Connor
Margaret me asigno una oficina en él laboratorio... debía supervisar los resultados de las pruebas apenas dieran inicio.
Cada una de ella me parecían sumamente retorcidas.
Cuando se iniciaron las primeras pruebas hace 10 años con sobrevivientes, se concluyó qué los sujetos eran immunes gracias a una enzima alojada en él cerebro, está era capaz de combatir él sistema nervioso central, es decir, combatir al virus. Virus qué aún no tiene origen.
Pero jamás se logró realizar una cura... Las enzimas no eran lo suficiente fuertes y los sujetos morían al instante. Cada uno de los esfuerzos fue completamente inútiles.
Margaret cree qué nuestro grupo puede ser la clave, qué al estar aislados tanto tiempo esa enzima se volvió más fuerte.
Los expedientes de los primeros candidatos se encuentran en mí escritorio a la espera de ser revisados. Contengo la respiración y la abro.
La foto de Dante es la primera qué veo, junto a un anunciado que dice: sujeto número 301, aprueba la primera fase con éxito" supongo qué lo darán de baja momentáneamente y lo llevarán a las celdas.
Camila es la segunda, su expediente dice: sujeto número 302, primera fase inconclusa. Junto a ésto, están los signos vitales, sí llegará a sobrevivir la segunda prueba sería todo un milagro.
Cierro la carpeta de golpe y me recargo en la silla mirando el techo.
Ya era muy tarde. Debía actuar rápido.
El plan había fracaso, después de tanto tiempo, jamás creí volver a verla. Pero ahí estaba, volviendo mí vida una mierda.
Hace 5 años qué no hacía un reporte a la unidad de investigación, no quería hacerlo, debían creer qué estaba muerto. ingenuamente lo pensé por un largo tiempo.
No iba a permitir qué dañaran a los qué amo... aún así jamás pude contarle la verdad a Emma y es por eso qué estoy sumamente jodido.
Cuándo Margaret me preguntó el porqué de la descomunicacion tuve que decirle qué era una falla del bunker. Mis palabras fueron tan convincentes que logré qué lo creyera.
La única manera de escapar de ella para siempre es acabando con toda esta mierda desde adentro, por eso debía hacerle creer que estaba de su parte.
Todos los sentimiento qué pude tener por mí querida madre se habían extinguido al darme cuanta de su Crueldad.
Lastimó a los qué quiero, deberá pagar por ello.
Reúno los papeles y me levanto del escritorio. Cuándo estoy apuntó de salir, tocan la puerta.
—Adelante —digo dejando las cosas en la mesa de vidrio.
Margaret entra y cierra la puerta tras ella.
— Las pruebas han sido un fracaso, ¿Desde cuándo la gente se volvió tan débil?
— ¿Los sujetos no muestran avances? —Me vuelvo a sentar en el escritorio.
— Solo uno, aún no logra pasar todas las pruebas, deben estar débiles, hace horas qué no resiven ni una gota de agua.
Mi pierna se mueve inquieta abajo del escritorio.
— ¿Eso no perjudicaría las pruebas? Digo, sí están débiles no rinden lo qué necesitamos.
— Tienes razón, haré qué le lleven un poco de agua.
Recuerdo qué Emma no toma agua directamente del griffo. De echo, la odia. Siempre tomaba agua con limón.
— Deberías llevarle un poco de agua con limón. —Margaret frunze el seño pero no dice nada —El limón aporta una gran cantidad de vitamina C y potasio , recompensa la falta de alimento.
Ella asiente dudosa.
—Haré qué vean ese tema... Mientras, tengo algo más qué mostrarte.
.
Emma
Cuándo dije qué no tenía hambre fue hace 5 horas.. y claramente me equivocaba. El estomago me suena. Tengo la boca seca. Podría matar por un vaso de agua en este momento. No es una de mis cosas favoritas en el mundo pero no la Rechazaría.
Estoy recostada boca arriba sobre él helado piso de la celda, en esta mugrosa celda no hay ni un banco para sentarse.
Nadie habla, creó qué estábamos nerviosos, en cualquier momento entrarán se llevaran a dos más de nosotros.
Estoy angustiada, preocupada por Tyler, preocupada por Cami, incluso del idiota de Dante.
Es en ese momento cuándo los guardias entran con un inconsciente Dante. Abren la celda y prácticamente lo lanzan al interior.
Tyler quién se encuentra sentado se incorpora rápidamente y camina hacía las rejas.
—¿Dónde está Camila? —dice preocupado. —¿Qué le hicieron?
Me incorporo lentamente. Tyler golpea la reja pidiendo explicaciones por Cami. Los guardias no responden y vuelven a salir. Maldice enojado.
—Debemos salir de ésta mierda ahora. Camila necesita mí ayuda. —dice tratando de forzar la reja.
—¿Puedes calmarte? No vas a lograr nada. No puedes forzarla —digo pegada a la reja.
—Creó qué deberíamos preguntarle a Dante primero... solo hay que esperar qué despierte. —habla Alexander.
—Sí despierta... —dice Tyler.
—Hay qué pensar positivo... —le digo. —estará bien.
La verdad no estaba segura de lo qué decía, talvez decía lo qué mí corazón quería creer.
Las puertas se vuelven a abrir.
—¿Ahora qué? —pregunta Alexander irritado.
Los guardias entran con 4 botellas de agua..... ¿Con limón?
Alex resive la botella
—Vaya qué considerados...¿No tendrán por casualidad unas galletitas? —Los guardias lo ignoran. — ¿No?
—Cállate, y tómala. Margaret los necesita hidratados...
Me lanza la botella la cuál cae en mis pies. Efectivamente era agua con limón. Solía tomarla todos los días en el Búnker.
¿Cómo es qué ellos lo sabían? Y entonces me recordé, Connor se lo tuvo qué haber dicho. Recuerdo qué me guardaba la suya para qué pueda tomarla en la noche.
Una pequeña sonrisa involuntaria se me escapa al recordar. La borro enseguida.
Los guardias abandonan las celdas. Me siento en él piso y abro la botella. La tomo tan rápido qué me llega a doler el estómago.
Dante empieza a despertar poco a poco, mientras se queja de un dolor fuerte en la cabeza.