Primer lugar

Vigésima Cuarta Pregunta: ¿Pérdida?

Los exámenes siguieron su curso, uno tras otro de las nueve materias impartidas por semestre, hasta que llegaron a su fin, para ser el próximo día en el cual se publicarían los resultados en cada casa de estudios y la comparación de los primeros lugares en el auditorio.

A la par de esto, en la noche del último examen, tanto Héngwǔ como Lìān avisaron que iban a adelantarse a sus casas, pues estaban algo cansados y esto era en parte verdad, y aunque ninguno de los dos estaba enterado, tenían algo muy similar en mente desde hace tiempo.

«Finalmente tengo lo suficiente para comprarlo», pensaba Héngwǔ mientras iba en camino a una de las tiendas de electrónica que estaban en el campus.

«Espero encontrar uno bueno. No quiero darle cualquier cosa», decía para sí mismo Lìān, quien estaba en ruta hacia el mismo sitio a donde se dirigía su rival, al final topándose ambos un enfrente del otro en la entrada de la tienda.

—¿Eh? ¿Qué haces aquí? —Se dijeron ambos, molestos.

—Vengo a comprar algo, obviamente —exclamó el matemático.

—¿Y yo quise pasear por aquí por casualidad? Acabas de insultarte con ese comentario —respondió Lìān de manera inteligente, algo que dio en el clavo, pues el de rojo no respondió hábilmente a aquello—. Me refiero a qué vas a comprar.

—No es de tu incumbencia. —Héngwǔ se adelantó a entrar a la tienda, apurándose Lìān para colocarse a su par, no obstante, cuando creyeron que sí iban por lo mismo, se separaron en un ala, cosa que los tranquilizó de momento.

Poco después, se encontraron una vez en caja, donde cada uno recibió lo adquirido, para luego tratar de separarse en la entrada, mas Lìān se detuvo y volteó hacia el chico de anteojos.

—Voy para casa. ¿No quieres que te dé un aventón? —preguntó el chico cortés, y aunque Héngwǔ quería rechazarlo, tampoco quería ser grosero. No odiaba a Lìān, era sólo que se interponía entre él y Xiāohuàn.

—Xièxiè, me parece bien. ¡Vamos! —Pronto, ambos muchachos caminarían a la par hacia el estacionamiento, lo que le dio pauta a Héngwǔ de iniciar una conversación. —Durante el juego que jugamos hace unos días, dijiste que muchos eran abogados. ¿Toda tu familia lo es?

—Bìshì, mi māmā lo es, y casi todos mis tíos del lado de mi padre. Mi familia más cercana es mi姨母(yí mǔ)[Tía materna], Míngfěi. Ella es doctora, aunque fue enfermera como por diez años.

—¿Y tú bàbà? ¿A qué se dedica?

—A emborracharse en 蜚律宾 (Fēilǜbīn) con su otra familia. —Esa declaración hecha con desinterés dejó anonadado a Héngwǔ, quien rápido respondió.

—¡Duìbùqǐ! No tenía la mínima idea.

—No te preocupes, nadie sabe sobre eso. Sólo Hānáng, supongo. No es como que hable mucho del tema con los demás.

—Claro, en verdad, discúlpame.

—Está bien. No me ofende ni nada por el estilo. Es una historia tonta, porque mi māmā era ya una profesionista que conoció a un niño tonto de 17 años en una fiesta de su facultad. Tuvieron relaciones y de ahí salí yo. Cuando mi māmā encaró a la familia de mi bàbà, mi nǎināi no sólo lo reprendió, sino que le dijo que tenía que casarse con mi māmā o si no lo iba a correr de su casa. Él prefirió irse con unos primos que viven en Fēilǜbīn a casarse a fuerzas —la historia dejó a Héngwǔ sin palabras, más porque veía el rostro del chico de azul un tanto nostálgico, cabizbajo y con la mirada puesta en el piso.

—Suena a que tú nǎināi te quiere mucho.

—¡Ja! No la conoces. Luego de que el tarado de mi bàbà se largara, comenzó a presionar a māmā para que se hiciera bien cargo de mí. Desde que aprendí a decir las primeras palabras le exigió ponerme a estudiar y aprender todo, a ser un hijo perfecto cada día para llevar honor a la familia, mismo que destrozaría la vergüenza que mi bàbà trajo. Me dieron el apellido de ellos, Wú, y me han demandado resultados toda la vida, no sólo presionándome a mí, sino a mi māmā. ¡Es horrible! Y mi nǎināi es el centro de todo eso, por ello no me llevo con la familia de ese lado.

—¡Wow! Creo que hay muchas cosas que se deben hablar ahí. Aun así, siento que todo lo hace tu nǎināi por tu bien. Me parece que estaba preocupada de que te fueras por un mal camino o que tu māmā perdiera el ánimo de todo esto. Yo sé que no es la manera de hacer las cosas, no obstante, a veces las personas no sabemos cómo guiar a los demás de una buena manera. Más las generaciones viejas.

—Tal vez, no sé. Honestamente, a este punto, sólo quiero que nos dejen en paz. Quiero que māmā y yo tengamos tranquilidad una vez en la vida. Por eso necesito estar en el primer lugar, para que dejen de molestar. —Aquella confesión hizo que Héngwǔ se impresionara un poco, recordando lo que le dijo al ingeniero Xiāohuàn hace unos días.

—¿Sabes? En mi casa pasa algo similar. Mi jiějiě siempre fue completamente perfecta y adorada desde que nació y obtuvo todo lo que quiso. Fue a los mejores colegios, le compraban lo que quería y la alababan siempre. Luego nací, y las cosas se complicaron un poco. Mi bàbà perdió su empleó, mi 外祖父(wài zǔ fù)[Abuelo materno] falleció, por lo que nǎināi vino a vivir con nosotros, y a su vez, māmā y bàbà comenzaron a trabajar juntos en el mercado por necesidad, mientras nǎināi nos cuidaba. Por desgracia, mi jiějiě de adolescente era ya muy engreída, y al ser tratada normal por nǎināi, la chica empezó a causar problemas sólo a ella. Mi familia no le creía a nǎināi las maldades de Huālǎng, por ende, mejor se concentró en ignorarla y encargarse bien de mí, aunque eso sólo generó que Huālǎng se enojará conmigo y con ella. Hasta la fecha, sigue molesta a pesar de ya ser adulta y estar casada. Nǎināi era dura, pero todo venía de un lugar de amor. Te lo puedo asegurar —terminó de contar Héngwǔ, justo cuando llegaron hasta la moto de Lìān.

—Ahora entiendo tu insistencia con mi nǎināi.

—Dale una oportunidad. Ya son adultos, no seas como Huālǎng.

—Lo intentaré. ¡Vamos, sube! —invitó el chico de azul al de rojo una vez que estaba arriba, además que le dio el casco de Hānáng, mismo que, al verlo, Héngwǔ sonrió e inmediato se lo colocó.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.