P.O.V.: Manuel
Había planeado esto por varias semanas para que salga perfecto aunque debo admitir que Skar ha sido de gran ayuda y en este lapso de tiempo se ha convertido en una gran amiga
- Muy bien, entonces solo estarán los dos, recuerda que a ella no le gusta ser el centro de atención, le llevarás una bonita gargantilla de esas que tanto le gustan y en el momento adecuado le dirás todo lo que sientes ¿estás preparado?- me decía Skar tratando de recordarme todo lo que ya habíamos planeado
- Estoy listo- respondí decidido
- Entonces ve por ella- finalizó
Me dirigía hacia su casa para comenzar todo así que le hice una llamada:
- Donna, ¿Cómo estás?
- Todo bien, estoy un poco estresada nada más- dijo desde la otra línea donde se escuchaba mucho ruido
- ¿Qué pasa?-
- A mis padres se les ha ocurrido la gran ida de invitar a algunos de sus amigos con su familia y han armado una fiesta que e esta volviendo loca- dijo molesta
- Bueno, pues, voy a rescatarte, ¿Quieres venir conmigo?
- ¿Estás cerca de aquí?
- Sí, y voy a tu casa
- No, no vengas a casa- dijo rápidamente lo que en un inicio me puso nervioso con la idea de que todo iba a salir mal pero al oír lo siguiente me tranquilice- espérame en la siguiente cuadra que en 10 minutos estoy ahí, te lo prometo
- Bien, te esperaré- dije colgando la llamada.
Los diez minutos que se supone que eran se me hicieron una infinidad y cada vez me ponía mas nervioso con la idea de el rechazo, aún así no podía hacer todo a un lado y renunciar así que en cuanto la vi acercarse me baje del auto y ambos nos saludamos con un abrazo
- Esa fiesta estaba insoportables, la música estaba demasiado alta y todos ahí están locos- explicó
- Y ¿No te gusta la música?- pregunté mientras le habría la puerta del copiloto a lo que ella se subía
- Me encanta, pero no ese tipo y no a ese volumen- dijo sonriendo
Me subí en el asiento del conductor y comenzamos a avanzar
- ¿A donde iremos?- dijo curiosa
- A un lugar que te quiero enseñar- contesté sin querer mas detalles
- Se supone que el nuevo de la ciudad eres tu no yo- dijo un poco nerviosa pero tratando de tranquilizarse
- No esta lejos, no te preocupes- dije suavemente para que se relaje aún así ella no parecía hacerlo
- Manuel, no me gusta esto- dijo un poco asustada, así que pare e auto un momento
- Ahora, estas conmigo, nada malo te va a pasar, eso te lo prometo- dije mientras sonreía y eso al parecer funcionó porque ella recobro la tranquilidad
Seguimos avanzando y me estacioné en un lugar que a pesar de estar a punto de anochecer aun permanecía claro por la variedad de luces que lo adornaban
- Creo que he estado aquí antes, solo que no recordaba que fuera así
- Dentro de esto- dije apuntando unos arbustos- hay mucho mas- agarré su mano y ella correspondió sujetándola con firmeza, la dirigí hacia dentro
En ese lugar había decoración de hojas rosas, flores y unas lámparas que parecían una enormes luciérnagas que daban ambiente al lugar
- Esto es increíble- dijo un poco distraída mientras admiraba toda la decoración
-¿Te gusta? - dije mirándola
- ¿ A qué tipo de extraterrestre no le gustaría esto?- dijo con gracia mientras sonreía esplendida, maravillosa y divinamente
- Lo preparé para ti- dije llamando su atención
- ¿Cómo?- dijo confundida
- Todo esto lo preparé especialmente para hoy y para ti
- ¿Por qué?- preguntó aún sorprendida
- Porque desde el primer momento que te vi no pude alejarme de ti, porque siento que tu eres mucho más que una gran amiga, porque siento que no podría seguir viéndote y tratándote como una amiga, porque siento que cuando estoy contigo nada más es importante, porque siento que contigo puedo hacer todo y porque simplemente poco a poco me has ido enamorando. Y lo que en un inicio fue atracción hoy se va acercando a ser amor- ni siquiera se como salió todo eso pero realmente sentí cada palabra, ella simplemente quedó en silencio unos segundo pero parecía eterno
- Eres un hombre realmente maravilloso, lo he notado con todo lo que haces, debo confesar que contigo muchas veces he sentido coas que nunca imaginé llegar a sentir- esas palabras me hicieron sonreír de forma automática- pero hay muchas cosas que no sabes de mí y no sé si estas listo para saberlas o yo estoy lista para contártelas, muchas veces siento que todo se derrumba y no quiero arrastrarte conmigo- esas palabras eran como cuchillas muy afiladas que poco a poco iban haciendo efecto en mi- no quiero eso para ti, te quiero demasiado- dijo finalmente mientras sus ojos estaban cristalizándose
Aquellas palabras eran dichas con dolor que en este momento no entendía, sus ojos estaban vidriosos y ella se veía realmente triste por decir aquello así que la abracé fuertemente y nuevamente me dirigí a ella diciendo:
- Ambos tenemos cosas que quizá no podamos superar, estoy seguro de que siempre estaré para ti y que a mi no me importa nada mas que tú, recuérdalo y dame la oportunidad de ser quien quite todo lo malo que hay cerca de ti- en ese momento ella me abrazó muy fuerte e hice lo mismo, estuvimos un momento así hasta que ella me miró fijamente
- Te quiero mucho, y quiero que seas parte de mi vida- dijo mientras poco a poco se acercaba a mí y yo hacía lo mismo hasta fundirnos en un profundo y tierno beso que sellaba nuestro pacto.
Esa confirmación fue para mi mas que suficiente, era realmente feliz, mi corazón estaba saltando y podía sentir el suyo también estábamos conectados y después de aquel suceso le mostré el resto del lugar que había preparado, cenamos en el verde pasto que en ese momento para mi era como nubes, me olvidé de todo lo que tenía antes en mente y disfruté el momento para guardarlo en uno de mi cabeza como uno de los mejores.
- Gracias por todo esto- dijo sonriendo- ¿desde cuándo lo planeaste?
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Editado: 12.01.2022