Capítulo 8
Se veía jodidamente lindo durmiendo, lástima que no duro mucho eso.
Mientras esperaba a que Owen terminara de ducharse le hice un desayuno especial que básicamente consistía en: Plato, cuchara, Leche y froot loops.
Milly.
¿Estás en tu casa?
Hope.
Oyeeeeeee.
Despiértate estúpida.
Hope.
Estoy despierta.
¿Qué paso?
Milly.
Necesito ayuda.
Bueno es básicamente chisme, pero estoy en casa aburrida.
Hope.
Emily, necesito hacer unas cosas.
¿Es importante?
Milly.
Si.
Bueno no sé.
¿Hay algo que tenga que saber querida Italia?
No lo ocultes, ya sabe que Owen esta en casa, solo quiere hacerse la que no sabe para que tú misma se lo digas, no seas cobarde.
Hope.
¿Sabes cuánto te odio?
¿Quién te lo dijo?
Milly
¿Por qué me contestas con otra pregunta?
¿Decirme que?
Hope.
Owen esta en casa.
Y antes de que digas algo no.
No tuvimos sexo.
Milly.
Lo sabía MALDITA ZORRA.
¿Qué hace en tu casa?
Más te vale que no hayan tenido nada.
Hope.
Ven.
Pero si no estás aquí en 10 minutos no te contare nada.
Milly.
LO QUE DIGAS JEFAZA.
AHORIOTA VOY GUAPURA.
-¿Con quién hablas? –La voz de Owen se escuchó a mis espaldas.
-Con Emily, la esperaremos.-Deje mi celular en la mesa y seguí desayunando.- Te hice el desayuno.
-Cereal.-Se sienta a mi lado y comienza a comer- Mi favorito
-JA, JA, que sarcástico.
Desayunamos en silencio. Yo lo observo cada que puedo, su cabello color castaño, casi rubio se veía mojado.
¡Carajo solo de verlo me daría un orgasmo ocular!
El timbre de mi casa me salvo de ese orgasmo ocular.
-¿Emily sabe lo que haremos? –Me agarro de mi muñeca antes de ir a abrirle a Emily.
-No, pero ella no le dirá a nadie.-No me soltó.- ¿Me sueltas?
-Antes dame un beso.-Sonrió de lado de esa manera que tanto me gusta. Sonó otra vez el timbre.- Anda, luego Emily se ira.
Muy a fuerzas…
¡Mentirosa de mierda!
¡CALLATE MALDITA VOZ!
Muy a fuerzas lo bese, no fue un beso apurado, fue más bien dulce y tierno, me tenía sujetada por la espalda y yo tenía mis brazos alrededor de su cuello, dejo de besar mis labios y comenzó a besar mi cuello de una forma demasiado lenta y excitante, sentía como mi cuerpo estaba por derretirse, pequeños jadeos salían de mi boca.
-Creo, creo que deberías parar.-Me aleje de el un poco- Iré por Emily.
-De acuerdo.- Me soltó de mi cintura y yo empezaba a alejarme cuando decidí darle un último beso, después me fui- Joder, me trae loco.
Susurro pensando que no lo iba a escuchar.
Tú también me traes loca.
-¡HOPEEE! ¡ABRE LA JODIDA PUERTA SE QUE ESTAS AHÍ! –Grito Emily cundo estaba a punto de abrir la puerta- Hasta que por fin la abres, tardaste un demonio, ¿Por qué estas roja? –No conteste nada y sonreí como estúpida- ¡POR DIOS LOS INTERRUMPI EN PLENO ACTO!
-Cállate idiota, está adentro.-Tape su boca con mi mano pero ella paso su lengua por está causando que la quitara- ¡QUE ASCO!
-Cállate tú, me dijiste que no hicieron nada, mentirosa.
-Es verdad, ayer solo nos besamos, casi llegábamos a segunda base, pero no pude.-Bajo mi mirada y ella la sube agarrándome de la mandíbula.- No quería que viera mi cicatriz.