02/Agosto/21
Que necesario es un diario.
Estos días ha sido difícil tapar las cicatrices que dejo lastimarme. Todas las que me quedaban al día siguiente se borraban, pero cómo estás fueron más profundas aún queda la huella. Y vaya que mamá aún no se ha dado cuenta, aunque también he sido discreta. Cada vez que las veo las líneas marcadas en mis muñecas me pregunto si serán curadas. Tan sólo el miedo de que no sea así es suspenso.
Escribiré cada vez que de nuevo pase.