Estoy lista para entrar a clases, mi móvil vibra y los mensajes de Cameron me abordan, son tres y juro que me desmayo de la ternura y amor.
Cameron 09:48
"No tienes idea de lo difícil que estar sin tí."
Cameron 09:55
"Te buscaría en este instante."
Cameron 10:00
"Te extraño."
Debo decir que es alguien impaciente cuando se trata de esperar la contestación, me duele saber que estamos lejos, me gustaría poder besarlo y decirle lo mucho que lo extraño y no tener que escribirlo en un texto.
—Bien, supongo que me toca álgebra— dice Lucy agobiada.
—Oye, Bella, ¿qué clase tienes?—pregunta Camile.
—Me toca literatura—digo observando mi horario con una sonrisa, me gusta esa materia. Diría que es mi fuerte.
—Dios que suerte tienes, ¡te toca con el profesor James! ¡Es tan sexy!—dice Lucy suspirando.
No puedo evitar reír por su manera de referirse a ese hombre, las tres emprendemos el camino a los respectivos salones y yo empiezo a imaginar cómo será el dichoso James, ¿Rondará los cuarenta? Si las chicas piensan que es sexy debe ser algo joven, ¿no?
¿Será un maestro estricto? ¿O quizás de esos permisivos con sus alumnos? Odiaría que sea de los silenciosos que dejan tarea como si su vida se fuera en ello, que no explican o simplemente te mandan a investigar en internet cosas que solo Einstein entendería, ¿Soy algo dramática?
Al llegar a la entrada del aula veo al muchacho que me dió mi horario en la mañana temprano, lleva un bolso en la mano y charla con dos miembros del equipo de fútbol, los saluda y se gira para entrar a la clase, chocamos al intentar ingresar los dos al mismo tiempo. Genial, parece que será costumbre.
—Parece una costumbre tuya chocar con la gente—dice irónico.
Pensamos lo mismo. Casualidad, solo casualidad.
—Bueno es que por lo general la gente no es tan estúpida—le respondo.
—Cuidado señorita, así no le debes hablar a tu maestro de Literatura—dice sonriendo con orgullo.
Mis ojos se abren como platos para el desayuno, ¿Escuché bien? ¿Él es mi profesor? ¿Él es el sexy hombre del que hablaban las chicas? ¿Él? ¡¿Él?!
No lo puedo creer.
Entra al salón y me indica que siga, paso a su lado y recorro el largo pasillo hasta llegar al último asiento junto a la ventana, no hago más que tomar asiento y estoy segura de que mis nervios se deben a la forma en la que me mira, como si se le hubiera ocurrido la mejor de las ideas y la verdad me preocupa; sonríe, camina hasta el escritorio y saca algunos apuntes que ordena repartir al primer alumno frente a él, observa el salón apoyado sobre su escritorio, luce magnífico.
Cálmate Bella, es solo un profesor.
—Bien alumnos, bienvenidos a la clase de literatura— se pasea por el salón — Mi nombre es James, seré su profesor pero no su amigo. Las reglas en mi clase son simples; respeto, silencio y compañerismo.
—¿Qué hay de su próxima "Privilegiada"?— pregunta Charlotte levantando ambas cejas.
—¿Privilegiada?— dice James sonriendo volteando a verla.
—Si, su favorita. Estamos todos al tanto de que todos los años tiene una y estoy dispuesta a ser yo— dice relamiendo sus labios. Asqueroso.
—Bien, en mi clase también aprecio la educación, por lo tanto levanten la mano para poder hablar. Y a mis privilegiadas, las elijo en base a su desempeño académico, y tú querida mía, tienes más desempeño en otras áreas por lo que veo. Por lo tanto, te sugiero estudiar bien mi materia y ser más respetuosa contigo misma. Si te ofreces de esa manera a todos lo lamentaras tarde o temprano.— y con ese discurso le cierra la boca
—Auch... — susurra una de sus amigas.
—¿Alguien puede decirme qué es la Literatura?— pregunta tranquilo.
—Es la teoría de la composición de las obras escritas en prosa o verso— Charlotte es la primera en hablar, y yo que pensé que estaba vacía en su cabeza.
Me sorprende que pueda hacerle frente como si no hubiera pasado nada, tiene agallas, lo admito.
—¿Algo más? ¿Alguien?— pregunta nuevamente James.
—Es arte, el arte de la expresión escrita o hablada— pronuncio fuerte y claro, los nervios me están matando.
James fija su mirada en mí, válgame Dios, estoy por tener un colapso nervioso definitivamente y siento mi respiración algo brusca, ¡cálmate!
—Perfecto — susurra y creo que lo he imaginado.— Según la definición de la Real Academia Española,— habla para todos los demás — la literatura es el arte de la expresión verbal, entendiéndose como verbal aquello que se refiere a la palabra o se sirve de ella y, por lo tanto, abarca tanto textos escritos como hablados o cantados.
—¿O sea que vamos a cantar mientras leemos? — pregunta Scott Fitzgerald, él solo sirve para el Soccer, ahora puedo confirmarlo.
Editado: 11.01.2019