Ezequiel
Llego el día, hoy todo dependerá de la suerte.
Voy camino al punto de encuentro a entregar el dinero, decidí darles en efectivo ya que era más seguro, ellos accedieron y aquí estamos. El lugar era una pequeña choza abandonada en el campo, tenía un olor, deje el dinero y me estoy por ir pero alguien sale de una de las habitaciones
-Vaya vaya, el enamorado
-Es usted…lo sabía, ¿Cómo puede hacernos esto? Esta confabulando con el enemigo
-estoy de lado ganador, ustedes ya perdieron, gracias por todo señor wínchester, ahora váyase
Me estoy retirando y sus palabras me detienen
-Saludos a Caroline…-me doy vuelta y lo miro furioso
-Vete al infierno Nixon
-Ya estoy ahí
Salgo de la choza y voy por la carretera, me detengo en una cafetería de paso, al entrar ya estaba todo el operativo armado. La policía estaba rastreando el dinero, todo salía de acuerdo al plan…por el momento.
-Venga señor wínchester, ya está todo saliendo de acuerdo al plan
-Muy bien
Uno de los oficiales que rastrea el dinero da una alerta
-Señor, están entrando a un aeropuerto privado
-Bien es nuestro momento, vamos
Salimos todos para el aeropuerto, debo admitir que estaba nervioso, pero si todo sale bien no nos joderan mas la vida. Entramos y había una avioneta a punto de despegar, todos bajamos de los autos a toda prisa y dos policías me custodian mientras le disparan a la avioneta para evitar su despegue, la avioneta cae pero no llega a explotar ya que estaba a baja altitud, los policías corren a sacar a las personas dentro y yo quiero ir pero no me dejan pasar, por mi seguridad, primero sacan a Nixon, luego al piloto y por último a Sonia, tenía el dinero en la mano y luchaba para zafarse del agarre de los policías pero estos no le hacen caso.
Meten a todos en custodia y Sonia me ve a lo lejos…maldita vieja.
-Muy bien señor wínchester esto le pertenece – me da el bolso con el dinero dentro, yo lo abro y les doy el rastreador que ayudo en la operación- y esto es de ustedes., muchas gracias por todo señor.
-A usted por confiar en nosotros, no salga de la cuidad, ay que lo llamaremos para testificar en el juicio
-No se preocupe, lo que necesite me avisan. Ahora si me disculpa debo ir a ver a mi mujer, no sabe nada de mi hace horas
-Vaya tranquilo
Subo a mi auto y me voy para mi casa, le pedí a Caroline que me espere ahí, era más seguro. Llegue a la entrada y abrí la puerta, Caroline estaba en el sofá junto a azul y Sebastián, al verme sale corriendo y me abraza
-Gracias a dios estas bien-me abraza fuerte
-Estoy bien cariño, tranquila, te prometí que volvería sin un rasguño
Caroline me suelta y viene Sebastián a hacer lo mismo
-Maldito imbécil- me abraza- que bueno que estas bien
-gracias
Azul hace lo mismo, me abraza y agradece que este bien.
-Bien vamos al sofá que les tengo que contar todo.
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Editado: 09.07.2021