Bianca
han pasado 6 meses desde que los abuelos Montero murieron y que nos enteráramos de todo lo sucedido en el pasado de los padres de mi demonio de ojos azules.
En todo este tiempo Máximo ha estado muy paranoico por la nota anónima que directamente lo amenaza a él y a todo lo que quiere ósea, eso me incluye a mi cosa.
Que lo inquieta mucho, pues literalmente no me deja sola ni un minuto, debo decir hasta guardaespaldas, tengo eso no me agrada para nada, pero comprendo la preocupación de mi amor.
Todo está muy tenso, pues, desde que nos dijeron la verdad, las cosas se han complicado, pues, se puede respirar un ambiente de tristeza e incertidumbre en la familia Montero.
Los señores Montero están muy preocupados por sus hijos, eso lo sé los llaman todos los días, pero en especial a Máximo, pues como ya todos sabemos, la amenaza era directo a él.
En cuanto a nuestra relación, todo va viento en popa, pues, estamos muy bien más unidos que nunca, de hecho en la boda de Ximena y Erick, que fue hace apenas una semana tuvimos una conversación que debo admitir, me emocionó bastante, pues, Máximo me hizo comentarios.
Referentes a que sería bueno que él y yo diéramos el siguiente paso y no hablo de casarnos, sino de vivir juntos, cosa que e de decir si me emociona bastante, pero a la vez no porque eso significaría que dejaría a mi ángel de ojos azules.
Y eso no me agrada, pues, no quiero dejarla sola, ella me abrió las puertas de su casa cuando más lo necesitaba por ella fue que conocí a Máximo, así pues, le debo muchísimas cosas, la adoro demasiado, la amo muchísimo.
En especial ahora sé que ella me necesita porque no la ha pasado nada bien, estaba intentando volver con Levy todo parecía indicar que volverían, pero hace poco menos de un mes el muy patán le rompió el corazón, pues, en un evento público anunció que sería papá.
Pues él y su novia estaban esperando un hijo, no conforme con eso, el tiro de gracia para mi querido ángel de ojos azules fue que también se casarían.
Sé perfectamente que ella intenta disimular que está bien, pues, a mi amiga no le gusta que la vean débil o llorando, pero puedo ver la tristeza en su mirada, por eso no planeo dejarla no por el momento.
Es algo que le digo a mi guapo, pero él me dice que Lauren lo entenderá y sé que sí, pero no quiero dejarla sola, aunque sé que Héctor también está a su lado y pendiente de ella como el mejor de los amigos, en fin eso es algo en lo que no quiero pensar mucho para ser sincera.
En cuestión a Héctor al parecer ya superó su enamoramiento hacia mí desde que supo que Máximo y yo tenemos una relación, ha sido un muy buen amigo.
Cambiando de tema un poco respecto a Briseida la exnovia de Máximo no deja de molestarlo, le llama casi todos los días de distintos números de teléfono, él no me lo dice, pero sé que es así.
Al principio iba a buscarlo a su departamento, también a la empresa, pero definitivamente mi amor se aburrió de esto y le prohibió la entrada a estos lugares, sus guardaespaldas no dejaban que se acercara a él.
Tampoco a mí, por supuesto, al Parecer esto ha funcionado, pues, ya solo llama y ya no insiste en buscarlo, pero no debo bajar la guardia, pues, con esa loca, la verdad ya no se sabe.
Últimamente, he visitado mucho mi antiguo vecindario, ya que la señora Luz, mi ex vecina, se encuentra muy enferma y voy a visitar la cosa que a Máximo no le hace gracia, pues, como no me puede acompañar por agenda de trabajo.
Por supuesto que yo tengo trabajo también, pero no como él me hago un tiempo para ir a ver a mi buena amiga.
De hecho estoy hoy con ella visitándola la señora Susana, también está con nosotros, son alrededor de las 8 de la noche, ya llevo una hora aquí, aunque creo que me tendré que retirar antes, pues, no le he dicho a nadie, pero tengo dos semanas.
Que me siento muy, pero muy cansada, con mucho sueño y para acabarla de amolar tiene 3 días que me despierto con náuseas como, ascos mareos ya es algo que realmente me preocupa cuando llegue a casa le diré a Lauren que si me puede revisar para ver que todo esté bien.
Me despedí de las señoras Luz y Susana, ya estaba afuera de la casa de la señora Luz esperando a que llegara mi taxi, pues, esta vez no tenía guardaespaldas, no lo considere necesario sin mencionar que me vine a ver a mi amiga sin decirle nada a Máximo.
Pues sabía que no se lo tomaría para nada bien, en fin como mencioné ya estaba esperando a que llegara mi transporte cuando de repente un auto negro se posó enfrente de mí.
Y del auto bajo nadamas y nada menos que Briseida la exnovia de Máximo cuando la vi supe.
Que nada bueno pasaría, así que dispuesta a enfrentarlo todo, pero sobre todo harta ya de la situación sin pensarlo le dije.
—¿qué demonios haces tú aquí?
—te atreves a hablarme maldita, pordiosera vine aquí para dejarte claro que Máximo es mío, quiero que te alejes de él.
—por favor no me hagas reír de verdad, es muy divertido lo que dices, ja, ja, ja.
—como que te hago reír maldita gata, ahora te voy a enseñar lo que es divertido.
Después de que la bruja de Briseida dijera esto la maldita se abalanzó sobre mí y comenzamos a forcejear de repente, en el momento menos indicado sentí un mareo que hizo que perdiera el equilibrio, esto fue aprovechado por esa mala mujer.
Que terminó por aventarme a la banqueta en cuanto mi cuerpo tocó la el suelo sentí un fuerte dolor en el vientre y la luz se fue poco a poco desapareciendo.
Cuando abrí los ojos lo primero que mis ojos vieron fue a mi amor Máximo, quien sostenía mi mano, tenía cara de preocupación, yo solo lo miré y pronto me di cuenta de que estaba en la habitación de un hospital.
En cuanto mi amor vio que desperté muy preocupado, me dijo.
—bonita mi amor, ¿cómo estás?, de verdad me tenías muy preocupado.
—hola mi amor, pues, estoy bien, no me duele nada, pero dime qué pasó, ¿por qué estoy aquí?