Percy y Charles estaban entrando al auto de Charles cuando sintió que Annabeth le gritaba, Percy, ¡¿Qué demonios tengo en mi espalda?!
Por un breve instante le llegó un destello de la imagen de su espalda, pero enseguida la silenció, ya que no quería entrometerse en su intimidad. Decidió no responderle incluso cuando le rompía el corazón dejarla en ese estado de confusión y miedo, pero pensaba que era mejor decir ciertas cosas personalmente. Especialmente si vas a decirle a alguien que tiene marcas de Canis Lupus en su cuerpo porque encontró a su compañero hombre-lobo que no sabía que existía. Ya sabes, el típico ‘hey, vamos a conocernos un poco.’
Él se estremeció un poco cuando ella gritó, Charles lo notó y le preguntó si estaba bien.
Sí, estoy bien, es que tuve un zumbido en mi oído por un segundo, mintió Percy.
Así que ¿sabes a dónde quieres ir? le preguntó Charles.
Sólo detente en el primer concesionario de motocicletas que veas. No soy exigente y soy bastante bueno trabajando en ellas, así que no importa si necesita algún arreglo, dijo Percy. Cuando pasaron por delante de la casa de Annabeth, se encontró mirando hacia allí, luchando con las ganas de meterse dentro de su mente y ver cómo estaba. Se sintió raro cuando ella lo llamó; fue la primera vez que ella lo había hecho sin que él lo haya iniciado. A su lobo internó le agradó que haya acudido a él por ayuda, después de todo era su protector. La parte sarcástica de él le recordó que en realidad, ella no tenía a nadie a quién acudir. Eso hizo que un gruñido saliera de él, que tuvo que disfrazar con tos.
Charles, conforme a lo solicitado, se detuvo en el primer concesionario donde vio motocicletas. Cuando Percy salió del auto, sus ojos se posaron instantáneamente en una Honda Shadow negra, con tubos cromados y ruedas anchas. Era usada, pero aún así estaba en buen estado. A Percy le gustaba que sus motos fueran simples. Nada lujoso u ostentoso, sólo quería montarlas, no mostrarlas.
Un vendedor se acercó a ellos y se dirigió a primero a Charles, después de todo él era el adulto, pero él hizo señas hacia donde estaba Percy.
¿Puedo ayudarlos? preguntó el vendedor al mismo tiempo que tomaba una bocanada de aire. Percy estaba seguro de haber escuchado un leve gruñido cuando el vendedor retrocedió unos pasos girando su cabeza, y haciendo que su cuello quede expuesto a Percy.
Percy lo miró confundido por un instante y luego lo entendió, y lo que vio casi lo hizo caer al suelo: Canis Lupus.
Afortunadamente, Charles había empezado a dar un vistazo por el lote de autos sin prestarles atención, así que Percy dio un paso hacia el vendedor, Ethan era el nombre que decía su tarjeta, y olfateó. Efectivamente, era un Grey.
Instintivamente, Percy gruñó mientras su lobo se animaba por la presencia de otro Grey en el área que había considerado como su territorio. Después de todo el no estaba al tanto de que hubiese otros Grey´s en Coldspring. Después de un momento, el Grey llamado Ethan preguntó, ¿Quién eres y por qué estás en el territorio de un Alpha? Dijo Ethan
Alpha, pensó Percy, ¿de qué Alpha estaba hablando? Percy no quería darle demasiadas explicaciones a este Grey, por si acaso él y su Alpha fueran una amenaza.
No estaba al tanto de que hubiese algún Grey en este sitio, respondió vagamente.
¿Quién eres que crees que mereces saber cuántos Grey´s hay por aquí? Sólo eres un cachorro, con un ser humano dentro, le espetó a Percy.
El lobo de Percy presionaba por salir y Percy lo dejó solo un poco, su poder fluyó sobre él, el Grey lo sintió al instante y se inclinó casi involuntariamente cuando su lobo notó que él no era más poderoso que el que había llamado cachorro.
No tengo que honrarte con una respuesta, pero sólo para que sepas lo que has provocado, lo haré. Soy el príncipe de los Canis Lupus rumanos. Y soy el próximo en la línea para convertirme en Alpha, por eso no me someto a nadie más que el Alpha de todos los hombre-lobo de Rumania. Poniendo mucho cuidado con sus palabras para no dejar que su poder se saliera de control, preguntó, ¿Quién es tu Alpha y hace cuánto que hay Grey en Coldspring? Dijo Percy
El Gris, Ethan, gimoteó un poco, pero respondió, He oído de tu padre, dicen que hace que todos los Alphas hagan una reverencia ante su presencia. Dijo Ethan
Responde lo que te pregunté, Ethan. Ahora, dijo Percy muy serio.
Mi Alpha es Bryce Lawrence. He sido miembro del grupo por 3 años. No sé hace cuánto está activo. ¿Por qué estás aquí? Eres un adolescente de otro país, ¿Qué puedes querer en Coldspring, Texas? preguntó Ethan, desconcertado.
Mis asuntos no son de tu incumbencia. Dejando de lado este interesante giro de los acontecimientos por un momento, me gustaría comprar esa Honda Shadow, ¿cuánto está? preguntó Percy.
¿No quieres probarla? respondió Ethan.
No. ¿Cuánto? preguntó nuevamente Percy.
$2.500, y no tiene ninguna garantía. Tiene cinco mil millas de uso, los neumáticos son nuevos y nunca estuvo en un accidente, dijo Ethan como si fuera una grabación.
Percy sacó su tarjeta de crédito y se la acercó. Mientras Ethan caminaba con la tarjeta de su padre, Percy se dio cuenta de que acababa de cometer un gran error. Ahora Ethan tendría el nombre completo de su padre. Imaginó que este podría ser uno de esos momentos donde su pequeño fuego, Luna, diría algo como Ir directo a la cárcel, pierdes tu turno y no cobras tus $200. Sí, ella definitivamente diría algo así.
Charles había regresado adonde estaba Percy, pero él no lo notó hasta que Charles habló, ¿Encontraste algo para comprar? Pregunto Charles
Sí, de hecho, voy a comprar esa Honda Shadow negra. Se ve en bastante buen estado. ¿Crees que puedes llevarme adonde tengo que tramitar mi licencia y hacer lo que necesito para finalizar la venta? preguntó Percy.