Princesa por Elección (libro #3)

Capítulo 15

Dejé de leer un libro de historia para ver el calendario que estaba al frente de mí, el cual marcaba la fecha de 13 de Mayo, suspire al saber que solo faltan cuatro días para mi cumpleaños; estoy un tanto agotada de pensar en cómo toda mi vida ha cambiado y de cómo, inimaginablemente el tiempo se había ido volando en tan solo un año; no creía aún que posiblemente pasará mi cumpleaños en el lado Oeste aunque no sabía en qué ciudad y estaba segura que sería Nordineland, el cual está situado a unos kilómetros lejos de Hillburg Prince.

Estaba pensando en escaparme e irme a mi casa para celebrar con mi familia mi cumpleaños, pero a veces creo que capaz el rey Arturo tiene otros planes y más, si me llega a preguntar si quiero una fiesta; aún no estoy preparada para explicarle que no es necesario que hiciera una; porque la única amiga que tengo en el país es Lou, y Wayberly dudo que llegará al país solo para celebrar mi cumpleaños, además no quiero interrumpir su tratamiento y estoy muy consciente que si ella se queda pueda ser que no se quiera volver a ir, por mí y por Neil. Además de las personas que conozco y quiero, la mayoría son adultos y todos trabajan para obtener el dinero que necesitan, así que no creo que tampoco llegasen a mi fiesta.

De todos modos, me conformaba con solo tener a mi familia y a mis seres queridos a mi lado con un pastel en una mesa, es lo único que quiero y no pido más… Bueno sí, el deseo que quiero es que todo esto acabe de una buena vez, odiaba que todos ahora estuvieran más pendientes de mí, de mis comidas, de mis salidas y de mi vida; todos me van a volver loca si no me dejan respirar algún momento, ni siquiera puedo sacar la cabeza por la ventana porque me encontraré a un guardia vigilando ese lugar, no puedo abrir la puerta porque ahí estará otro guardia y no creo poder moverme de mi habitación si no estoy siendo escoltada por una docena de ellos más.

Xavier tuvo esta gran idea y por supuesto, su padre la llegó a aprobar. Me siento tan aislada en cualquier lugar que ahora es imposible que no dejé de pensar últimamente en todo. Y quizás ya estoy cansada de todo esto, que por eso, ya no protestaba o me negaba a aceptar ciertas reglas o leyes cuando él me las llegaba a decir.

De todas formas, me di cuenta después de todo, que muertes siempre van a ver, Avery y Lucas no se van a detener hasta que consigan lo que más quieren y aunque yo por más que trate de hacer bien las cosas, al final ellos solo llegaran a burlarse de mí, dándose cuenta que yo les tengo miedo y obedezco a sus amenazas; además de ello, supongo que siempre han considerado que lo que haga va estar malo para ambos, hasta quizás el modo en que respiro, no es suficiente para que me dejen también en paz; hasta estoy más que segura que ahora mismo uno de los dos me debe de estar vigilando detrás de mi espalda aunque yo no me dé cuenta.

Si llegase a decir ahora mismo la verdad, creería que Lucas escaparía y Avery terminaría haciéndose la inocente; no tenía muchas pruebas además de las palabras de las competidoras anteriores que no sea la mía; porque haber hurtado un momento el diario de Avery y de ello sacar un poco de información, diría que tampoco sería de mucha ayuda y ¿por qué?… Porque el diario no lleva ni su nombre ni su firma, nada que llegue a confirmar que aquellas palabras escritas en papel, sean de ella, y a la vez, la caligrafía es diferente en todas las fechas que están en el diario; además, conociendo mejor ahora a Avery y Lucas, ambos ya deben de haber planeado algo para salirse con la suya.

No estoy a gusto, ni conmigo misma por mi actitud derrotada ni mucho menos con actuar como una heroína aunque no lo fuese; a veces solo deseaba que todo esto no fuera real o que hubiera sido mejor no seguir dentro de la competencia, pero de último momento llegó a pensarlo mejor y me digo:

« ¿Quién más excepto yo seguiría con esto?»

Y es cuando la respuesta surgía muy rápido de mi cabeza.

«No cualquiera»

He tenido que aceptar muchas cosas en los últimos días; una de ellas es que no es fácil comprender la mente y los corazones de los demás cuando ya es demasiado tarde para arreglar las cosas; lo segundo que no puedes confiar en cualquiera cuando tu propio enemigo puede estar en tus espaldas a punto de apuñalarte y asesinarte sin dejar un rastro de vida en ti; y por último, el tercero, que no cualquier persona puede llegar a tomar decisiones tan rápidas y precipitadas cuando se trata de salvar la vida de los demás o por lo menos tratar de huir para no lastimar a los que quieres.

No. Nada es fácil. Es como estar contra la espada y la pared, no hay escapatoria de ambos lugares.

Pero quizás…

Pueda ser que se encuentre un punto clave del cual haga que te liberes de ambas cosas.

Mi punto clave aquí son los secretos que sé de Avery y Lucas. La parte horrible es que uno es la espalda y el otro la pared; ambos acechando y contando las horas para asesinarme sin que me dé cuenta.



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En el texto hay: principe, princesa, corona

Editado: 21.04.2021

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