Aquí estamos una vez más mirándonos
¿Vemos algo? ¿Vemos a alguien?
¿Qué es lo que en realidad tanto queremos ver?
En televisión vemos rostros,
En revistas vemos cuerpos
Y en el espejo vemos desastres.
Vemos tantas sonrisas forzadas;
Cuerpos a conveniencia de palabras
Y no vemos lo que hay por dentro.
Y por la idea de la perfección, nos olvidamos de la realidad;
Olvidamos a quienes se quedan y están.
Tómate un tiempo y analiza la situación.
Perfección es una palabra que relacionamos con:
Rostros "hermosos", cuerpos "ideales", y vidas "de cuento de hadas"
Pero ¿qué tal si hacemos algo distinto esta vez?
Tomemos aquella idealización
Hagamos algo radical y hagamos nuestra propia perfección.
La construcción de un edificio lleva tiempo, dedicación.
Hasta que llega alguien con posición mayor que el arquitecto
Y todo aquel trabajo que ha hecho, cambia por completo.
Cuando aprendemos a tocar un instrumento.
Estamos tan entusiasmados y ponemos tanto empeño.
Hasta que alguien habla y destruye tu sueño.
El amor es lo que todos buscamos y encontramos.
Damos el todo por el todo, con la esperanza de recibir algo a cambio.
Hasta que alguien lo toma y se lo lleva en un segundo.
Nada es como te lo imaginas.
Pero tampoco dejes que ellos tomen todo lo que eres y serás.
Somos perfectos a nuestro modo de ser.
Cometemos errores mientras vamos caminando.
Decimos mucho mientras nos callamos.
Y dejamos que la opinión nos manipule a su conveniencia.
Creemos en el amor, en los sueños hechos realidad,
Cuentos de hadas y la vida que tanto esperamos tener.
Pero alguien con sueños destrozados llega y te destruye.
Tu castillo cae, aquel que sigue en construcción;
Tu melodía desafina, aquella que sigue en composición
Y tu fe se desvanece, aquella que sostiene tu corazón.
Dejemos de idealizar:
"El amor perfecto,
El dolor perfecto,
La vida perfecta"
Son mentiras disfrazadas de verdad.
Son ficciones con máscaras de realidad.
Nos aferramos a la idea de una perfección equivocada.
Nos basamos en una realidad alterada
Cegándonos ante aquel sueño de vida que nos han contado
Y es ahí cuando estamos siendo manejados por la opinión.