capitulo 28 (No soy buena )

Carolina

Ya llevo como 10 minutos aquí pocas personas pasan y carro ninguno casi la tormenta sigue igual nada que para, sigo en el mismo lujar porque no me quiero mojar mas de lo que ya estoy

Veo a lo lejos las luces de un carro y cuando se acerca más veo el carro de Sebastián el negro deportivo *GRACIAS DIOS*

Él parque y corro a subirme al carro.

- Estas empapadas – dice sorprendido apenas subo al carro.

-Si, maso menos- digo poniéndome el cinturón.

- ponte esto -me pasa un saco Azul oscuro de la parte de atrás.  

Me empezó a quitar mi saco negro y por suerte me puse un esqueleto blanco por debajo. Me pongo el saco que me queda algo grande ya que es de él que por cierto está lleno de su perfume y me encanta.

- que esto? - toma la bolsa que estaba dentro de mi saco

- Sebas- la abre y saca la caja de pastillas

- Es- lee lo que dice por detrás, siento un frío pasar por mi cuerpo que me hace estremecer -por esto saliste? - me mira con la caja en la mano -CAROLINA DIME ¿POR ESTO SALISTE? - grita. Me da tanto miedo al verlo así tan alterado

- Sebastián es que ...- Me interrumpe

- No - mira las pastillas con desprecio - no digas ya nada que todo quedo claro - las devuelve a la bolsa - toma tus malditas pastas- me las tira y caen en mis piernas. - Maldición - da un puño al volante del carro asiendo que suene.

-Sebastián no se si las usare - intento tocarlo, pero el quieta mi mano

- si las compraste es por algo no me creas tonto. Se que no quieres al bebe PUES MATALO DE UNA VEZ - me pellizco el muslo de mi pierna derecha para no llorar – ahora veo QUE ME EQUIVOQUE CONTIGO - eso me duele más que cualquier cosa saber que se y arrepiente de haber estado conmigo ... Duele y mucho. Mis ojos se nublan, tomo la bolsa y la aprieto en mi mano derecha con fuerza. Clavo mis uñas en mi pierna izquierda provocando dolor, pero es mínimo para mí porque él dolor que tengo por dentro es más grande... El arranca y siento la atención que ay, ahora pienso que hubiera preferido no haberlo llamado.

16 minutos

Llegamos a la casa y estaciona él carro donde siempre.

- tal vez si - me quito el cinturón - te equivocaste conmigo - lo volteo a mirar- no soy para ti - digo intenso que mi vos no se corte, él no me mira solo mira hacia el frente - tal vez para nadie - abro la puesta de carro y me bajo, quiero estalla en llanto, pero ahora no puedo.

- hola Caro - dice Adriana cuando entro

- hola - mi vos es baja

- amor - Sebastián entra

- buenas noches - paso por él lado de ella y subo las escaleras.

Entro a mi cuarto me dirijo a él baño para cambiarme me pongo una pijama blanco que cuenta con una pantalonera y una camisa de tiras,  me acuesto y cuando mi cabeza toca la almohada quedo dormida .

                                                                               Día siguiente

Me levanto con mis ojos pesado, me siento la ventana a mirar el cielo azul

Lo que le dije a Sebastián anoche antes de bajarme del carro es verdad yo no soy buena para él todo el daño que le he causado ayer por mis decisiones es algo que nunca me perdonare, él es el amor de mi vida eso ya lo acepté se me es imposible ver a otra persona con los mismos ojos que lo veo a el ... Tal vez no ame a nadie como lo amo a él, por eso lo mejor es alejarme de él dejarlo ir. Que odie y así poder liberarlo de mí de esto que le hace daño a él y a mí.

Me pongo un vestido rojo con unas botas militares negras, recojo mi pelo en una cola y bajo rápido ya que tengo que ir a la universidad

- buenos días - entro a la cocina en las cuales esta Marcela

- buenos días como amaneciste? ¿Te hizo daño la lluvia? -

- no - la volteo a mirar

- qué bueno - sonríe - A Sebas menos mal que no - Sonrió

Si por una rara razón no me hizo daño toda esa lluvia.

- bueno ya me voy - tomo una manzana

- pero come más ya llamo a Nataly para que te sirva - mi tía se para

- no tranquila, voy tarde. Adiós  - salgo de la cocina
 

Horas después

Esto está muy aburrido menos mal ya salir tengo tanta hambre que quiero ir solo por una ensalada y después irme.

- ey - Alex me asusta

- Dios - toco mi pecho

- tranquila soy yo - se sonríe

- ya me di cuenta - sigo caminando

- Caro quería agradecerte - camina conmigo

- por? - frunzo la seño

- a verme dicho todo ese día ya que si no lo unirá hecho no conocería a mi novia - increíble que me agradezca por eso

- okey - camino más rápido.

- ey - se para frente a mi

Me da un poco de rabia que me agradezca por esa maldita, por la que me cambio - estas bien? - toma mi cara entre sus manos haciendo que mire sus ojos cafés

- si -

- bueno, sabes que somos amigos así que cualquier cosa me dices. Estoy aquí para ti - sonrió levemente sabiendo que lo hice llorar y él ahora me está diciendo esto.

- gracias - me da un abrazo y yo correspondo, nos preparamos y quedan a milímetros de besarnos - bueno ya me voy - acomodo mi cabello.

- dale nos nuevos - me dice y yo sigo caminando. No niego que me dio ganas de besarlo, pero no lo hice porque sé que no lo amo además ya lo lastime demasiado.
 

- Caro - valentina me llama desde una de las mesas

- hola - me siento frente de ella

- cómo están? - me pregunta

- están? - digo extrañada

- él bebe y tu - dice obvia

- a jajaja - ríos - bien - sonrió

- y que decidiste? - suspiro a recordar todo lo que paso

- pues le conté a Sebastián - abre los ojos - se puso feliz - sobrio al recordar su reacción cuando le dije - pero cuando le dije que iba a abortar se enojó - cierro mis ojos con dolor - tanto que me dijo cosa horribles - la miro con mis ojos llorosos - pero lo entiendo - miro mis manos - yo también hubiera hecho lo mismo   - le sonrió con tristeza