Prejucioso amor

PREFACIO

Andrea es una niña huérfana. Fue hija de un padre que la concibio y jamás conoció, su madre fue una prostituta que trabajaba en un burdel de mala muerte y al poco tiempo de tener a Andrea, enfermo de un cáncer terminal, motivo por el cual decidio déjarla antes de partir en un hogar llamado “infancia feliz". Por sugerencia de conocidos, pero lo que no sabía esta mujer, es todas las dificultades que iba a tener que atravesar su hija en el transcurso de su vida. 

 Pov Andrea

Así es la triste y cruda realidad en la que vivimos los niños huérfanos. No tenemos a nadie que nos proteja a nadie le importamos, no somos nada. Sueño con que un día ocurra un milagro y podamos ser libres y felices, para vivir dignamente, junto a alguien que verdaderamente nos ame y nos valore, por qué el nombre del hogar es solo una fachada, una ilusión ¡Infancia feliz! ¡Ja! si, claro. Ni siquiera sabemos lo que es tener infancia. Jamás, tuvimos el privilegio de recibir regalos en epocas especiales o una torta de felicitación por nuestros cumpleaños, como disfrutaría cualquier niño normal en esta tierra. No tenemos padres o algún familiar que nos consuele, cuando nos enfermamos o padecemos algún dolor, alguien a quien recurrir para desahogarnos. Nuestra existencia ¡literal es una desgracia! Solo nos usan como moneda de cambio ¡ Nos explotan al máximo para su beneficio personal ! 

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Todas las madrugadas es la misma rutina nos dividían en grupos de 3. A un grupo le toca la cocina, a otro los baños, que son 5 en todo el establecimiento y al último. El comedor, pasillo y entrada. Para finalizar tenemos que lavar y planchar los uniformes, y debemos cocinar la comida que nos deja indicada, Dolores. Para salir a vender a la calle con la estampa de “infancia feliz”.

Nos obligaban a decir que vendemos para ayudar a sustentar el hogar y ayudar a más niños en nuestras condiciones, cosa que es mentira ¡ solo aceptan niñas por que somos más débiles y manipulables !

Dolores es nuestra carcelera. Sofía, la típica niña mimada, envidiosa y cruel con los de su clase inferior, según ella. Esta es la digna hija de Jésica del valle. La cara visible en todos los eventos de caridad que ellas mismas organizan, para pedir donaciones asi ayudar a mantener este pequeño hogar, que según Jesica, fundó por vocación. Cuando la realidad es que se guardan toda la plata y los regalos, que donan para el hogar, se los reparten entre esas 3 sinvergüenzas o simplemente los venden para guardarse el dinero, para mantener sus gustos caros.

Encima, después de realizar todas las tareas del hogar, nos mandan a trabajar sin almorzar, solo con un desayuno en la panza y si llegábamos a regresar al hogar sin vender nada, nos castigaban mandandonos a dormir sin comer. Sin contar las veces que nos castigan por quedarnos dormidas del cansancio, dándonos dobles tareas o encerrandonos en un placar super pequeño, paradas. Sin tener la opción de sentarnos por horas, sin comida, agua o poder ir al baño. 

4 de la madrugada suena el despertador en toda la habitación, haciendome despertar de mi sueño. Llevanto perezosamente la mano izquierda hacia el despertador que se encuentra a lado de mi cama, para apagarlo y dormir un ratito más, pero todas mis esperanzas se desvanecen cuando se abre la puerta de la habitación y entra rápidamente dolores [ tambien se encargada de todas las niñas, controla que cada una cumpla con sus tareas y que todo marche según el cronograma ]

Grita.– ¡Niñas, rápido, arriba!  las quiero a todas con sus uniformes aregladas y listas, haciendo fila en la puerta en 5 minutos y saben muy bien.– Termina la última frase con cara de malicia. –Que para las que no obedecen hay castigo. Dolores sin más sale de la habitación, azotando la puerta. 

Todas nos levantamos corriendo, arreglandonos y vistiendonos con los uniformes. En la habitación somos 9 chicas compartiendo baño, ducha y camas marineras. La mía, la comparto con Clara y Mia. Esta última, duerme arriba y Clara duerme conmigo abajo. Como somos 9 en total y faltaba una cama para Clara. Ella fue la última en llegar a este infierno, nadie quería compartir cama con ella, la discriminaban diciendo que era gorda y fea, motivadas por Laura y sol ¡estas son las peores de este lugar! Siempre estan las malas y abusivas, para agregar más desgraciada a nuestro padecimiento hacen nuestros días más miserable aún y todas les temen, ellas mandan. 

Invite a clara a compartir mí humilde espacio, nos agradamos de un principio y nos hicimos mejores amigas, hasta el día de hoy, que tenemos 17 años ambas. Somos inseparables.  

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Un caluroso día de verano como cualquier otro, finalizando la tarde, iba de regreso camino al hogar, conforme con las ventas del día «hoy voy a poder cenar y no recibiré castigo»

Al pasar por el callejón que está casi a una cuadra del hogar, miro de reojo y me quedo paralizada en el lugar, al ver la escena. Sol sostiene los brazos hacía atrás del cuerpo de una chica que llora desconsoladamente, con la cabeza agachada, todo el pelo cubre su rostro. Veo a Laura con una enorme sonrisa en su rostro, revisando los bolsillos de su uniforme. Es el mismo que usamos nosotras del hogar «una compañera mía» seguramente, tratando de encontrar la plata que habra echo de la venta del día, al levantar el rostro la chica que súplica por qué no tomen su plata sino será castigada, me doy cuenta que ¡es mi mejor amiga!

La furia me hace accionar e ir caminado directamente hacía donde están ellas. De camino visualizo a mi costado, en el piso una madera, me agachó para recogerla y cuando llegó a mi objetivo, notan mí presencia. Las 3 me miran sorprendidas, sin darles tiempo a reaccionar, le pego con la madera en la cabeza a Laura que cae al piso sentada, está se toca la cabeza y se examina su mano ensangrentada con horror, luego me lanza una mirada cargada de odio.

¡Me importa un carajo! estoy cansada de sus maltratos y abusos a mí y mis compañeras, muchas veces me robaron el dinero de mis ventas y me obligaron a hacer sus trabajos de limpieza, retrasandome en el mío, siendo castigada severamente. Agarro el brazo de clara, que todavía sigue en shock por lo ocurrido, la miro y le demandó.–vamonos. 




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