Capítulo 35 instinto Maternal

Máximo

La idea que tuvo mi madre de tomarme fotos con Bianca, la verdad no me agradó para nada, pues, por mucho que me agrade y le tenga cariño a mi novia, no quiero que nadie se entere aún de mi relación con ella.

Siento que es muy pronto como para hacerlo oficial, además después de que fui el as me ríe de todos cuando resulte engañado y quede como idiota.

Después de que le propusiera matrimonio y ella me engañara, no sé aún no estoy listo, es por eso que esto me parece mala idea.

Y me pareció más mala idea después de que el tío Ricardo, mi familia, pero en especial mi madre y mi hermana querían que la abrazara, no sé qué les pasa.

Para ser sincero si me quería comer a besos a Bianca, pero enfrente de ellos no.

Sin embargo, cuando llegó el odioso de Héctor a decirle a mi tío que quería tomarse fotos con Bianca, una rabia inexplicable me invadió y por impulso tomé a mi mujer de la cintura porque eso es Bianca Sofía, mi mujer hasta quedar frente a frente casi nos dábamos un beso

pude notar que mi novia se desconcertó totalmente por mi acción, pero no dijo nada, solo me siguió la corriente.

Cuando mi tío vio esto sonrió y dijo.

—ay sobrino mío, saliste igual que tu padre, pero eso está perfecto, esa pose me encanta, así manténganse, serán unas muy bonitas fotos.

—exactamente así continúen, pero qué bonitos se ven juntos amo este hijo de verdad.

—si es verdad hermano se ven muy bien juntos.

Después de escuchar eso me di cuenta de que había perdido la compostura y eso iba a revelar nuestra relación.

Así pues, sin más solté a Bianca, acción que la desconcertó, pues, se vio en mi rostro, por último le dije a mi tío que la sección había terminado.

Me bajé del área donde estaban tomándonos las fotos y de repente mi celular comenzó a sonar, era el traidor de Eitan la verdad no quería contestar, pero creo que merecía una explicación para lo que había pasado la última vez, así que sin más solo pedí disculpas y fui a tomar la llamada.

—buenas tardes, dime qué cuál es motivo de tu llamada.

—buenas tardes, Máximo mira antes de que cuelgues te voy a comentar, yo solo soy un fin defensor del almirante verdadero, es por eso que me prestó para estas cosas.

—defensor del amor mal amigo es lo que eres de verdad como se te ocurre hacerme, eso, yo no quiero hablar con esa mujer, quiero que te quede claro.

—no amigo, necesitas escuchar lo que ella tiene que decirte, de verdad ustedes deben hablar, deja el berrinche y no te atrevas a colgar.

—hola mi amor de verdad, escúchame, no te atrevas a colgarme por favor.

—es en serio que as caído tan bajo Briseida, por favor que no te quedó claro que ya no me quiero que me molestes ni me llames más, pero yo tengo la culpa por contestarle a ese mal amigo mío que lo único que ha hecho es traicionarme.

—por favor Máximo escúchame dame una oportunidad de explicarte como fueron las cosas por favor.

—ya te dije que no me interesa escucharte.

—por favor de verdad yo te amo y tú me amas porque sé perfectamente que no me has podido olvidar.

—Briseida, por favor no hagas esto más cansado y ya en serio no me busques, no me llames o de lo contrario pondré una orden de restricción en tu contra, te lo advertí hace rato y no me quieres escuchar.

—amor de verdad no comprendo por qué te pones así, solo escúchame por favor.

—no soy tu amor y no me te quiero escuchar ok ya estoy arto de este acoso me entiendes.

—ahora le llamas acoso a esto a claro yo siento que me tratas así porque ya tienes a otra tipa de verdad es eso mira te juro Máximo que si me entero de que tienes otra mujer soy capaz de todo con tal de separarte de ella me escuchas la elimino de la faz de la tierra.

—estás enferma Briseida, yo tengo todo el derecho de volver a hacer mi vida y estás loca si piensas que yo dejaría que lastimaras a mi novia.

—que ósea no me lo niegas si estás saliendo con alguien más de verdad no tienes descaro de verdad si los voy a matar a los dos descubriré quién es los aré infelices a los dos en especial a ella porque tú eres mío y nadie se mete conmigo tú vas a regresar conmigo rogando que volvamos a estar juntos y yo aunque enojada te aceptaré porque te amo.

—de verdad que si estás enferma Briseida en primero no tengo novia solo es una situación hipotética si tuviera no dejara que siquiera le tocaras un cabello tú no te enterarías nunca me entiendes además en segunda ya no quiero hablar contigo me irritas adiós.

Después de decir esto, termine por colgar la llamada totalmente furiosa.

Y un poco triste, pues, de verdad no puedo creer que mi ex prometida no comprenda.

Que ya no quiero nada con ella y sobre todo que me amenazara con destruir a mi novia definitivamente es algo que no voy a permitir.

Después de esta amenaza tengo otro motivo más fuerte para evitar que alguien siquiera sospeche de mi relación con Bianca.

Pues no quiero ponerla en ninguna clase de peligro ni hacerla pasar un mal rato.

En fin tenía que regresar con los demás, pues, siento que ya había tardado bastante hablando por teléfono y no quería que me molestaran con preguntas como de con quien estaba hablando y eso así que sin más decidí volverme a acercar a donde mi tío tomaba las fotos más, sin embargo, lo que vi me hizo enfurecerme aún más.

Pues cuando llegue al lugar vi que estaba el maldito de Héctor tomándose fotos con mi mujer y mi hermana, eso hizo que me hirviera la sangre.

Estaba por decir algo cuando mi madre se acercó a mí y me dijo.

—mi amor sé perfectamente que estás saliendo con la señorita Durarte, no tienes por qué negármelo, es más, no sé ni porque no quieres que nadie se entere.

—no sé de qué me estás hablando madre, por favor no digas disparates.

—no es ningún disparate, mi amor es la verdad.

—madre de verdad estás diciendo puros disparates, no sé de dónde sacas eso de verdad, ahora si me disculpas necesito hablar con mi asistente, surgió un negocio importante y tengo que hablar con ella si o sí.