Presa de ti ©

Capítulo 17

- Shh...no llores amor, es solo un gran pájaro de metal - le dice a Sebas tratando de calmar su llanto, no quiere subir al avión.

- ¡No! 

Yo lo traigo en brazos, tenemos casi una hora bajo el sol caliente esperando que se calme porque le puede dar algo allá arriba pero ya me harté. Así llorando lo subo al avión, está aturdiéndome en cuanto llegó arriba le hago una señal al capitán.

- Código rojo, dámela por favor - gruño por sus patadas, las primeras no dolieron pero mi pierna ya empezo a quejarse.

- Ya, tranquilo.

Hannah seca sus lágrimas, le subo la manga de su camisa y sin más pincho su brazo. Es una droga inofensiva para poder dormir por 8 horas, el viaje dura 10 ya veré cómo lo calmo esas dos horas restantes.

Hannah sujeto su cabeza y brazo mientras le hablaba tranquila, el llanto se fue apagando y con el los forcejeos también. Le di la jeringa al capitán y camine a la pequeña habitación que se encuentra al final, acuesto su cuerpo en la cama y mi gatita entra.

- ¿Qué le inyectaste? 

- Una droga - me vio horrorizada, sonreí y la sente en la cama - Inofensiva, tranquila dormirá por ocho horas.

Tomo su mentón y le doy un beso, salgo directo a la cabina e indicó que podemos despegar. Regresó con Hannah y nos sentamos en el asiento largo frente a la cama, la mini zanahoria ya tiene el cinturón puesto, me lo pongo yo y ayudo a mi gatita.

En cuanto despegamos Hannah puso su mano encima de su vientre y apretó mi mano. Un sonido corto se hico escuchar y vi la luz verde provenir de arriba de la entrada a esta estancia, desabroche ambos cinturones y saque el teléfono.

Iba a traer con nosotros a Harry pero mejor decidí que se quedará a supervisar los hoteles y restaurantes en mi ausencia. Marco su numero y espero a que conteste.

>> ¿Si?

<< Recuerda hablarme si se presenta un problema, Harry.

>> Ten por seguro que si lo hago de ser necesario, Ian. 

<< De acuerdo, nos vemos en una semana.

>> Bien, que tengan un buen viaje.

Cuelgo y me levanto, busco a la azafata para pedirle un trago de whisky.

- Enseguida, señor.

- Gracias.

Mientras espero me acerco a la ventanilla, las nubes se ven increíbles y a los segundos tengo a James enfadando que le tome una foto. 

- Yo no sé hacer eso, mejor solo observa.

James: no seas malo, tómala Ian.

- Bien, pero ya cállate.

- ¿Señor? - volteo con la azafata que me mira raro, sonrío de boca cerrada y agarro el vaso de vidrio - ¿Se le ofrece algo más?

- No, pero mi esposa está allá - señalo la entrada a la pequeña habitación - Podrías ver si ella quiere algo.

- De acuerdo, con permiso.

Agito la mano restando importancia, saco el teléfono y me pongo de rodillas en el asiento. Dejo mi bebida tras un trago en el portavasos evitando que se me derrame por si James me llega a alterar.

James: otra.

De esto estoy hablando.

- ¿Así? - acomodo como si fuera un profesional el brillo, enfoque y la posición del teléfono.

James: A ver...captura justo...ahí.

Tomo varias, después me dejo caer lento al asiento y las reviso.

James: nada mal, borra cuatro primeras. 

Ruedo los ojos, pero lo hago. Guardo el teléfono y disfruto hablando con James por un buen rato de cosas triviales, Luke se incorporó tiempo después. Ya lara ese entonces, llevaba mi cuarto vaso de whisky.

Luke: ya deja de beber, la azafata ya te mira mal.

- Me vale, ella no sabe que ustedes existen y prefiero que me tachen de loco - tarde en decir eso, creo que ya está haciendo efecto el alcohol. 

James: si, lo que quieras, pero allá al fondo están las personas más valiosas para nosotros y no podemos darnos el lujo de tener el cuerpo intoxicado.

- Bla, bla, bla - ruedo los ojos y pido otro whisky - No, ya no gracias.

- ¿Se encuentra bien señor?

Me salió la voz muy dulce y tranquila, maldito James.

- No te metas conmigo, James. Debilitas más el cuerpo - gruño y me levanto, la azafata se hace para atrás asustada y sonrío ladino - Tranquila, le hablo a ellos.

Me toco la frente con mi dedo, ella asiente dudosa y se va. Eructo silencioso caminando hacia el fondo, quiero un buen polvo.

Luke: ¿Qué haces? Deja de desabrocharte el cinturón.

James: te quitaré el control a la fuerza si no dejas de pensar cosas depravadas.

- Ay, ustedes no dejan a uno divertirse - cierro la cortina y miro a mi gatita dibujando en una libreta bajo la luz de la ventanilla. Se percata de mi presencia y me ve raro por querer quitarme el cinturón y no lograrlo.

- ¿Ian?

- ¡Ahh! - gritó desesperado y ella se sobresalta, tropiezo con mis pies y caigo al asiento - Ven y quítame esto.

- ¿Para qué te lo...? - la miro serio y enojado, no termina de preguntar y cierra la boca. 

- Tengamos sexo.

Parpadea varias veces confusa, ruedo los ojos por su lentitud y deshago el nudo de la corbata. 

- Estamos en un avión, tu hijo está drogado y yo estoy embarazada - explica cómo si fuera un idiota, la miro fijo y vuelvo a intentar quitarme el cinturón a jalones - Lo vas a romper.

- ¡Ven y quítamelo entonces!

Grito harto, suspira y empieza a bajar de la cama, pongo mis manos a los costados y llevo mi cabeza hacia atrás, el dolor en esta se está presentando. 

- So-solo te quitaré el cinturón...no tendrémos sex-sexo - gruño pero empiezo a ver borroso, sobo mi sien y en un dos por tres veo todo negro. 

Luke

 Parpadeo y reacciono rápido, iba a detener las manos de Hannah a lo que miro el cinturón ser tirado a la cama.

- ¿Ian? - pronuncia con un tono de voz temeroso, ay mi amor él esta más que dormido en el sillón.

- No, soy Luke. 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.