::Cap 03:: ¿Y Por Qué Tanto Secreto?

Sus explicaciones parecían ser reales por lo que me disculpe con Simón
- No te preocupes pero de lo que si debemos hablar es de esos celos que tienes contra Isak, él no es una amenaza para ti, acaso yo no puedo pensar lo mismo de ti con Felice.
- Ella también es solo mi amiga, la conozco desde que eramos niños y es en la que única que puedo confiar además de tí, tu eres mi novio y ella es mi única amiga y se que debo entender que tu y este chico también lo son, pero no entiendo que es lo que me pasa.
- Deberías hablar con el psicólogo, de verdad que ayuda mucho y ahora cariño necesito seguir practicando, te quiero y te veo en la noche.
Nuevamente me disculpe por sentirme celoso de su amistad con ese chico.
- No te preocupes, ya ahora si debo irme, te amo.
Tiempo después, las clases finalmente habían comenzado y todo parecía ser normal, sin embargo, hubo un día en particular en que esa normalidad se vio un poco distorsionada.
Todo comenzó el día en que Simón decidió sentarse junto a Isak en matemáticas, asignatura,en la que según mi novio, a su amigo le costaba y quería ponerlo al corriente. Mientras que a mi me tocó sentarme junto a Alexander, un chico al que August lo había puesto en mi contra el semestre pasado.
- Hola - Lo saludé amablemente.
- Hola - Me respondió.
- No se como soportas que tu novio esté sentado con el nuevo, como es que ellos se conocen - Preguntó Alex.
- Ellos son amigos y se conocieron en coro antes de que iniciaran las clases pero para ser honesto no me agrada la idea de que estén juntos ahora y ya que estamos hablando de nuevo quería preguntarte por que nunca me diste la oportunidad de explicarte porque te tuve que culpar por el tema de las drogas.
- Si quieres hablemos eso después y ahora sigamos con los ejercicios.
Al finalizar esa clase nos tocaba deporte por lo cual debíamos trasladarnos al gimnasio donde después de unos treinta o cuarenta minutos de calentar nos tocó jugar quemados.
Pero lo que ocurrió esa mañana de miércoles fue épico en su momento, luego todo se complicó y para ponerlos un poco en contexto yo para este juego era bastante bueno ya que nadie podía quemarme y siempre terminaba jugando solo en mi equipo mientras que en otro quedaba solo una persona, el nuevo amigo de mi novio, Isak.
En un momento tuve la pelota en mis manos la miraba con determinación, todo a mi al rededor gritaban apoyando a sus respectivos equipos y en mente solo quería lanzarlo y acabar con este jugo como ganador por que cuando sonó el pitaso final, lancé el balón con tanta fuerza que terminé golpeando en el rostro a esta persona quien rápidamente colocó sus manos cubriendo su nariz después del golpe.
- Oye que te pasa, entiendo que no te agrade pero golpearlo...?  - Gritaba Simón quien después de regañarme fue corriendo a ver a su amigo.
La verdad no se que me pasó, no si quería ganar o si mis celos me obligaron a golpearlo, estaba confundido pero como le explicaba eso a Simón y a todos en realidad.
Todo mi curso estaba en mi contra por haber golpeado a este compañero que muchos ya querían.
Rápidamente se llevaron a Isak a la enfermería mientras que a mi llevaban con el psicólogo ya que todos pensaron que el accidente había sido algo personal.
- No se que me pasó pero le juro que no fue mi intención pero todos creen que si lo hice.
- La pregunta es, que es lo que piensas tu?
Ni yo sabía como responder a esa pregunta, porque en mi mente solo quería ganar el juego pero también quería borrae a Isak de nuestras vidas.
- Tal vez si haya querido hacerlo y no se porque me pasa esto pero no me gusta la cercanía que este chico tiene con Simón.
- Te asusta el echo de que te dejen, no es así o tal vez estas celoso de tu novio tenga amigos y se lleve bien con todos y tu sigas sin tener amigos.
Aquella frase me hizo mucho ruido porque, tal vez hasta el psicólogo, podría tener razón y yo no me daba cuenta.
- Esto es algo que nunca me había pasado.
- Simón es tu primer amor y por ende te da miedo a perderlo por otra persona pero no te das cuenta que tus acciones lo están alejando de tí, deberías tener cuidado y lo siento Wilhelm pero tendré que llamar a tus padres.
- Entiendo, ahora puedo irme?
Cuando salí de mi sesión con el psicólogo y dejé su oficina sentí que todos me miraban raro y también murmuraban burlándose de mi.
- Pero que les pasa? - Preguntaba constantemente pero no tenía respuestas.
De pronto, el psicólogo con quien ya había estado segundos antes me llamó y me pidió que volviera a su oficina.
- Pasa algo o le pasó algo a mamá?
Aquello me hizo recordar el dia en que se murió mi hermano.
- Primero necesito que te calmes y ahora es el momento en el que tienes que tomar muchas desiciones.
Y claramente no estaba entendiendo nada de lo que me decía, era imposible estar tranquilo.
- Tú mamá va a renunciar al trono más bien, la obligaron a hacerlo su salud no le permite seguir y me pidieron que te cuidara hasta que vinieran por ti.
- ¿Qué o por qué?
- Solo puedo decirte esto, lo otro tendrás que hablarlo con tu mamá.
Y sin más nada más que decir me senté en silencio a esperar. Sin embargo, no podía estar tranquilo y no entendía el motivo ya que lo de mi mamá se veía venir ella hace rato que ya no estaba bien.
- ¿Y por qué tanto secreto?
Solo bastaron un par de minutos para que los asistentes del palacio vinieran a buscarme para llevarme al castillo real.
Para cuando llegué el ambiente estaba muy denso por lo que rápidamente mi mamá nos citó a August y a mi a una reunión en su oficina y nunca antes había estado tan nervioso era como si una voz interna me dijera que las cosas iban a cambiar para todos en esta habitación.
- Los he citado a esta junta porque como ya deben saber, por mi salud me sugirieron dejar el trono y necesito que uno de los dos tome mi lugar.
Entré en pánico en cuánto mencionó que uno de los dos tenía que reemplazarla.
- Yo no quiero ser rey y pensé que eso te había quedado claro mamá.
Agregando después que habíamos quedado en que August se haría cargo de este puesto.
- Si pero yo tampoco estoy listo para ser rey y esa es tu obligación Wilhelm, eres el único heredero, yo renuncio.
- Mamá di algo 
- Lo siento hijo pero tu primo August tiene razón, eres el único heredero y ese día te dejé ir porque no quería tener más problemas contigo.
- Entonces para que pueda librarme de este castigo, tengo que estar muerto o no es así?
Dicho eso miré a todos por última vez y comencé correr por el pasillo y saltar por la ventana que se encontraba al final de este pero dicha ventana nunca se había abierto decidí atrevezarla sin saber que eso traería consecuencias.