¿Qué hacía él ahí?
¿Por qué estaba ahí?
Y con los niños.
Después de lo mal que terminaron las cosas entre ambos, más porque él nunca le dio una razón de porque terminaban su matrimonio, él simplemente envió a su abogado con los papeles del divorcio y aunque ella intentó hablar con él nunca pudo.
Nunca entendió, porque, ¿que paso?, ¿por que dejo de amarla?, si las cosas iban tan bien entre ellos. Si peleaban, todo matrimonio pelea y eso era lo que ellos más hacían y él tema principal eran los celos, por parte de ambos, él la salvaba con cuanto hombre se le quedaba mirando más de tres segundos sin razón y ella con un poco de más razón, con todas las mujeres descaradas y desesperadas que su familia le tiraba a la cara.
Ellos nunca la quisieron, ellos son una importante familia en Grecia de la más rica, poderosa e influyente y ella, una chica Dominicana que estudiaba fotografía por una beca en Estados Unidos y había conocido por accidente una noche lluviosa donde casi la choca y terminaron discutiendo bajo la lluvia cómo por treinta minutos y también se enamoraron.
Desde él primer momento ellos no la quisieron y se lo dejaron claro, la consideraban una cazafortunas, pero ella nunca se dejó de ellos, de ninguno de ellos y por suerte él tampoco les creyó en sus palabras e impuso su relación, incluso se casaron sin ninguno de sus familiares en la boda, en todo caso ellos se habían casado muy apresurados, apenas tenían un mes y medio cuando lo hicieron.
Solo estuvieron casado dos meses, cómo había dicho pensó que todo estaba bien, él fue a un viaje de negocios a Grecia ella no podía ir, estaba en sus últimos exámenes para graduarse, aun recordaba lo cariñoso de sus besos y palabras cuando se despidió de ella, prometiendo llamarla en cuanto llegara, si recibió esa primera llamada cuando llegó, seguían estando bien, pero después de eso no supo nada más y estaba muy preocupada.
Llamo a todos los conocidos de él en Grecia, pero o no le contestaban, en especial la familia de él o no le daban razones, dos semanas después, su abogado llegó con los papeles del divorcio y diciéndo le que tenía que devolver absolutamente todo lo que él le había dado y por supuesto dejar él lujoso penthouse en él que estaba viviendo.
Ella no tuvo problema en eso, pero no firmó los papeles, no lo haría sin hablar con él y que le diera una explicación de porqué le pedía él divorcio tan de repente. Dos semanas más y no pudo verlo escucharlo por teléfono nada, parecía que habían puesto un muro entre ambos, incluso había terminado detenida en la cárcel porque hizo todo un escándalo en la empresa de el porque no lo dejaba verlo o le daban alguna razón de él, fue cuando no tuvo más que firmar los papeles del divorcio, si no lo hacía no la dejaban irse.
Con su corazón lleno de pena y dolor lo hizo, en todo caso ya estaba cansada de pelear por algo que él ya simplemente tiró a la basura cómo si no importara nada. Después de eso fue toda una semana de llanto y mucha comida chatarra, hasta que unos amigos de ella, la sacaron un poco de la pena, ella debía levantarse, recuperarse y salir adelante cómo lo estaba haciendo antes de conocerlo.
Ella ya se había graduado y tenía una gran oportunidad de empleo en una casa fotográfica, tenía un futuro brillante por delante y no podía dejarse caer por él, ella lo intentaba aunque seguía triste y lo que le doy la fuerza que le faltaba para seguir adelante fue la noticia de que estaba embarazada de gemelos.
No lo esperaba, ella se cuidaba, no entendía porque había salido embarazada tan rápido, pero lo había hecho y estaba sola, no buscaría de nuevo a Maximus, él ya había dejado claro que no quería saber más de ella, así que no lo hizo, tuvo a sus hijos sola e hizo una carrera al mismo tiempo y ahora era de las mejores fotógrafas del mundo, sin necesitarlo a él o a nadie más.
──¿Nos conocemos? ── preguntó Maximus confundido.
Su pregunta le dolió, recordando las palabras del abogado cuando ella firmó los papeles.
"Él señor Galekist quiere que olvide que alguna vez se conocieron o vieron siquiera no quiere saber absolutamente nada de usted"
──Por supuesto, querías que olvidara que alguna vez nos conocimos ── se quejó ella en perfecto griego, ella hablaba muchos idiomas eso le facilitó un poco la visa de estudiante, tomando a Ares para sentarlo de nuevo en su lugar.
──¿Yo dije eso?, ¿Cuándo? ── preguntó confundido colocando a Ares en su asiento también, los niños aunque no estaban entendiendo casi nada, ya que apenas sabían algunas palabras en griego, miraban atentos la conversación de los dos.
──¿Ahora tienes mala memoria ?── preguntó ella con sarcasmo, sentándose.
──Si, aun tengo muchas cosas sin recordar desde mi accidente ── contestó él, mirándola, era muy bella mujer, de piel trigueña, ojos oscuros, labios carnosos y de carácter.
Le gustaba.
No, no podía decir eso, él tenía una novia, una novia a la que le estaba por pedir matrimonio, no se podía estar fijando en una mujer con dos hijos…. Un segundo, ella dijo que se conocían y los niños se parecían mucho a él, y no se miraban desde hace más de cuatro años.
¿Podría ser?
──¿De qué accidente hablas? ── ahora ella pregunto confundida.
──Hace casi cuatro años tuve un accidente de auto estando en Grecia, sufrió grandes heridas y estuve en coma por casi tres meses, cuando desperté ni siquiera sabía mi nombre ── le contó él, ella palideció.
──¿Cómo e la vaina? ── preguntó ella en español, él no entendió bien lo que preguntó.
──¿Perdona ? ──
──¿Tuviste un accidente? ── preguntó ella sin creerlo aun, Maximus asintió── en él que casi mueres ── asintió de nuevo ──¿por qué nunca hubo noticias de ello? ── preguntó confundida él era alguien muy importante cómo no salió en las noticias, ¿cómo ella nunca fue informada.
#475 en Otros
#98 en Relatos cortos
#1323 en Novela romántica
amor mentiras felicidad, perdidadememoria, amor desilusion encuentros inesperados
Editado: 03.01.2022