Capitulo 24: Promesa

Alejandro

Veo como me sonrie cada 5 segundos.

Me encanta verla así, en verdad le gustó, le encanto la sopresa, de eso estoy  seguro.

La verdad, no la hice solo, o bueno sí. Pero tuve un poco de ayuda de parte de Martín y Roberta. Mi amigo me dio la idea y su novia me dijo cuales eran las frutas que le gustaban.

Y veo que no se equivocaron, en especial Roberta. Ella me dijo claramente que le encantan las aceitunas y lo puedo notar. De hecho, le fascinan.

-¿Por que hiciste todo esto?-Me pregunta y yo dirigo mi mirada hacia la catarata.

-Este lugar era el favorito de mi madre-miro todo hacia mi alrededor, literalmente todo esta igual, tenía mucho tiempo que no venia-Una vez le prometí que a este lugar iba a traer solo a la persona que amara y aquí estoy, justo contigo........

Recuerdo que mi mamá y yo veniamos aquí de vez en cuando, ella me contaba unaa historias romaticas muy interesantes, que yo en ese tiempo creí que eran reales, que eso sucedia de verdad en la vida real. Pero con el paso de los años y la muerte de mi madre, me di cuenta que todo lo que ambos sentian no era verdad, no comprendia como supuestamente dos personas se podrían amar tanto.

Sin embargo, ahora he vuelto a creer que eso si es posible, sino no tendria explicación cada cosa que antes me parecia ridicula o innecesaria o cada tonteria, las este haciendo ahora, solo para que Adriana no dude ni un segundo de lo que yo siento por ella.

-Es precioso este lugar.......Gracias-Me muestra un sonrisa trsite.

-¿Gracias? ¿Por qué?

-Gracias por darme aunque sea un momento feliz....Nuestras vidas son un desastre Alejandro. Mi padre me golpeo ayer y ahora.......-Se queda en silencio por algunos segundos-No lo sé, solo sé que cada vez que estoy contigo, quisiera que esto nunca acabe, simplemente no quiero recordar la mierda de vida que tengo-Finaliza.

-Mi vida siempre fue una mierda Adriana. Pero, contigo todo es distinto.....creeme que el otro Alejandro no hubiera preparado todo esto para una chica.........

-No existen dos Alejandros, solo estas tú, es el mismo, solo que ahora sientes nuevas cosas......

-Bueno, eso sí, siento nuevas desde que te conocí-Adriana lanza una risita-¿De qué te ries?-Pregunto sonriendo.

-De lo loca que me comporte cuando nos conocimos.......

-Menos mal que te das cuenta, si que parecias una loca histérica-Bromeo y ella sornie.

-Pero tú no te quedas atrás niño bonito, te comportaste como un verdadero patán......-Contraataca.

-Tú comenzaste, me dolieron esas cachetadas. Y como no podía devolverte ese golpe, preferi darte un regalo más bien.....-Sonrie como si no creyera lo que digo, sonrie en forma de burla.

-¿En serio? ¿Te parece que esos besos fueron un regalo? A mí me precieron una tortura........

¿Tortura?...eso ni ella mismo se lo cree, sè que mucjas quisieras besarse conmigo, muchas me lo han pedido a toda costa.

-Me estas mintiendo, sé que te encanto-Presumo cinico.

-Bueno, me gusto, pero solo un poquito-Dice y yo me burlo.

-Aceptalo de una vez, te fascinaron esos besos......

-Solo si tú aceptas que lo de la cachetada fue un excusa para besarme.......

-Vale, lo acepto, me moría por besarte.....me pareciste una chica linda, aunque algo loca........

-Y tú me pareciste un chico guapo, pero patán-Contraataca acercandose a mí.

-Vamos, aceptalo, así de patan te guste-Digo recostando su cuerpo en el cesped.

-Bueno, pero solo un poco-Recalca y yo sonrio por que me la esta poniendo dificil, no quiero aceptar las cosas.

-Nunca lo aceptaras, verdad-Adriana niega-Entonces, tendre que tomar medidas drasticas-Ella frunce el ceño mientras yo sonrio.

Comienzo a hacerle cosquillas en el estomago, y ella se revuelca de la risa.

-Alejandro......ya basta-Dice entre risas.

-Te dejo tranquila, si lo aceptas-Insisto...pero Adriana se resiste un poco màs, hasta que ya no puede.

-Ya, vale...vale, acepto que me gustaste desde un principio-exclama y dejo de hacerle cosquillas.

-Lo sabía-Me mofo y Adriana me mira mal.

Se gira sobre mi cuerpo, quedando encima de mí.

-Ahora tú debes de decir que yo tambien te gusté-Recalca y yo sonrio.

-Pierdes el tiempo, no lo aceptaré-Aseguro con una gran sonrisa.

-Asi.........-Se muerde el labio inferior, de forma provocativa.

Luego entrelaza sus labios a los míos en un corto beso, demasiado corto por que me deja con ganas de más.

-Bueno.......-Dice mientras se levanta y me extiende la mano-Me acompañas-Me invita señalando la catarata.

Y yo me levanto del cesped.

-¿Piensas tirarte?-Pregunto algo sorprendido.

-Si ....¿Por que no?

-Es que esta algo alto-Comento mientras miro hacia abajo.

Corrección, no esta algo alto, esta altisimo.

-No me digas que le tienes miedo a las alturas niño bonito-Exclama en som de burla y yo frunzo el ceño.

-¿Quien no le tendria miedo?-Me defiendo

-Yo no-Responde con simpleza-Nunca le tuve miedo a las alturas, de hecho, me gustaría tirarme de parapente......

-No hablaras enserio-Comento muy sorprendido.

Acaso ella dijo tirarse de un parapente, a no se cuantos metros de altura. Me gusta la adrenalina, pero no a esos extremos.

-Hablo muy enserio-Afirma con mucha seguridad.

-Si que estas loca-Ambos sonreimos.

-Ya, no te me hagas el payaso y ven para acá que tenemos que lanzarnos....

-¿Qué?...no, yo no pienso hacerlo-Me niego rotundamente.

Adriana se acerca a mí con una leve sonrisa intentando convencerme.

-Vamos, te prometo que hare todo lo que tú quieras si te lanzas conmigo-Insiste.

-Todo lo que yo quiera-Intento negociar.

-Si, absolutamente todo-Asegura.

-Esta bien, me convenciste-Acepto y Adriana me responde con una sonrisa.

No sabe lo que tiene que hacer, al final, esto me ayudara mucho en lo que estoy planeando ahora.