Capítulo 9

Narra Morgan Olson

Pasaron los días e Isaac solo me ignoraba, cada vez estaba más distante de mi después de ese día, yo me la pasé encerrada viendo película o series de Netflix

Era de mañana y nos encontrábamos todos desayunando en la cocina, incluyendo a mi madre y a Andrew, nadie decía nada hasta que decidí platicarle a mi madre sobre Emma

— Mamá ¿qué crees? — le pregunto ansiosa 

— ¿Qué pasó hija? — y dejó los utensilios en la mesa para ponerme atención 

— Llamo Emma hace algunos días, ¡Me dijo que vendría a visitarme esta semana! — 

— ¡Eso es genial hija! ¿Cuándo llega? — me pregunta ansiosa mi madre, ella también quiero mucho a Emma

— No lo sé, no me lo ha dicho — tengo que preguntarle a Andrew también si se puede quedar aquí — Andrew, ¿puedo preguntarte algo? —

— Por supuesto que sí Morgan, dime — 

— Emma es mi mejor amiga, me ha llamado para decirme que me vendrá a visitar, ¿Puede quedarse aquí mientras me visita? — 

— Por supuesto que sí Morgan, no tengo ningún problema con esa ya que será tu invitada, esta casa es muy grande y tiene muchos cuartos así que no veo el problema — me dice Andrew feliz 

— ¿Encerio? ¡Gracias muchas gracias! — y seguimos comiendo, por algún momento llegué a voltear con Isaac, estaba concentrado en su comida sin prestar atención a otra cosa, en ese momento su mirada se cruzó con la mía, a lo que él la apartó rápidamente y volvió a voltear al plato de comida. 

Por alguna extraña razón me siento extraña o mal al momento en el que él me evita, me responde cortante y no me gusta eso ¿acaso hice algo mal?, no lo entiendo. En el momento en el que nos levantamos de la mesa me llegó un mensaje de Alice

Mensaje de: Alice: Hola Morgan, ¿tienes tiempo para salir hoy? ¡Mi hermano está aquí! Quiero que lo conozcas así que hay que salir ¿tienes tiempo? 

Mensaje a: Alice: Por supuesto que sí Alice, ¿los encuentro en el centro comercial? 

Mensaje de: Alice: ¡Por supuesto que no tonta! Te recogemos en tu casa, alistate 

Mensaje a: Alice: Bien, aquí los espero 

Subí a mi habitación casi corriendo una vez que nos levantamos de la mesa, antes de entrar la mano de Isaac me detuvo

— ¿A dónde vas con tanta prisa? — me pregunta como enojado-desconcertado 

— Eso no te importa, ahora quítate de mi camino — intenté quitar su mano para que me dejara pasar pero en un movimiento rápido, la misma mano tomó mi cintura y me pegó más a él

— Oye... sueltamé — le dije intentando no gritar para que nuestros padres no nos escucharan. Intenté safarme de su agarre de nuevo, pero fue inútil... de nuevo 

— Isaac, sueltame, tengo prisa ¿qué te pasa? Primero me ignoras y después haces esto, ¿¡Acaso eres bipolar o qué!? — mientras más luchaba en salir, más se aferraba a mí, eso provocaba que nos acercaremos más poco a poco, deje de moverme 

— Créeme Morgan que lo intento, pero no puedo — sus palabras eran sinceras, lo sentía de algún modo extraño 

— ¿Qué es lo que intentas Isaac? — cerró los ojos y no me respondió nada, recargo su cabeza en mi hombro y me abrazó, pero ese abrazo ya no era a la fuerza, acepté gustosa cuando sus manos me estamparon hacia su cuerpo, nos sumergimos en un abrazo cálido y lindo, después de algún tiempo me soltó sin decir nada y se metió a su habitación. Ya me estoy acostumbrando a sus cambios de humor repentinos... pero bueno..., me metí a mi habitación y comencé a arreglarme

Primero me metí a bañar, después salí y me puse unos simples jeans junto con una camisa que me regalo mi madre y con unos tenis blancos, me gusta vestirme simple, o creo que me visto simple. Me maquillé y me peine un poco y justo cuando estaba termiando se escuchó que alguien se estaba presentando abajo, después Tamara vino y tocó mi puerta 

— Morgan, una señorita la busca junto con un joven, la muchacha dice que se llama Alice — me dice Tamara por detrás de la puerta 

— Sí, gracias Tamara, déjalos pasar, ahora bajo — y se fue. Tomé una bolsa y bajé, me encontré a Alice sentada en la sala

— ¡Hola Morgan! ¡Me da mucho gusto verte! — y nos abrazamos 

— A mi también Alice, ¿y tu hermano dónde está? — 

— Está afuera, dijo que nos esperaba afuera — parecía que estaba muy feliz porque en todo momento estaba sonriendo 

— Bien vamos, primero iré a avisarle a mi madre, ahora vengo, espérame — y me dirigí hacia el estudio de Andrew, es dónde suelen hacer las cosas de trabajo. Toqué la puerta y me dijeron que pasara, estaban sentados con unos papeles en las manos

— Mamá, solo venía a decirte que voy a salir un rato con una amiga que conocí — 

— Sí, está bien pero... ¿quién es el chico? — levantó la mirada, su mirada me decía que le contara todo

— Él... es, es su hermano — le dije indecisa 

— Está bien hija, cuídate y diviértete — me dijo sonriendo 

— Gracias mamá, ahora vengo — y salí del estudio, cuando hiba a ir con Alice sentí la presencia de alguien desde las escaleras que me miraba, volteé y era Isaac cruzado de brazos y con una mirada penetrante sobre mi que me intimidaba, su mirada me provocaba un tipo de miedo porque no se movía ni decía nada, solo estaba ahí... parado mirándome como si me quisiera asesinar, esto es incómodo, voy a hablar 

— ¡Hey tu! ¡No me mires así! ¿Tienes algún problema conmigo? — traté de parecer firme y precisa, pero eso hiso que su mirada de tornara más obscura y con más furia, empezó a morderse la mejilla por dentro en señal de frustración 

— ¡Isaac! ¡Demonios que no me mires así! — y empezó a bajar las escaleras sin decir una palabra, como en una película de terror. ¿¡Dónde diablos está Alice para que me saque de este problema!?.

Empecé a retroceder cada vez que se acercaba más a mí, enserio parece que me va asesinar. Me molesta tenerlo tan lejos, pero también me molesta tenerlo tan cerca de mí, porque cuando se me acerca así, siento la necesidad de abrazarlo y quedarme así por siempre, no quiero sentir esa absurda sensación que desde que lo vi me pasa.