La Boda

Eliam

Salgo de la inauguración feliz, sé que sus putisamigas y su madre han tratado de que esto no se lleva a cabo, pero más sabe el diablo por viejo que por diablo, voy un año luz por delante, tengo a su padre metido en un bolsillo, claro tuve que ceder los preparativos de la boda, lo que seria una boda con 25 invitados, será una boda con  más de 250 invitados, pero todo por mi causa.

Llego a casa de mi madre, voy directo a su habitación, toco y escucho el adelante

-mañana a las 6 de la tarde me casaré, será en el Hotel Melia en el Malecón- ella me mira sorprendida y yo le doy la espalda cerrando la puerta y entrando a mi habitación, si quiere ir que vaya y sino, pues falta no me hará, con que estemos Zaida y yo basta.

Duermo feliz como lombriz, me despierto temprano, bajo a desayunar y todo está como me gusta, mi madre me espera en el desayunador

-porque no me dijiste con tiempo que te casarías, tal vez te hubiese importado mi visto bueno sobre mi futura yerna-

Rio con sorna – tu opinión siempre me ha valido un pepino-

-hijo, ahí estaré para ti como siempre-

-me marcho, debo ultimar detalles y con tus palabrerías me quitaste el hambre- ella asiente y permite que me marche, siempre ha sido así desde que falleció mi padre he asumido mi puesto de hombre de la casa y ella solo le corresponde asentir a mis decisiones.

Las horas transcurren, mi madre me avisa que llevará unas tías, primas y amigas, genial, le digo si a todo porque no quiero que nadie me joda la paciencia; a las 5:45 llego al lugar de la ceremonia y mierda, esto es ostentoso y magnifico, nada que ver con mis gustos, pero lo que sea para quitarme de arriba al pellejo viejo de mi suegra.

Zaida

Mi casa es un jerborio de gente

-mamá, donde vamos a meter tanta gente, la iglesia no es tan grande- ay bibadre

Tranquila mi niña hermosa- besa mi frente como de costumbre -tu ponte hermosa que aunque sea uno arriba del otro vamos a estar presentes para ti-

Empiezo a calcular mentalmente y ni así logro acomodar tantas personas, el límite de invitado eran 25, aquí hay 75 y no han llegado la familia de papi del campo.

A las 10 pasa Carolina por mí, ya que iremos al salón para las uñas, los pies y hacerme un moño hermoso, por lo menos en eso estuvo de acuerdo Eliam, por los nervios le dieron hasta para elegir el color con el que me pintaré las uñas.

Entramos al salón, nos dejan las manoss y los pies en agua para que las cutículas sedan rápido, mientras nos lavan la cabeza

-extraño tu greña- me dice Caro

-yo también- le contesto, dándome cuenta tarde de mi error garrafal

-OHHH, ME EXTRAÑA señora así me siento mejor, me siento más bonita y cómoda-

-y es verdad, solo que la costumbre de tenerlo rizo-

-a mi no me venga con esa, tu solo repites como papagayo lo que te dice Eliam, solo quiero que no olvides que eres hermosa como quieras estar, con el pelo rizo, largo, corto, lacio, rubio, rojo, hasta amarillo, lo que te hace hermosa es ser tu misma-

Contengo las lágrimas, si soy una llorona con corazón de pollo, una blandengue en sentimientos.

-ahora deja de llorar, que se te pone la cara como un toto aguanoso- me dice Caro sin siquiera estar viéndome-

-como sabes que estoy llorando- le digo sorbiendo mocos

-lloras por todo-

++++

Salimos casi a las 3, nos detenemos un momento a comprar lencería sexi y de paso a comer algo, llego a mi casa casi a las 5, las 75 personas que dejé parece que le echaron agua y se multiplicaron como los gremlins, me felicitan y veo mi habitación llena de regalos, una tía hasta me trajo 7 gallinas ponedoras y un galón de leche pura de vaca

-eso ayuda a tu marido con la potencia, huevo de gallina y leche pura de vaca, así me José nunca se cansaba hasta su último suspiro, no por nada tuvimos 16 muchachos, un buen desayuno es la clave-

Mi papá evita reír, mientras mueve las cejas de arriba a bajo

-gracias tía, veras que te alcanzaré, seguiré tus consejos y tendré más de 16-

Subo a mi habitación evitando mas consejos no solicitados, entro al baño, me baño con calma aunque es tarde a la novia se le permite ser impuntual, salgo envuelta en una toalla y busco el vestido que eligió Eliam, a mí lo único que me gustó del vestido ese es que era blanco, pero no está por ninguna parte; respiro profundo ya que donde hay mucha gente las cosas tienden a cambiar de lugar, me seco bien el cuerpo, me hago un maquillaje sencillo a pedido de mi hermoso novio y me dirijo a la habitación de mi mamá

Cuando abro la puerta sobre su cama reposa un hermoso vestido de novia, parece de cuento, al lado unos zapatos que nada que envidiarle a los de cenicienta, las manos me empiezan a temblar y soy abrazada por mi madre desde atrás

-creíste que el día que has planificado desde que tienes 7 años sea tan insípido como firmar un simple papel y ya?-

-mami- me volteo y la abrazo

-tendrás tu boda pimpirimposa, te mereces lo mejor y mientras yo viva lucharé para dártelo-

La abrazo con fuerza, las personas que me rodean son mucho con demasiado, mas de lo que merezco, mi papá entra y se une al abrazo

-dejen de llorar, los invitados se han ido, solo quedamos nosotros-

-pos sal para terminarme de cambiar-

-solo quiero decirte que tu madre y yo planificamos una ruta de escape, la clave es ácido desoxirribonucleico, la dices y nos vamos sin mediar palabras-

Mi madre le da una palmada en el brazo y el sale dejando que mi madre y yo terminemos de alistarnos

-el amor ciega a las personas- me dice mientras retoca mi maquillaje -pero en algún momento el cerebro vuelve a tomar el control y se recobra el razonamiento, si eso pasa algún día esta es tu casa-

-mami-

-nada mi princesa, no digas nada, solo atesora estas palabras-