1. Confesión.

Sin duda estar enamorado de su tío no era lo correcto, ¿Pero qué más podía hacer? Jimin estaba completamente loco por Jungkook ¿Y cómo no? Si era un chico realmente perfecto; atlético, inteligente, respetuoso, Jeon Jungkook poseía un sinfín de cualidades que habían vuelto loco al castiañito.

Ya no podía más, tenía que decirle a Jungkook lo que sentía por él, ¿Y qué mejor momento que ahora? La madre de Jimin había salido a un viaje de trabajo y eso le daba la oportunidad para hablar con su tío.

Bajo las escaleras de manera rápida pero con cuidado de no caer y se dirigió directamente a la cocina, sabía que a esta hora su tío se encontraba ahí tomándose una taza de café.

–Buen día hyung.  — Le saludo educadamente.— ¿Cómo se encuentra el día de hoy?

—Buen día Mochi. — Utilizó ese hermoso apodo que volvía loco al menor.— Me encuentro de maravilla, tuve una noche increíble ¿Y tú?

Claro que Jeon Jungkook había tenido una noche increíble, fantaseando con su pequeño sobrino mientras atendía su adolorida erección; lo que Jeon no sabía es que Jimin tenía las mismas fantasías eróticas y románticas con él.

–Yo también tuve una buena noche hyung... ¿Sabe? Ahora que lo recuerdo creo que soñé con usted. — Le confesó con algo de timidez.—

–¿Ah sí? ¿Y podría saber que es lo que soñó mi sobrino favorito? —Le pregunto con un poco de curiosidad mientras le regala una atenta mirada que logro poner un poco nervioso al joven Park.—

–B-bueno yo soñé que... Soñé que usted me daba un beso... Aquí. — Murmuró completamente nervioso mientras acariciaba ligeramente sus labios.—

Sin duda la confesión del menor tomo por sorpresa a Jungkook, jamás se imagino que su pequeño Mochi tuviera esa clase de sueño con él, bueno, tampoco eran sueños tan sucios como los suyos pero ¿Por qué Park tendría esa clase de sueños con su tío?

–¿Y eso te hizo sentir incómodo bebé?

Jimin negó repetidas veces ante tal pregunta, no sé sentía para nada incómodo con ese tipo de sueños, al contrario, deseaba que su tío lo besara y tomara su virginal cuerpo solo para él.

–¿Te gustó? — Preguntó con un ligero tono de picardía en su voz.—

– S-si hyung... ¿Acaso eso lo molesta? — Lo miro con algo de vergüenza mientras sus mejillas se ponían coloradas por su pregunta.—

Jungkook nego y se acercó a Jimin hasta hacerlo retroceder y chocar con la pared, con una de sus manos sujeto su delicada cintura y con la otra lo tomo del cuello teniendo cuidado de no lastimarlo.

–Al contrario, me vuelves completamente loco Park Jimin. — Susurró antes de estampar sus labios con los del menor—.

Jimin estuvo en shook durante algunos segundos antes de empezar a corresponder aquel beso, todo era perfecto, ambos habían deseado tanto este momento que vivirlo incluso se sentía irreal, solo de algo estaban seguros y es que este solo sería el inicio de su relación.