Capítulo: 30

Gael

Escucho a Lena hablar enfadada y miro hacia el balcón, esta parece estar discutiendo con alguien, salgo de la cama dando un bostezo sabiendo que pronto debo de estar en la empresa, voy hacia ella que cuando voltea hacia mi cuelga la llamada, sus ojos están rojos de llorar y no entiendo nada, me acerco a esta, pero lo único que hace es alejarse de mí.

—Kurt cumplió —dice con rabia y no sé a que se refiere —el maldito arruinó mi vida

—¿De qué hablas?

—De las pruebas que tenía contra mí, están por todos lados, el hospital ya lo sabe, mi padre también —ella comienza a llorar sentándose en la cama, paso las manos por mi rostro

—Sigo sin entender nada Lena, ¿de qué hablas?

—Tengo problemas con las drogas Gael —alzo mis cejas —y no sé cómo el maldito de Kurt lo sabía y ahora todos lo saben, pero pienso enseñarle esa foto a Thomas —ella se pone de pie pero tomo su brazo

—No vas a hacer eso Lena

—¡La amas a ella que ha arruinado mi vida! —me grita soltándose y sale de la habitación rápido, yo la sigo

—¡Lena! —grito tomándola del brazo de nuevo —¡maldita sea Lena! No vas a hacer nada, ¿me oyes? —tomo su mentón con mi mano

—Suéltame Gael, me haces daño

—¿Hijo que sucede? —mi madre interfiere y la suelto —esos gritos, tu padre aún duerme —Lena se aleja de nosotros rápido y cuando iba a seguirla mamá toma mi mano —Gael

—Madre por favor no interfieras

—¿Y qué dejo? ¿Que le pegues? —respiro hondo

—No soy Thomas —me alejo de ella

—No digas eso Gael

—Mamá nos hemos hecho los ciegos, pero todos sabemos lo que Thomas le hace a Naomi —sus ojos se llenan de lágrimas —los golpes, los abusos

—Es mi hijo Gael, ¿qué querías? ¿Que lo enviara a la cárcel? Naomi no debería hacerle enfadar —la miro negando con la cabeza

—Me sorprende que siendo mujer digas eso madre

—Es la verdad y ella no se ha ido porque no ha querido Gael —paso las manos por mi rostro —Gael

—Olvídalo mamá —me alejo de ella y voy hacia la habitación esperando que Lena no haga nada, dudo que lo haga, lo que menos quiere es hacerme enfadar.

—Pensé que hoy no vendrías a trabajar —comento cuando me acerco a Naomi, esta rueda los ojos

—Thomas no vendrá, sigue en el hospital y quiere que mientras yo esté a cargo aquí —sonríe

—¿Y cómo estás? —llevo una mano a su mejilla y ella me mira triste

—Gael —suspira queriendo decirme algo pero se calla

—Dime Naomi

—Te dije que no seguiríamos con esto —ella aleja su mano de mí —no podemos seguir Gael

—Naomi no quiero alejarme de ti, ya lo hice antes —me acerco más a ella —no quiero tener que hacerlo de nuevo, te dije que me dieras tiempo, pero te ayudaré a alejarte de Thomas —llevo mis manos a su rostro —no me alejes de ti Naomi

—Entiéndeme —sus ojos se llenan de lágrimas

—Digas lo que digas no me alejaré —ella suspira —veámonos hoy en la cabaña —limpio algunas lágrimas que salen de sus ojos —por favor.

—Está bien —ella respira hondo y sonrío feliz —esta noche nos veremos ahí Gael —asiento

—No te vas a arrepentir Naomi, lo prometo —dejo un beso en su frente y me alejo de ella, mis padres siempre han sabido lo mal que Thomas la trata, no les importó, ahora sé que debo ayudarla a ella sin importar más nada, de todos, la única víctima es Naomi.

★★★

Naomi

Entro al baño sin poder dejar de llorar, esta noche Thomas pondrá en marcha su plan contra Gael, no sé que hará este, pero ya le dije que nos veríamos en la cabaña y estaba feliz, echo agua en mi rostro teniendo la sensación de que algo muy malo pasará, espero estar equivocada, pero me miro en el espejo repitiendo que todo esto lo hago por mis hijos, respiro hondo y cuando logro calmarme un poco salgo del baño, luego me dirijo a la salida y tomo el taxi que ya me esperaba mirando el mensaje que Thomas me ha enviado, suspiro cerrando con fuerza mis ojos y espero paciente a que el taxi llegue a su destino. Me detengo frente a la puerta de Kurt y toco el timbre de este, segundos es lo que este tarda en abrir y sonríe al verme.

—Me alegra verte caminando —dice, pero solo paso por su lado y entro a la casa

—Esta noche Thomas hará algo contra Gael, no sé que sea y odio estar en la ignorancia, este le quiere enviar a la cárcel y no sé cómo lo hará —Kurt suspira mientras muevo mis manos nerviosa —Kurt no sé si lo que hago está bien.

—Naomi, si no quieres hacerlo no voy a obligarte, pero quizás sea la única forma

—Lo sé y por eso lo haré, Thomas me envió una dirección, dice que lo más probable es que ahí esté Victoria —le enseño el mensaje que me envió —dice que si ella no está habrá mucha mercancía de ella, la cual deben de estar sacando del lugar —Kurt asiente

—Bien, iré a revisar esa dirección

—Ten cuidado —él mira mis ojos —no confío en Thomas y él cree que hay algo entre tú y yo —este asiente

—No te preocupes —sonríe —tendré cuidado, además, si es una trampa ya tengo a Thomas vigilado, tarde o temprano nos va a llevar a esa mujer

—¿Crees que siga haciendo negocios con ella? Quería matarme —Kurt suspira

—Creo que Thomas ama el dinero Naomi, todo lo que ha hecho ha sido por dinero o por fastidiar a Gael, esas dos cosas mueven su vida —asiento, tiene razón, me siento en el sofá mirando hacia la nada pensando en sus palabras, ahora seré yo quien le ayude a destruir a Gael y pienso que nunca podré perdonarme eso.

—Tengo miedo —susurro y Kurt se agacha frente a mí y toma mis manos

—Y tienes dudas, es normal Naomi

—No debería, se supone que debería hacer cualquier cosa por mis hijos sin mirar si está bien o mal, ¿en qué me convierte tener dudas ahora Kurt? —aprieta mis manos y miro sus ojos

—Deja de pensar así, eres una madre estupenda Naomi, todo saldrá bien y cuando menos lo imagines estarás muy lejos con tus hijos, lejos de todo esto, ya verás —él besa mis manos

—Debo volver a la empresa —se aleja de mí