Mis nervios están a flor de piel, los pies no paran quietos y mis manos sudan. Aunque todos estamos de la misma manera. Nos miramos todos entre sí, colocados alrededor de una pequeña plataforma circular y de cara al escenario que hay justo en frente y donde nos colocaremos para saber el veredicto.
Me estrujo con fuerza las manos esperando el resultado. Sea cual sea, estoy contenta. He llegado hasta aquí y para mí eso ya es mucho.
Espero paciente a que Noemí me nombre, esperando a saber qué es lo que va a pasar conmigo, en si paso a la siguiente fase o no. Mis compañeros comienzan a subir al escenario, tras tres rondas seguidas ninguno de ellos pasa, poniéndome a mí más nerviosa. Aunque si lo piensas bien, hay más posibilidades de seguir.
En la siguiente ronda nombran a Natalia y mi corazón comienza a latir con fuerza. Pasa por mi lado y la doy un apretón en la mano en señal de apoyo. Ella me mira con una sonrisa nerviosa y yo la devuelvo la mirada con la intención de que capte mi mensaje. Todo va a ir bien.
Sube al escenario y espero a que diga algo Noemí. Tras unas palabras por fin les dice que pasan a la siguiente fase y que les ve mañana. Mi euforia es inmensa. Me alegro tanto por ella… Tiene una voz increíble y estaba segura de que iba a pasar a la siguiente fase pero ahora lo estoy más de que va a entrar a la academia.
Unas cuantas rondas más, es ahora Alba quien le toca subir al escenario. Me da un apretón en el brazo en señal de apoyo, ya que aún sigo esperando a que sea mi turno. Cruzo los dedos y oigo las palabras deseadas. Alba pasa a la siguiente fase.
Cada vez quedamos menos. Algunos de los chicos que he conocido no han pasado otros en cambio sí. Mis nervios crecían por momentos y no sabía si estaba preparada para oír lo que tenía que decir Noemí.
Camino con paso decidido hacia el escenario aunque por dentro estoy como un flan. Subo el escalón y me pongo al lado de una chica, de la que si no me equivoco se lama Sabela.
Veo como Miki me mira y alarga el brazo que tenía rodeando la espalda de Sabela para rozar mi cintura provocando que le mire. Nos sonreímos y yo aprieto de forma cariñosa su brazo para infundirle ánimo.
Damos un paso hacia delante y respiro con fuerza esperando al resultado. Sea lo que sea, llegar hasta aquí para mí ya es todo un reto.
No puedo creérmelo, no puedo. Nos agrupamos en un círculo todos los que acabamos de pasar y nos damos un abrazo bien fuerte. Soltando toda la adrenalina, toda la tensión acumulada de los últimos minutos. Habíamos pasado a la siguiente fase y no podía estar más contenta.
Mientras bajamos del escenario siento que un brazo se posa sobre mis hombros, miro para saber quién es y me encuentro con la mirada de Miki.
De repente veo como Carlos baja del escenario y mi mirada se dirige hacia allí para ver cuál era el veredicto porque me lo había perdido hablando con Miki. Me disculpo con una sonrisa con Miki porque aunque me gustaría seguir hablando más con él, necesitaba saber que Carlos había pasado. Se había convertido en una persona importante para mí durante el casting, me hacía reír, escuchaba, podía hablar con él de cualquier cosa…
Vi su sonrisa aparecer y entonces supe que sí, que pasaba como yo a la siguiente fase. Se acerca hasta mí casi corriendo y me abraza con fuerza, transmitiéndome esa euforia y entusiasmo.
Carlos se separa de mí y sigue abrazando al resto de compañeros que ya han pasado también, hasta que por fin el veredicto de esta primera fase llega a su fin. Respirando así todos aliviados, sabiendo que no nos íbamos hoy y que aun teníamos alguna oportunidad de entrar en la academia.
Poco a poco vamos saliendo del pequeño plató para volver a los autobuses. Durante el camino me encuentro con Alba y nos abrazamos fuertemente.