- Tay, lo siento, pero esto no funciona, quiero que lo dejemos.
- Alyssa, pero que dices si nos va genial en un par de días será nuestro aniversario.
- Sí lo sé, pero esto no es como antes. Si siento esto ahora, imagínate como seria si lleváramos cinco meses o más. Enserio Tay mejor lo dejamos aquí.
- Pero Aly.
Se acerca el joven hacia la chica. La rodea por la cintura. Aproxima su cara a la suya. Acaricia su nariz con la de ella.
- Dime que no sientes el cosquilleo en tus labios para besar me.
Ella puso sus manos en su pecho apartando lo.
Hace dos meses Taylor Campbell el guapo chico de 19 años compaginaba su trabajo en la tienda informática de su padre con sus estudios en la universidad. Un día como otro cualquiera entró Alyssa por la puerta de su tienda.
- Buenas tardes, podrías mirar mi portátil, le doy al botón y no enciende.
Dijo ella al chico con gafas de pelo castaño claro, de ojos marrones.
- ¿Hola? Toc-Toc ¿estás ahí, Taylor?
Dijo ella fijando se en la placa con su nombre.
Taylor se había quedado en blanco cuando vio a la chica. Ella era muy guapa, unos rizos largos y negros, igual de negros era sus ojos y tenía una hermosa mirada y esbelta figura. Su filosofía con las chicas era, ellas me gustan y yo a ella no. Así que su vida social era una parte virtual con sus amigos de juegos online y en planes tranquilos con amigos de la universidad.
- Oh sí perdona, decías que no encendía. Sin problema, nos lo dejas y le echaremos un vistazo. Rellena esta ficha por favor y nos pondremos en contacto contigo.
De camino al coche ya no se pudo aguantar la risa. La cara tan graciosa que tenía el dependiente que le atendió. Pero en cierta manera le resulto adorable, que bajo aquellas gafas había un potencial novio en el futuro. Nunca se sabe dónde estará su querido príncipe azul.
Cuando la joven llego a casa, se puso a investigar al chico. Cosa que le resultaba sencilla, sabia su nombre y donde trabajaba solo tuvo que poder sus datos en Face y ahí le encontraría. En poco tiempo ya conocía bien a Taylor Campbell, lo que estudia, que cosas le gustaban, cuáles eran sus amigos.
Cuanto más sabia Alyssa del chico más le interesaba, era diferente a los otros chicos, era diferente a sus antiguos novios. Pero necesitaba ver lo interactuar con sus amigos.
Descubres como es alguien realmente viendo cómo se comporta cuando esta con sus amigos, o eso pensaba ella.
Su objetivo era encontrarse con él de una manera casual cuando estuviera con su grupo de amigos. Cosa que le pareció algo difícil, no solían frecuentar los mismos lugares.
Pero al parecer la suerte no la abandono del todo, el viernes uno de sus amigos iba a celebrar su cumpleaños en la bolera y allí pensaba estar ella con sus amigas. Era una oportunidad única de ver lo antes de ir el lunes a recoger su portátil.
Alyssa saco su móvil e hice una videollamada
- Rosy, Cassy, Hannah, el viernes vamos a jugar a los bolos
- A los bolos, pero eso no jugamos desde 10 años. Le dice Cassy sorprendida por los planes repentinos.
- Primita querida sabes que te quiero y adoro pasar tiempo con vosotras chicas, pero el viernes es mi aniversario con George. Así que Rosy, Cassy y primita linda cierro la videollamada. Adiós
- ¿Qué pasa con la fiesta de casa de Penny? Quería ver al guapo de Dane, siendo su casa seguro que estará.
- Que es lo de siempre y además seguro que ira Marc. No me apetece ver como Penny se echa encima de mi ex. Se excusa Alyssa
- Rosy, pierdes el tiempo él es universitario y solo sale con universitarias, estará en la fiesta vigilando porque sus padres estarán fuera. Así hagamos lo por Aly y olvídate de él.
- Os quiero chicas, sabía que no me fallarías y quien sabe igual encuentras algún guapo universitario en la bolera
- Si bueno dudo mucho que unos universitarios se pasen un viernes noche en la bolera.
Estaba acostumbrada a salirse con la suya, estaba feliz de que sus amigas aceptaran el plan. La semana pasó tranquila hasta llegar el día de la quedada.
Era viernes por la noche. Estaba Taylor con sus amigos jugando y pasando se lo bien. Cuando por la puerta apareció tres guapas chicas, les resulto imposible no quitar les la vista de encima. Mientras ellas se registraban ellos murmuraban.
- Creo que es un regalo divino por mi cumpleaños, suelta uno.
- Tu estas flipando le suelta otro amigo.
- Creo que ir a hablar con ellas, no puedo desperdiciar este regalo.
- Solo recibirás calabazas. Vamos Taylor apoya me en esto.
Taylor se había vuelto a quedar en blanco mientras miraba a Alyssa.
- No me digas que tu también.
- No, no es eso. Solo que a la de pelo largo la conozco, vino el otro día a la tienda.
- Mejor así tenemos excusa para ir a hablar les.
- No, tío seguro que ni se acuerda de mí.
- No lo sabrás sino lo intentas - le insistió-!vamos que es mi cumpleaños!
Las chicas se pusieron a jugar, no lo hacían del todo mal.
- Veis es divertido, y el ambiente no está mal.
Les intenta convencer Alyssa, tras las caras de decepción de sus amigas.