Rapunzel
Encerada en una torre, no puedes hacer mucho, con la única compañía de un camaleón y la gran atención de tu madre, Rapunzel era una hija excelente pero no por esa razón su madre la amaba o la que decía ser su madre. Mientras estaba sola en la torre conoció a un joven ladrón que portaba una corona en su bolso, y es entonces cuando él le promete llevarla a ver esas hermosas luces del cielo que solo aparecen en el cumpleaños de la chica de cabello dorado y a cambio ella le devolverá su corona. Ambos se enamoran perdidamente del otro por el transcurso del viaje, la madre de Rapunzel al ver la felicidad de su hija le dice que se pueden ir juntos lejos de la torre y que ella los encontrara a donde quiera que vallan, que vil manera de mentir pues ella sabía que pronto moriría de vejes porque Rapunzel no era su hija de sangre pero si era hija de su ex amor y ella la cuidaría hasta que llegara el momento.