Decimoctavo capitulo: En la espesa niebla (Parte 4)

Siquiera puedo seguir en este lugar, ¿Qué fue lo que hice mal? No lo entiendo, pero debo de seguir avanzando, pero… ¡¡¡¿Qué rayos?!!! Este maldito lugar no me deja en paz en lo absoluto, me duele mi pie, me siento pésima, ¿Qué espera de mí en primer lugar? Ya no sé ni cuanto tiempo tengo de estar en este lugar, ya no tengo ni la menor idea de como me encuentro, ya que no puedo ver las heridas que tenga ni mucho menos poder tratarlas.

¡¡¡YAAAAAAaaa!!! Déjenme en paz, si me quieres ver muerta… no te daré el gusto, no sé ni como saldré de este lugar o si siquiera lo haré, pero no dejaré que sea a tu gusto. Voy a seguir avanzando aunque me tenga que arrastrar en este asqueroso lugar. Ya no sé ni cuantos años puede que haya pasado en este lugar, ya no sé si siquiera cuando regrese aún habrá alguno de mis conocidos o mi familia que me recuerde o esté ahí para recibirme, ya no… ya no puedo creer que haya alguien esperándome después de haber pasado tanto tiempo aquí.

Incluso yo ya no tengo un lugar al que volver, pero eso significará que sólo tendré que estar aquí destrozando este lugar por completo, voy a masacrarlo y no dejaré que se vayan sin recibir nada de lo que he sufrido en este sitio. Aunque me lleve años el poder ser más fuerte para conseguirlo, no me importará en lo absoluto, pues ahora ya sólo me queda seguir avanzando y dejar que todos los que estén en este maldito lugar sepan de lo que soy capaz, que sin importar qué, yo seré la única que dictará las reglas en este lugar.

Haaaa… no puedo dejar que el frio se apodere de mi cuerpo, así que debo de seguir avanzando, ya que si no lo hago de seguro que terminaré muerta por el frío, si mantengo el paso, podré mantener mi calor corporal y así lograr mantenerme consciente ante todo esto.

Si tan sólo pudiera ver una pequeña pista, sólo una pequeña me bastaría para lograr… [Sollozar en silencio] tan sólo un poco más, no me importa que sea, sólo un poco más, debo de avanzar y conseguir una pista. De verdad [Ira mezclada con impotencia] esto es lo peor.

Haaa… ya yayayayayaa… Yo soy… soy la mejor de todos… no me intimidarás tan fácilmente. No dejaré que esta cosa me termine volviendo en su comida, así que avanzaré sólo un poco más. Y… Ah [Se queda congelada ante lo que ve delante de ella] eso… ¿Qué… es?

Parece como… una… luz… ¿Será acaso que habré encontrado la salida al fin? [Un resplandor de esperanza se refleja en sus ojos] Lo que hay [Alza la mano en dirección a la luz]… justo… delante de mí… es…

------ RUWEL SALUWER -> transición de escena -----

Entre la niebla Sal se encontraba corriendo sin parar de un lado a otro, aunque buscaba una salida de este lugar, se propuso encontrar de primero a Miel, ya que en este lugar donde no se podía confiar en nada, non había alguna clase de garantía en la que podría encontrarla de nuevo una vez haya salido de aquí.

Este lugar que engaña mucho y que quitar la esperanza es una de sus principales características, podría ser capaz que al salir de aquí esta desaparezca y el volver a encontrar puede que sea casi nulo o, incluso, puede que terminara regresando por Miel ya demasiado tarde, puede que ella logre salir de este lugar, pero al no tener una forma de ver el camino como él lo tiene, lo hace más fácil que termine perdida por siempre en este lugar, además de que al no saber si hay monstruos en este lugar, puede que también esté en peligro y no sepa que hay uno delante de ella hasta ser demasiado tarde.

Después de haber estado corriendo por un buen tiempo, Sal al fin pudo ver una unas huellas, las cuales podría ser una buena noticia como mala, pero en este momento no podía darse ese lujo de dudar, así que sin pensarlo demasiado decidió continuar y seguir estas huellas.

Sin siquiera haber pasado más de una hora, fue cuando al fin la vio. Justo frente a él, quien aparecía entre toda esta espesa niebla que no dejaba ver nada, no era nadie más que Miel, por fin la había encontrado y ella, que parecía estar en shock ante esto, Sal hablo con fuerza.

Sal – ¡Miel! ¡Al fin te encuentro!

Miel, aturdida al escuchar la voz de Sal, pero no mirarlo, respondió – ¿Sal? –

Sal – Jajajajaja, al fin… al fin estamos juntos otra vez ufff… ya no aguanto correr más –

Estando ya frente a Miel, dirigió la luz del teléfono hacia él para que ella pudiera verlo. En el momento en que Miel lo vio inconscientemente le dio un puñetazo en su brazo, lo cual hizo que Sal gruñera de dolor. Esto en realidad no se lo esperaba, pero Miel que no podía estar segura al cien por ciento que era Sal, tenía que hacer algo para averiguarlo y esto fue lo único que se le vino a la mente en este momento, para luego decir

Miel – jaja… este… ¡Hola Sal! Este… jajaja, no tengo excusa del porque te golpee, pero me alegra ver que sí sean tú –

Sal – De verdad, eres… argghh… tan sólo porque en este lugar no puedo hacer nada sino te devuelvo ese golpe –

Miel – Vamos, no seas así, es cierto, es mi culpa, así que sólo diré, lo siento ups –

Sal – De verdad, haaaa… mejor salgamos de este lugar de una vez por todas –

Habiendo dicho eso, le extendió la mano a Miel, quien sin dudarlo, lo tomo y con ello Sal la jaló al empezar a correr, esto hizo que Miel tuviera que seguirlo mientras sentía que esto había sido un poco brusco por parte de él, pero en este momento no podía decirle nada, sólo esperaría a que salieran de este lugar y le daría su merecido por haberla jalado así de la nada.