Máximo
En serio no puedo creer que mi hermana y mi mujer se bajaran de la camioneta dejándome solo.
Pues tienen esa idea de que me preocupa que haya tanta prensa presente, no voy a negar que si le incomoda un poco que mi relación con Bianca se haga pública.
Pero sé que es algo que es inevitable que pasara, pues, le revele a Briseida mi relación con Bianca y eso abrió la puerta a que todo el mundo sepa mi secreto.
Que evidentemente ya no es tan secreto, pues, en un arranque de locura, termine por confesarle la verdad, en fin, suspire y pues resignado, decidí enfrentar lo que viniera así, pues, bajé de la camioneta.
E inmediatamente una ráfaga de flashes me aturdió los ojos, mis guardaespaldas inmediatamente se acercaron a mí para protegerme de todos los cuestionamientos que la prensa me estaba haciendo.
Camine custodiado por ellos en dirección a donde estaba mi mujer y mi hermana, sin embargo, cuando estaba por llegar a ellas.
De repente apareció enfrente de mí Daniela Bustamante, a quien mis guardaespaldas dejaron pasar por qué se los pedí, sin embargo, me arrepentí porque cuando estaba cerca de mí me plantó un beso en los labios que provocó que todos los paparazzi se alteraran y tomaran fotos.
En cuanto caí en cuenta de lo que estaba pasando como pude sin ser grosero, hice a Daniela a un lado y seguí caminando.
Asia, mis mujeres, sin embargo, tuve que pasarlas de largo, pues, los paparazzi no dejaron que me acercara a ellas cosa que sé.
Perfectamente que las molesto, pero no había nada que pudiera hacer cuando llegamos al jardín de la casa de mis abuelos todo estaba perfectamente adornado de flores y cristales preciosos, definitivamente se veía que mi hermana y de mi mujer.
De repente escuché la voz de mi papá quien me dijo.
—Máximo es de verdad increíble como te persiguen los paparazzi, tanto que dejaste a tu hermana y a la señorita Durarte atrás.
—hola papá también me da gusto verte buenas noches, ya sabes cómo me persiguen las cámaras.
—si lo sabemos hijo, pero mi amor creo que esta vez tú les has dado razones.
Dijo mi madre quien estaba al lado de mi padre, estaba por responderle cuando de repente Daniela se me adelantó y dijo.
—señora Montero, en realidad el escándalo que se armó fue por mi culpa porque sé perfectamente sus palabras son para mí por lo del beso.
—como sea Máximo no detuvo el beso, así que también es su culpa, por cierto, Daniela de muy mal gusto lo que hiciste.
Esas últimas palabras las dijo mi hermana, quien estaba llegando a donde nos encontrábamos mis padres Daniela y yo.
A su lado estaba mi Bianca, quien tenía una cara de odio y tristeza, quería hablar con ella, pero en medio de todos en la fiesta no se iba a poder, después de todo la gente no sabe de mi relación con ella.
Y para ser sincero me gustaría que así siguiera, estaba por decir algo cuando de repente mi princesa se me adelantó y dijo.
—bueno, creo que ya llegó el momento de pasar a nuestros asientos de acuerdo porque ya estoy por comenzar a inaugurar el evento.
—me parece perfecto, te parece Máximo si te sientas en la mesa donde está mi familia.
—no querida Daniela Máximo no puede sentarse contigo, los lugares ya están asignados.
—mi querida Lauren, yo creo que sí se puede hermosa, ya que mi hermana no pudo asistir, así pues, sobra un lugar.
—además, mira mi padre está llamando a Máximo, quiere que se siente a su lado, así que vamos Max, no perdamos más tiempo.
Después de decir esto, Daniela me tomó de la mano y me jaló para caminar a la mesa de su padre sin que yo pudiera hacer o decir algo.
Sabía que esta acción me iba a traer problemas con Bianca, sin embargo, las cosas ya habían pasado y ya no había marcha atrás.
En cuanto llegamos a la mesa busqué con la mirada a mi mujer y mi hermana, no las ubicaba solo a mis padres y abuelos, quienes me miraban con mirada de desaprobación.
Trate de ignorarlos, después les explicaría bien las cosas, pero por ahora lo único que me importaba era encontrar a mi mujer y hermana.
Sin embargo, no estaban por ningún lado a quien por desgracia si vi que estaba sentado en una mesa cerca del escenario era a Héctor quien estaba junto a Ximena y Cristian.
Estaba por quitar mi vista de esa desagradable escena cuando de repente pude ubicar a Bianca y mi hermana quienes estaban llegando a la mesa de insoportable de Héctor.
Cosa que realmente me molesta, pues, no quiero que ese hombre esté cerca de mi mujer, pues, sé perfecto cuáles son sus intenciones.
De repente una ira inmensa me invadió todo el cuerpo cuando el odioso de Héctor se levantó de su silla para abrazar y darle un beso en la mejilla a mi mujer.
Estaba por levantarme de la silla cuando de repente Bianca se apartó de él para que mi hermana pudiera saludarlo, cosa que me tranquilizó y evitó que me levantara.
Sin embargo, me volví a intranquilizar cuando vi que Bianca se sentó alado de Héctor y mi hermana se sentó al lado de mi mujer, eso no me pareció para nada.
Estaba totalmente en un ambiente de cólera, estaba por enviarle un mensaje a mi mujer cuando de repente vi que mi hermana acompañada de mi Bianca.
Eso me extrañó realmente, sin embargo, no tuve tiempo de pensar nada, pues, inmediatamente la voz de mi hermana se comenzó a escuchar cuando dijo.
—buenas noches damas y caballeros bienvenidos sean a la subasta anual a beneficio de los niños con cancer de mi nombre es Mariana Lauren Montero Gonzalez de ante mano quiero darles las gracias a cada uno de ustedes por estar aquí en esta noche que espero sea mágica para todos ya que todo esto es para beneficio de esos angelitos mis pequeños guerreros que luchan día a día con esta terrible enfermedad así que pues hoy yo seré su presentadora pero alerta no lo aré sola estaré junto a mi mejor amiga mi hermana la señorita Bianca Durarte para quien pido un fuerte aplauso para que venga conmigo.