Ya me arrepiento.

Desde el desayuno no me he podido quitar esa sensación de escalofrío, es algo que sube por mi cuerpo y acaba en mi nuca. ¿Será que la culpa ya me está atacando? O más bien es una sensación de temor por la sonrisa perversa que tenia Amanda esta mañana.

Por algo dicen que incluso el diablo corre lejos de una mujer enojada.

Ya me estoy arrepintiendo de esta absurda idea. Menos mal Amanda estará ocupada estos días con la remodelacion de su nueva oficina porque no tengo idea de cómo voy a enfrentarla.

- Señor lo buscan.

- ¿Tiene cita?

- Es la señorita Roxana.

Ya se había tardado mucho en aparecer esa desgraciada, veamos que tiene planeado hacer ahora.

- Déjala pasar.

- Ahora mismo.

Que mujer más desagradable es esta, como se le ocurre venir vestida de esta forma a verme. Tal parece que no entiende que yo soy el esposo de su hermana y no su pareja.

- Hola, querido.

Ella se inclina un poco para intentar besar mi mejilla, pero yo me alejo rápidamente.

- No me llames así. Para ti soy el señor Iker.

- Por qué siempre tienes que ser tan frío conmigo. Ahora somos familia y nos llevamos muy bien. ¿Es porque no quieres que tus empleados sospechen de lo bien que nos tratamos en privado?

- Es porque no existe un privado entre tú y yo Roxana. Ni siquiera entiendo por qué diablo sigues viniendo a mi oficina.

- Porque quiero verte, quiero estar cerca de ti y conocerte mejor.

- Jamás creí conocer a una mujer tan descarada como lo eres tú, cómo te da la cara para decir semejantes cosas cuando yo sé perfectamente lo que le hiciste a mi esposa.

- Según tú qué le hice yo a ella.

- ¿Quieres que te muestre las pruebas que tengo en tu contra?

Roxana retrocede de inmediato al verse acorralada.

- No sé de qué hablas la tonta de Amanda no ha respondido a mis llamadas así que no la he visto en mucho tiempo. De hecho desde esa noche en que te presento.

- Entonces qué estás haciendo aquí cuando sabes perfectamente que yo soy su esposo.

- Porque, ya que ella no me quiere ver entonces te busco a ti para mantener a la familia unida.

Me levanto furioso para enfrentarla.

- Si acaso vuelves a intentar poner una sola de tus sucias manos sobre mi esposa te arrepentirás toda tu vida. Lo que le hiciste no tiene perdón y en cuanto menos lo esperes te quedarás sin nada y en la cárcel junto a tus cómplices.

- Me estás lastimando.

- Lárgate y no vuelvas por aquí o de verdad me veras enojado.

La llevo hasta la puerta y la empujo lejos. Esa mujer es el diablo en persona y si no fuera porque Amanda me lo pidió ya estaría en una sucia celda pagando sus fechorías.

Narra Roxana:

Maldito desgraciado, como se atreve a tratarme así. Pero ahora lo que me preocupa son sus palabras. ¿De verdad tendrá las pruebas de lo que le hice a esa tonta? No puede ser verdad, incluso mande a borrar las del lugar para que nadie jamás me asocie. Pero ese bueno para nada de Saúl todavía no aparece.

Tengo que crear una brecha entre ellos para poder meterme en su relación. Tengo que encontrar el punto de debilidad de Iker para hacer que se arrodille a mis pies.

📱 Abuela porque no órganizas una cena para saber como le esta yendo a Amanda.

📲 Es una buena idea, ella me dijo que todo está bien, pero me gustaría verlo con mis propios ojos.

📱 Yo el viernes por la noche estoy libre, que sea ese día así todos estamo reunidos. También extraño a esa mala hermana que ni un mensaje es capaz de responder.

📲 Entiende que ahora ella está casada Roxana. Esta bien le avisaré para que vengan.

Aunque no tenga a Saúl todavía tengo a su hermano, ya quiero ver la cara que pondrás Amanda cuando te veas de frente con tu oscuro pasado.

Al llegar a mi empresa llamo a mi asistente. - En qué la ayudo señorita.

- ¿Todavía no sabes nada de lo que te ordene?

- La familia de ese hombre está afuera.

- En qué parte exactamente maldita descerebrada.

- Caribe.

- Recervame un viaje a ese lugar, voy a ir personalmente a conocer a mi futura suegra.

- Pero no se el hotel en el que está hospedada.

- Si que eres una buena para nada, esa gente no se queda en hoteles tienen sus propias casas. Haz lo que te pedí y sal de mi vista.

- Si señorita.

Maldita inepta buena para nada, ni que fuera tan difícil acatar una simple orden, pero ahora que sé el lugar en donde estará mi suegra iré a hacer buenos méritos con ella.

Esta vez no te podrás escapar de mí Iker.

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Narra Amanda:

La llamada de la abuela me tomó de improvisto, una cena para el viernes es algo que no estaba en mis planes mucho menos en el estado difícil en que me encuentro con Iker.

De seguro esto lo ha planeado Roxana para fastidiarme la vida así que no pienso asistir a su juego barato. Tomo mi bolso y voy directo a verla.

- Abuela es bueno verte tan saludable.

- Pequeña no tenias porque venir.

- Preferí hacerlo en persona. No vamos a asistir el viernes.

- ¿Porque no?

- Iker tiene una reunión y yo también estoy trabajando en algo.

- Ya no vas a la empresa, en que estas trabajando Amanda.

- En rehacer mi vida ya es hora de que ponga mi vida en orden también he tomado en cuenta tu decisión abuela. Así que te pido que me dejes tener mi espacio personal.

- ¿Estás enojada porque di un plazo para elegir a la heredera?

- Estoy enojada porque siempre hace lo mismo, dices una cosa, pero siempre terminas beneficiando a Roxana sobre mí. Entonces qué sentido tienes que propongas algo si cuando ella es la que pierde cambias las reglas del juego a su favor.

- No digas eso Amanda cariño si Roxana hubiera traído al esposo de igual manera yo hubiera propuesto esta decisión.

- Siempre ha sido de la misma forma abuela. Así que te pido por favor que respetes mi espacio y mi palabra. No vamos a asistir este viernes ni a ningún evento que Roxana proponga, ahora soy una mujer casada y tengo obligaciones con mi esposo con mi hogar y conmigo misma.