Carolina
Decidí salir a caminar un rato me sentía asfixiada en mi cuarto solo quiero respirar aire puro además iré a la droguería a compartir las pastillas de abortar no se si las uses, tantas cosas en mi mente al saber que si aborto Sebastián me va a odiar toda su vida, pero él me odia va a seguir con lo del matrimonio y tendrá su familia se olvidará de mí. Si tengo a este bebe todo se vendrán contra nosotros dos juzgándonos, pero al menos Sebastián estará conmigo a mi lado como siempre he querido, aunque no puedo ignorar a su otro hijo
¿ustedes que haría? Porque yo ya no se esto es demasiado para mí, pero sé que tendré que tomar una decisión pronto.
Entro a la farmacia.
- Buenas noche me vendería una caja de Cytotec – le pregunto a la señora que esta ay .
Ella me mira raro y después da la vuelta para mirar las repisas
- si claro - veo que toma una de las cajas - aquí están - me la pasa
- gracias - la miro es una caja blanca con morado y dice el nombre de la pastilla
- señorita perdón por la pregunta, pero ¿cuántos años tiene? - alzo mi mirada
- 17 en un mes y medio cumplo 18 - ella abre los ojos
- estas muy joven ¿cuántos semanas tienes de embarazo? - hago cálculos y creo que 6
- 6 semanas - digo segura
- bueno yo no me suelo meter en cosas de mis clientes, pero piense lo que estás haciendo niña ay mucho riesgos - me dice mientras se quieta sus gafas ... Yo creo que para ella es normal ver personas de mi edad comprendo esto ya que ella las vende.
Le pago la pastillas y salgo de ay cuando veo que empieza a llover fuerte así que subo mi capota, entro mis manos a los bolsillo ya que tengo mucho frío, dejo las pastillas dentro del bolsillo del saco, no se a que horas voy a llegar a la casa ya que estoy algo lejos.
Minutos después
Empezó a llover más duro así que me toco entrar a una especie de tienda cantina ya que es como una tienda normal, pero ay muchos hombres tomando y cantando música de despecho. Dude en entrar, pero era eso o seguir caminado bajo la lluvia sabiendo que me voy a enfermar Además era la única tienda abierta ya es un poco tarde, literal me estoy muriendo de frio y parezco como si me ubica metido a bañar con ropa.
- uy belleza - se me hace un hombre como de 45 años que está bien tomado
- hola - me alejo un poco así la esquina de la puesta que tiene la tienda
- estas muy linda - intenta tocar mi cara, pero me aparto - que esquiva - dice mientras lo miro mal - ven yo te voy a tratar como una princesa - se acerca
- aléjese -lo pujo un poco
- ven - me toma del brazo fuerte atrayendo me a él
- suelte me- me intento zafar, pero es inútil
- pero por que no te dejas querer - siento su aliento asqueroso en mi cuello
- suelte me! - grito, pero ni él señor que es el dueño de la tienda, ni él otro grupo de hombre tomando hacen nada. Le golpe él pecho con fuerza, pero es inútil en vez de alejarlo el me pega más duro a él - quite se- siento sus labios con babas en mi cara
- la pasaras bien si te quedas quieta - me susurra al oído y yo volteo mi cara intentando que no me bese más - se quiere - él se acomoda y me da la oportunidad de dale una patada en su parte baja
- aaaaahhh - cae al piso - maldita!!!- grita y yo salgo corriendo como si mi vida dependiera de ellos y literalmente es verdad mi cara esta empapada y esta que cae pequeñas pepas de hilo del cielo. Granizo que hace que él piso se vea tan lindo cuando cae.
Estoy toda mojada, tengo frío y tengo miedo de que me pase otra vez lo de hace rato y que nadie haga nada. Adema eso hombre me hubiera podido violar y él bebe... Con sólo pensar eso me da un miedo y un escalofrió terrible por mi cuerpo.
Me paro en una esquina y veo que me faltan como 17 cuadras maso meno estoy cansadísima lo único que quiero es solo llegar ya. Me hago debajo de una de las tejas de una papelería que por cierto está cerrada no entiendo porque carajo los negocios cierran tan temprano apenas son las 9:10 de la noche. Saco mi celular lo primero que veo son mensajes y llamadas perdidas de Sebastián debe de estar muy preocupado
Le marco y él contesta al tercer tono
- alo -
- Sebas - mi vos es temblorosa siento como humo sale de mi boca. Estoy segura de que me voy a enfermar.
- Caro donde estas? - me dice un poco alterado
- después de una estación de policía – respondo mirando hacia todos lados - como a dos cuadras - no sé exactamente dónde estoy, pero desde aquí veo la estación de policía
- okey voy por ti no te muevas - cuelga y guardo mi teléfono
Solo espero que llegues rápido me estoy congelando apenas me doy cuenta de la estación de policía y para el colmo está cerrada, se supone que las estaciones de policía deben están abiertas a todas horas ¿verdad?
Sebastiano
- voy a salida - digo gustando mi celular
- pero amor mira como está afuera y es muy tarde - tomo mis llaves
- hijo tu esposa tiene razón - se para mi mamá de la silla
- mamá iré a recoger a Carolina - saco las llaves del auto
- ella te llamo? -
- si mamá- la volteo a mirar - que estaba haciendo un trabajo de investigación del suelo y empezó a llover. Esta un poquito lejos de aquí - me dirijo a la puesta
- Bueno ve por ella porque que más - dice mi mamá
- amor - Adriana corre así donde estoy - cuídate - me besa.
-si – le soy una sonrisa y salgo
- saldrá señor - dice Matías mientras corre conmigo ya que está lloviendo muy duro
- si - desbloqueo el carro y entro
- bueno señor tenga cuidado él piso esta resbaloso -
- lo se gracias - abra la reja y arranco el carro… Necito llegar rápido por ella ya que en su tono de vos se notaba el frio que tenía, me preocupa su salud y la del bebe