Para mi abuelita Nuria:
Abuelita, ¿recuerdas aquel día en que fuiste por mí a la escuela? Ese día me sentí tan feliz, por primera vez en hace mucho tiempo alguien iba por mí a la escuela. Hiciste el sacrificio de ir por mí a pesar de que ya eres una anciana y te cuesta caminar, todo fue por tu gran amor hacía mí. Ese día también pasamos a la pulpería y me invitaste a las golosinas, quizás para muchos eso sería algo mínimo e insignificante, pero para mí, para mí significó mucho ya que casi nunca me regalaban algo. ¿Cómo no amarte abuelita Nuria? Mis mejores momentos los disfruté contigo, los peores también los vivimos juntos porque sólo tú estuviste para mí. Días y noches, sin importar nada nunca me abandonaste.
Porque fuiste mi abuela, esa que se desveló por mi bienestar todos los días.
Porque fuiste mi más grande apoyo en los momentos buenos y malos.
Porque fuiste mi más grande amor, la única persona en mi familia que me amó, justo por eso te cuidaré desde el otro mundo.
Tu nieto, Mathias.