Prometo Enamorarte

Capítulo 6

Lo que está destinado a suceder... siempre encontrará una forma única, mágica y maravillosa para manifestarse...

Stephen


-No te creo.- Dijo segura. Auh, eso dolió.

-¿Por qué te mentiría?- Doy un paso hacia ella al mismo tiempo que ella daba un paso hacia atrás.- Es la verdad, lo juro.- Me miró por unos segundos decidiendo si creerme o no.

-Es que... yo no siento eso por ti, Stephen. Ese vínculo, ese amor tan fuerte que describes, yo no lo siento.- Golpe fuerte, a pesar de que sé que ella no tiene la culpa y que además es razonable, ya que al estar durante años sin saber nada de nosotros...como que sus rasgos de loba estaban dormidos.

Nunca sentirá ese vínculo antes de su transformación, a menos que...

-Lo sé. - Trago fuerte.- Pero te aseguro que antes de tu transformación pensaras todo lo contrario.


-¿Estás diciéndome que intentaras seducirme?- Habló, con algo de humor y burla en su voz.


-Estoy diciendo que voy a enamorarte.

-Mira Stephen, en mi mente pienso de todo menos en el amor. Me miró- Si es cierto que soy tu... tu compañera y que ese vínculo es tan fuerte... deberías parar aquí, no quiero hacerte daño.

Suspiro.- Me gustan los retos Kelly.

-¿No hay alguna manera de evitar esto? ¿De borrar ese vínculo? - Habla con tanta seguridad y determinación, segura de sí misma.

No te voy a perder Kelly, no antes sin haber luchado hasta quedarme sin aliento.

- No.- Mentí.- Mira, déjame intentarlo. Lograré hacerte cambiar de opinión, lograré que me quieras y digas " soy tu luna, tuya" antes de tu transformación.- La interrumpí antes de que protestara.- Pero si no lo logro... aceptaré tu rechazo, lo juro.

Ella se mantuvo en silencio.- Es un caso perdido Stephen. Jamás cambiaré de opinión. - Se cruzó de brazos.- No seré tuya ni de nadie.

-Si estás tan segura de eso... ¿Apostamos?


-Soy bastante grande para saber que las apuestas no traen nada bueno.


-¿Eso que huelo es cobardía?- Digo junto a una sonrisa burlona.


-¿Cómo puedes pensar en amar a alguien cuando estás en guerra? ¿No te asusta perderla?

-No.- Hablé serio acercándome a la vez unos pasos más a ella. -No, porque: Uno, he estado esperando desde hace años el momento en encontrar a mi Luna y dos, la protegeré, te protegeré, hasta mi último aliento. -Ella me miró, sin saber que decir. Sé que no lo entiende, los humanos no entiende el vínculo tan fuerte que hay entre dos compañeros... y ella convivió tanto con ellos.

-Está bien. - Suspiró.- De todos modos, no me harás cambiar de idea.- Sus ojos se abrieron, recordando algo- Tú... ¿Esta ropa es tuya? ¿Tú me duchaste y me cambiaste de ropa?

-Umm... Te dejaré con la duda.- Me dio una mirada asesina.- ¡Vale!, se llama Mery, es la doctora de nuestra manada.
Mery se va a quedar sorprendida cuando sepa que Kelly se recuperó antes de lo previsto.

Entonces en un movimiento rápido me acerqué mucho más a ella, la tomé del brazo y la acerqué haciendo que chocara contra mi pecho. Sentí su aliento irregular en mis labios, pero se relajó entre mis brazos.


-¡Auh!- Grito al sentir un fuerte dolor entre mis piernas. Ella hizo... ¿Lo hizo? Me alejo con mis manos entre mis rodillas.-Loca.

-Tal vez lo sea.- Alza la cabeza con orgullo.- Te dije que estás perdiendo el tiempo en hacerme cambiar de opinión. Mejor busca a alguien más que si quiera ser tu luna. Seguro hay muchas.

Niego mientras siento que el dolor se me pasa poco a poco.

 

-¿Hemos comenzado y ya quieres que me rinda? Eso nunca.


Ella suspira.- Como quieras.- Y salió de la habitación.
Toda una fiera...una hermosa fiera.


Te voy a domar Kelly, haré que me quieras...o me ames.


&&&&

Cuando salgo de la mansión, el amanecer me da la bienvenida. La gente anda de allá para acá, arreglando los daños producidos por el ataque.

Me acerqué y empecé a ayudar a reconstruir las cabañas quemadas, reparando los daños, y sobre todo, cambiando la contraseña del monitor de electricidad para que sólo yo pueda activarlo y desactivarlo.

No es que no confíe en Johan, pero debo tomar en cuenta que él ha estado muy raro en estas últimas semanas. No sé si es por la llegada de su hermana, o si es por otra cosa.

Y también tengo que lidiar con la llegada de mi familia, ya que adelantaron el viaje y llegarán más pronto de lo previsto.

-Bruno ¿Sabes en donde está Kelly?- Le pregunté, sacándolo de la conversación que mantenía con Carolina, su mejor amiga. Y la chica que pienso que le gusta, aunque él me lo niegue.


-Alpha.- Saludó Carol a la vez que bajaba un poco la cabeza para mostrándome respeto.

Asentí hacia ella para inmediatamente poner  mi atención en Bruno. Kelly no puede andar sola por ahí, lleva casi una semana sin caminar ni comer bien. No la detuve cuando salió de la habitación porque sabía que necesitaba espacio y hablar con Johan, pero ya ha pasado mucho tiempo.

Es una cabeza dura esa Kelly.

- Está con la hermana de Carol, parecen llevarse bien.- Dijo sorprendido. Irene, la hermana de Carol, no es una chica muy sociable que digamos. Sin mentir, pero en sus diecisiete años sólo la he visto una vez, casi nunca sale de su hogar.

Camino hacia allí. "Tampoco la vayas acosar, Stephen." No la voy acosar, sólo me estoy preocupando por su salud.


-¡Stephen!- Llamó Johan. Está furioso.


-Si es por la contraseña...- Comienzo a decir, pero me interrumpió.

-Eso no me importa, fue decisión tuya. Tú eres mi Alpha y debo aceptar tus decisiones.- Asentí. -¡Pero no tenías derecho a contarle a Kelly nada! Y ya sabes a lo que me refiero.

Suspiro.- Ella me pidió la verdad, no pude negarme.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.