Capítulo 29

- Zanahoria, es hora de levantarse.

Me queje en respuesta, la cama esta muy cómoda.

- Anda que la cena esta lista.

- Ya voy.

- Va, te esperamos abajo.

Palmeo mi trasero y un quejido salio de mis labios, esa zona arde todavía.

Con toda la flojera del mundo me levante, fui al baño hacer pipi y darme un baño de cinco minutos para despertar, salí envuelta en una toalla y camine al armario, seque mi cuerpo, introduje en el laropa interior y un vestido de algodón suelto de color mostaza.

Mientras secaba mi cabello retoque con maquillaje mi rostro y cuello, agradezco que el vestido sea de manga larga. Ya solo cepillo rápido mi cabello y salgo con unos zapatos de suela baja hacía el comedor.

- Buenas noches mis amores - salude entrando, mis bebés me respondieron.

Tome mi lugar a lado izquierdo de Ethan en la cabecera y Margarita se levanto de la mesa para ir a la cocina.

- ¿Qué comen?

- ¡Espagueti!

- ¡Papas fritas!

- Oh, que rico. ¿Les gusta? - asistieron frenéticamente mis trillizos, Sebas hizo una mueca - ¿Qué no te gusta cariño?

- El pollo, no sé me da asco - lo movio con su tenedor, iba a decirle que lo dejará, pero...

- Todo se come, quiero ver ese plato vacío.

Cerre mi boca, Sebas miro a su padte enojado. Susurre un "come" e indiqué silencio.

Regreso la vista a su plato y se dejo caer en la silla, mire a Ethan que comía todo gustoso.

- Gracias, Margarita - dije cuando me puso el plato enfrente, me sonrió y se fue a su lugar.

Que después de tanta insistencia de mi parte quizo sentarse con nosotros en la mesa.

Comí en silencio, los trillizos de vez en cuando tenía que regañarlos porqué estaban jugando con la comida. A lo que también se me hacia tierno que Alex le estuviera dando las papas embarradas de catsup en la boca a Luke.

Terminando y para bajar la cena antes de dormir, Ethan se fue a jugar con los trillizos al tercer piso, Sebas enojado a su cuarto y Margarita conmigo a la cocina.

- ¿Estas bien? - siempre preguntaba, suspire y abrí el grifo de agua enjuagando el plato.

- Si, esta vez no fue tan malo.

- Aja, dile eso a tu cara empanizada - ríe leve, sonrei y le pase los platos húmedos.

Ella se encarga de secarlos y guardarlos en su lugar, ya James se encargo de decirle dónde y cómo van.

Si, Margarita ya sabe sobre el trastorno de Ethan. Agradecí tanto que no saliera huyendo.

- Esto no es por hoy - señale mi cara - Ya traigo moretones de días anteriores.

- ¿Me puedes repetir el por qué no te has ido con tus hijos lejos? Porque cada vez que te miro repleta de polvo pienso en lo estúpida que eres por soportarlo.

Río sin gracia, niego y alzo ambas cejas.

- ¿Tú por qué sigues viniendo? Si ya terminaste la universidad y tienes oportunidades de trabajo buenas que no aprovechas - me defendí como siempre con este tema. 

- Porqué los niños me aman y yo a ellos, el dinero que me pagan está más que bien y no necesito trabajar.

- Deberías irte, una vez que entras a nuestro mundo es muy complicado salir, ya vez Harry. 

- Oh, hablando de él - termine de enjugar los sartenes y los deje ahí para que se secaran, tome una toalla pequeña y seque mis manos - Me dijo el otra vez que vino a la casa que estaba planeando decirle a Ethan que se iba a ir.

Fruncí mi ceño, no creo que lo haga. No quiero más bien.

- ¿Eso dijo?

- Si. Como ya tiene la universidad quiere irse a Inglaterra.

Suena lógico, haya tiene familia como nosotros. 

- Pues veremos qué pasa.

Sonreí débil, acomode la toalla sobre la mesada y me dispuse a salir de la cocina.

- Descansa Mag.

- Buenas noches, Han.

No sé porque razón me molesto que dijera eso de Harry, o sea a ella le dijo y a mí no. 

Ahh, estos celos no son buenos.

Mi amor por él sigue estando, en lo más profundo de mi corazón, pero ahí está.

En la segunda planta fui al cuarto de Sebas, no había nadie ni en el baño. Debe star en el tercer piso con Ethan, al llegar no oí ningún ruido, abrí la puerta despacio y mire que la pantalla estaba prendida, están viendo una película los cinco. 

Sebas abrazado a Ethan, mi princesa del otro lado y mis bebés restantes están sentados totalmente absorbidos por la película, cerré la puerta intentando no causar mucho ruido y me fui a sentar con ellos, sintieron mi presencia y se abalanzaron encima de mí. 

Cada uno a mis contados, recargaron su cabeza en mis pechos y no despegaron la vista de la película, es de terror.

Se me hace raro que estén tan entretenidos, las escenas de suspenso me Yolanda por sorpresa y brinco en mi lugar causando risitas burlonas de mis bebés. 

El tiempo pasaba, igualmente la película me absorbió. Mis bebés iban de a aquí para allá, mi princesa la tuve dos veces acostada sobre mi pecho, Sebas con la cabeza en mis piernas, Luke sobre mi hombro, Alex sentado en mis musloz y yo recargada en el hombro de Ethan. 

Nos aventamos dos películas, era una saga de cuatro, al final tenía a Sebas sobre mis piernas y las de Ethan, mi princesa en el pecho del susodicho, Luke recargado en mi hombro derecho y Alex sobre él. 

Mis ojos se estaban cerrando, bostece y a los minutos de estar parpadeando para no caer dormida, perdí. El sueño me reclamó y deje caer mi cabeza en la de Luke.

***

- Te amo mucho, a lo mejor en otra vida volvamos a coincidir y por fin poder estar juntos.

Lo susurro en mi oído, estaba conteniendo las lágrimas, me separé besando disimuladamente la comisura de sus labios y di un paso atrás, se despidió de mis bebés que estos si no contenían el llanto, no querían que se fuera.

- ¿Estás llorando? - sentí como pasó su dedo por mi mejilla, me aclare la garganta y me abrace a su brazo suspirando.