielo, que si no fueran por los relámpagos distribuyéndose en el firmamento nada sería visible en aquel bosque.
Bible apresuro su paso hasta el manzanar, sabía que ese era el destino principal de Build, así que debía encontrarse por esa área, pero al llegar no lo encontró, solo pudo ver su canasta con manzanas a medio recoger tirada en dirección al sendero contrario.
Su corazón latió con prisa, ese camino solo se adentraba más al bosque, no eran terrenos que Biu conociera, si los había tomado podría perderse con facilidad. Aun cuando sus ropas escurrían por la lluvia que seguía cayendo, no detuvo sus pasos y un pánico lo atrapo cuando vio trozos de tela color azul atrapados entre las ramas de los arbustos, lo reconoció inmediatamente, eran parte de la capa de Biu.
Gritaba con fuerza su nombre, pero su voz se perdía en la inmensidad del bosque, confundiéndose con el sonido de la lluvia y los relámpagos, pero no detuvo su búsqueda, siguió el rastro hasta que diviso al final la pequeña entrada de una cueva, era diminuta y oscura, pero, pero podía reconocerlo, el brillo del diamante en forma de corazón.
Se acerco con sigilo y cuando lo tuvo frente a el al fin pudo respirar bien, pero aquel chico ante sus ojos estaba hecho un novillo de miedo, su cuerpo temblaba con desespero, se notaba que estaba conteniendo la respiración y sus labios y ojos estaban fuertemente cerrados.
Bible lo dejo calmarse en aquel abrazo, cuando el chico estuvo más tranquilo se despegó y hablo.
Bible se agacho para que Biu se acomodara, lo tomo de las piernas y empezó su camino de regreso a casa, cuando estaban cerca del manzanar unas brillantes luces aparecieron en el camino, al acercarse más vieron que las luces eran de pequeños quiques sostenido por los chicos que revisaban el área.
Al llegar a casa los chicos iban y venían, trayendo toallas secas y cojas para Biu, prendieron el fuego de la chimenea, unos bocadillos para el chico que no había comido nada desde que salió en la mañana y mucho amor de todos cobijándolo.
Bible se había encargado personalmente de curar sus heridas, los demás estaban tan sorprendidos con la delicadeza con la que cuido cada una de las heridas de Biu, la forma en que limpio y vendo hasta el mas pequeño de los cortes, como si Biu fuera de una frágil porcelana.
Cuando todo estuvo en calma, Bible insistió en cargarlo hasta su habitación, donde lo arropo con atención.
A la mañana siguiente Biu despertó muy descansado y decidido a recompensar a Bible y los chicos por sus atenciones la noche anterior, quería prepararles un gran desayuno, pero quería hacer algo especial para Bible.
Indeciso entre que platillo le gustaría mas ha Bible, decidió despertarlo para preguntarle. Era raro que el mayor no hubiera despertado aun, pero después de todo su esfuerzo la noche anterior entendía que quisiera descansar un poco más.
Se acerco hasta su cama y lo llamo, cuando no obtuvo respuesta decidió picar su hombro con su dedo, pero aun así Bible no se movió, empezando a preocuparse le dio una pequeña sacudida que solo le hizo comprobar que Bible no reaccionaba.
Asustado salió corriendo de su habitación y empezó a golpear con desespero la puerta de Tong.