Por Favor... Dime quien eres

Respirar

 

California, Estados Unidos

 

Amaria Ruiz:

 

El frío en mi cuerpo es casi insoportable para mi cuerpo, recojo ambas manos frotándolas entre sí para producir algo de calor, un escalofrío recorre  todo mi cuerpo haciendo que este empiece a temblar, siento como mis cachetes han quedado más que congeladas con el simple roce del frío, no recuerdo que hubiese pronóstico para la llegada de nieve.

Observó alrededor pero todo es desconocido para mis ojos, aún no entiendo como llegue a este lugar, todo está teñido por capas blancas y heladas.

Camino hacia adelante y mis pies se hunden un poco en el suelo por el efecto de la nieve, con dificultad empiezo a caminar arrastrando mis pies, todo aquí está tan tranquilo, es como si el bosque estuviese durmiendo o estuviese impregnado en un hechizo, no hay suspiros del viento, todo me es tan triste, como mi corazón en estos instantes.

Algo húmedo empieza a molestar mis pies, bajo la mirada viendo como mis tenis se han mojado por completo gracias a la nieve, me agacho para limpiarme los tenis ya que están cubiertos.

 Y es ahí cuando escucho un sollozo, escucho como alguien llora a mis espaldas, el miedo se aloja rápidamente en mí, me coloco de pie tragando toda la saliva que todavía hay en mi boca, con cuidado volteo pero para mi sorpresa no hay nada, observo cada rincón del bosque sin victoria alguna.

 

一 ¿Donde estas? 一 pregunto tartamudeando, mientras busco algún movimiento.

一 E-ll-llos me en-con-con-tra-ron 一 una voz temblorosa habla, es muy parecida a la mía.

一 ¡No te puedo ver! 一 volteo a  todos lados empezando a frustrarme al no entender lo que está pasando.

Los sollozos se hacen más fuertes, logrando que el viento sople en mi espalda, volteo rápidamente, mi sorpresa al ver pequeñas luces brillantes flotando delante de mis ojos lo cual me deja atónita, me acerco más para poder tocarlas sin embargo ellas desaparecen, dejándome ver un espejo, abro mis ojos de par en par al ver lo que se refleja, ¡soy yo! pero distinta, el cabello corto y más oscuro, la piel un poco más bronceada.

一 Necesito que me ayudes 一 

¡Mi reflejo me habla!

一 Bahirava quiere matarme, ¡Ayúdame! ¡Por favor! 一 sus manos golpean el espejo mientras voltea hacia los lados.

一 Dime ¿Quién eres? 一  acarició el cristal con mis dedos, no soy yo.

一 ¡ Amaris! ¡Amaris! 一

Una voz conocida grita a mi alrededor, y en solo un parpadeo todo desvanece…

一 ¡Puedes oírme! 一

 Abro mis ojos con dificultad, todo está tan borroso, parpadeo varias veces hasta que lentamente mi vista se aclara, el angelical rostro preocupado de John observa con temor mi rostro, su cabello está hecho un asco, mientras un pequeño moretón adorna un lado de su mejilla.

Puedo escuchar como suelta un suspiro.

一 ¿Como estas? ¿ Te duele algo? 一 mi cabeza da vueltas y sus preguntas me marean, sin contestar a su interrogatorio intento sentarme en el sofá, pero un horrible dolor en mi espalda se hace presente, haciendo que deje salir un gemido de dolor.

一 Déjame ayudarte 一 John con delicadeza me acomoda en el sofá, las imágenes llegan a mi mente. La rubia que desconozco llego a mi casa, se mostró muy gentil y luego se le safaron las neuronas, me habló de un protector, y un nombre, era… Bahirava.

Me quería matar…eso me aterra.

一 ¿Quien es Bahirava? 一 sin ser consciente he hablado en voz alta.

Los ojos de John me observan directo a los ojos mientras sus brazos se ponen tensos, es como si le hubiese mencionado al demonio, le hago una señal con la cabeza, él bruscamente se levanta alejándose de mí.

 

一 No lo entiendo, ella me queria matar, yo ni siquiera la conozco y… 一 trago grueso 一 ¿donde esta?一

一 Su nombre es Laila, ella logró escapar, ¡ Te dije que no salieras de casa! ¡Te advertí que la neblina era peligrosa! 一

Con dificultad respirar, no había visto a John tan enfadado, pero ¡ Necesito una maldita respuesta de lo que está pasando!; creo hasta haber visto que una luz azul salía entre las manos de la tal Laila.

一 Se supone que debía cuidarte, ¡Protegerte!, si no hubiese llegado, Laila  habría cumplido con su objetivo, ¡Por un demonio! ¿Como no pude sentirla?, Aysel no soportaría la noticia, me siento un completo estupido, no me lo perdonaría, si tu… 一

Sus pies se acercan hasta mi dirección, sentándose a mi lado.

 

Llevo ambas manos azotandolas en mis cachetes, creo haber muerto y estar en otra galaxia, o John perdió la razón.

一 Bahirava sigue tus huellas desde hace tiempo, diría muchos, por eso envió a Laila, su objetivo era acabar contigo一 escucho como suelta un suspiro 一 Yo fui enviado para protegerte, cuando Aysel se enteró que corría grave peligro, me concedió el honor de venir entre los humanos a buscarte一 él detiene sus palabras de golpe.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.