Una amiga inseparable.

Mariana, al ver lo que estaba sucediendo decide confiar un poco más en su nueva amiga; recuerda, solo un poco.

Al llegar a clases se dirige inmediatamente a su amiga, se desahoga con ella, le cuenta como pasó todo y lo que aspira con él.

-Hola! -Dijo Sophia-

-Hola -Respondió Mariana-

-Como te va?

-Bien, podemos hablar?

-Si... -Responde un poco temerosa- (¡¿Vamos dime si no te ha pasado eso?!)

-Tranquila no es nada malo, solo quiero desahogarme un poco, ¿Puedo?

-Si claro, adelante. -Sophia suspiró con confianza-

-Ok, es que todo esta yendo super bien con pedro y me gusta mucho, solo que quiero confiar más en ti, ¿Puedo?

-Me gusaría muchisimo! -Responde con emoción-

-Quiero tener algo muy lindo con él, algo que valga la pena.

-Mira, no te diré que te entiendo, por que en cosas del amor no soy buena, solo te diré que vayas con cuidado y despacio, porque podrías arruinar un maravilloso sueño.

-Oh si, eso haré.

Mariana salió del salón de clase y se dispuso a estar con su "amor verdadero"; ella para sus adentros pensaba que todo iba un poco rapido, pero decidió guardar esas cosas en el corazón.

Al llegar a casa, su madre la vió un poco confundida, de hecho se notaba a leguas que estaba entre confundida y enamorada, para ella era algo que jamas había sentido, siempre era rechazada y excluida del amor, así que su madre de manera inteligente decidió esperar a que ella misma se lo contase...

Su padre por otra parte la quería muchisimo, pero trabajaba casi todas la semanas lejos de casa y por ende no tenia conocimiento de lo que le pasaba a su hija...

Mariana en el transcurso de la sala a su cuarto dijo:

-Hoy vendrá una amiga.

La madre sin reprochar asintió con la cabeza.

Sophia al llegar a casa de Mariana se sienta en la sala y la madre entra y se presenta.

-Hola!, un gusto Lucía -Dijo la madre entusiasmada-

-Hola, Mucho gusto Sophia. -Respondió un poco timida-

-Espero que te sientas comoda, sientete como en tu casa.

-Gracias señora Lucía.

-Oh por favor dime Lucí

-Ok Jeje -Dijo con un poco de confianza-

Mariana se acerca y saluda a sophia muy alegre, Sophia responde de igual manera, fueron a su cuarto y empezaron a confiar una en la otra y a ser muy buenas amigas.