Capítulo 43|"Frágil"

Abby

La aparente tranquilidad de Matthew no era otra cosa más que una fachada que pretendía ocultar sus verdaderos sentimientos. En el fondo sabía cómo eso terminaría. Por mucho que deseara no hacerlo, acabaría lastimándolo. 

No quise verlo en su departamento, así que le pedí que nos viéramos en un café cualquiera. Quise pedir un café, pero él me regaló un batido de chocolate que no me atreví a rechazar. Su tranquilidad aparente y su manera de actuar tan de siempre me hicieron sentir ligeramente cómoda, a pesar de que en mi cabeza existía un lío. No quería romperle el corazón con mis palabras.

ᅳConozco muy bien tus gestos, pequeñaᅳ esa frase dicha por él fue la que dio pie a que mi decisión de hablar se hiciera más fuerteᅳ, sólo tienes que decir lo que quieres decir. No te preocupes por mí, voy a aceptarlo. 

ᅳMatt...ᅳun silencio. Un silencio que decía muchas cosas y mi garganta seca, casi asfixiándome con mis palabrasᅳ, no siento lo mismo por ti y no voy a sentirlo tampoco.

Cruel. ¿Acaso fui cruel? En ese momento me sentí bien de decirlo, porque no estaba mintiéndole. Aclarar las cosas me estaba liberando de una manera exquisita. Sus ojos dejaron de mirar a los míos y luego regresaron penetrándome con una mirada que sólo emanaba pena y, tal vez una pizca de vergüenza. No lo sé, no podía estar segura de lo que eran sus emociones en ese momento, pero de seguro no era algo bonito. 

ᅳEntiendo...ᅳ Otro silencio. Uno que era más suyo que mío, porque de pronto las palabras empezaron a salir de mi boca sin reparo. Odiaba verlo decaído y sólo comencé a soltar frases de consuelo que al final no ayudaron en lo absolutoᅳ. Por favor, no digas nada más y, perdón. Necesito estar solo ahora. 

Lo vi marcharse. No hice nada al respecto, me quedé pasmada, observando en la dirección de sus pasos y hasta me olvidé de pestañear con regularidad. Cuando volví en mí ya no sentí tanto alivio... 

Le había hecho daño a una persona que estimaba profundamente.

Crecí. Cambié. Olvidé. 
El amor de Matthew correspondía a una Abby que ya no existía y que no volvería nunca.

ᅳHiciste lo correctoᅳDerek apareció junto a mí. Le había pedido que me acompañara para enfrentar la cobardía. Mientras Matthew hablaba conmigo, el híbrido fingía ser un cliente más, ubicado a unas cuántas mesas alejado de nosotros.

ᅳ¿Entonces por qué duele tanto?

ᅳPuedo hacer que no duelaᅳ, sus ojos soltaron un pequeño brillo. En su mirada vi compasión y sabía que se refería a utilizar sus poderes para ayudarme y que mis sentimientos volvieran a la calma. Pero no. Sentía que merecía sentir aquello. Era lo correcto.

ᅳPrefiero dejarlo así... gracias.

ᅳMe refería a élᅳdijo a lo que soltaba una sonrisa maliciosaᅳ, no voy a hacer que supere todo de una vez, pero... puedo hacer que el proceso no sea tan complicado.

ᅳMe encantaría que Matthew estuviera bien pronto.

ᅳEntonces, no se diga más...ᅳ El híbrido se alejó a pasos rápidos de donde mis ojos podían verlo. Sonreí un tanto aliviada. Tener amigos raros, con habilidades aún más raras era increiblemente conveniente.

Muchas cosas estaban cambiando en mi vida y no me parecía que fuera algo terrible. Cada día me sentía un poco más amada por Hunter, cada día le amaba más y era exageradamente feliz de tenerlo en mi vida. Estaba absoluta y totalmente segura de que lo sentía no era algo banal y, con todo eso y más aún así no lograba decidirme. No me sentía lista para la eternidad que Hunter sugería. El amor es algo mmaravilloso, pero ¿puede ser eterno?

ᅳ¿Y colmillos cómo está?ᅳPapá había mejorado bastante su relación con Hunter y eso me alegraba. Quizá su repentino cambio de humor se debiera a la noticia de que pronto sería padre de gemelos.

ᅳPapá, ya te he dicho que no le llames así. Katherine podría escucharte.

Josh soltó una risa y me observó con aires de diversionᅳPero, hija ¿Quién diablos me va a creer que tengo por yerno a un Vampiro?

ᅳ¡Papá!ᅳchillé a modo de protesta.

ᅳ¡Hija!ᅳchilló él en respuesta, pero burlandose claramente de míᅳ, perdona es que es todo tan extraño. ¿Qué edad crees que tenga? ¿Habrá conocido a los dinosaurios?

ᅳ¡Diós mío, papá! Ni se te ocurra hacer esas bromas en frente Hunter.

ᅳDemasiado tardeᅳPapá sonrió de oreja a oreja con aires de autosuficiencia y señaló a algo tras de mí. Obvio se trataba de Hunterᅳ, además me lo debe. Aparece de la nada en casa y cada que se le da la reverenda gana. Debo vengarme de algún modo.

ᅳEn lo personal me resultaba interesante observar a los telociraptors, señor WinsleyᅳGiré sobre mis talones al escuchar la voz de Hunter y lo observé divertida ante su respuesta.

ᅳ¡Por Dios! ¡Mi pequeña e inocente bebé está saliendo con una verdadera momia!ᅳ mi padre se llevó ambas manos a la cabeza y negó. Luego se marchó de la sala de estar y nos dejó a solas.