Paradigma Oblivion 8: Irregularidad Detectada [Venas Móviles]

Las luces blancas del laboratorio se tornaron de color rojo a la par que una alarma sonaba, al igual que el Cuarto Portador, el Prototipo y los tres Modelos Génesis se preocuparon confundidos de lo que estaba ocurriendo. Alejaron sus manos de las computadoras y se separaron de los escritorios y tubos de clonación – ¿Una Irregularidad se escapó de la contención? –preguntó Julián confundido, fue una pregunta hecha al aire porque él y sus cuatro clones eran los únicos presentes y ellos no tenían respuesta.

Sin embargo, había alguien que tenía respuestas. El rostro de Acrep apareció en uno de los monitores del laboratorio –Casi –contestó dando a entender que estaba escuchando todo –En realidad es algo peor, se ha detectado una Irregularidad en la ciudad.

–Ouh –a pesar de ser su primera vez el Cuarto Portador mantenía algo de indiferencia – ¿Cómo?

–Parte de nuestro trabajo es averiguarlo –el rostro del robot desapareció y en su lugar las pantallas del laboratorio mostraron diferentes cámaras de seguridad grabando la zona. Se reprodujo el video de una mujer a la cual parecían salirle raíces húmedas de la espalda que utilizó para atacar a un hombre hasta asesinarlo, al poco tiempo otras tres personas llegaron y Julián las notó.

Por un segundo el androide alienígena se quedó congelado, como si su Matriz de Procesamiento se hubiera detenido. Cinco segundos después procedió – ¡MAMÁ! –su voz gritaba y expresaba las emociones que a su cuerpo le costaba cada vez más transmitir –Ese es el trabajo de mamá –el Cuarto Portador se acercó y con sus manos tomó el monitor – ¡¿Cómo se procede en esta situación Acrep?! ¡Apresúrense!

La voz cibernética se escuchaba molesta –Oye, no nos digas como hacer nuestro trabajo. Repetimos este procedimiento cientos de veces –las pantallas de las computadoras empezaron a mostrar distintos noticieros y publicaciones de redes sociales –El Equipo de Desinformación ya se encargó de encubrir la situación –todas las noticias coincidían en lo mismo: Una peligrosa fuga de gas fue detectada en el edificio de la agencia de seguros y un Equipo de Seguridad e Higiene fue enviado por InnovaTech para solucionarlo, aunque todavía hay gente dentro.

– [Informe]: El Equipo de Respuesta Inmediata ya está por llegar a la zona de la Irregularidad –habló el Prototipo –Está conformado por la Segunda Portadora y los cinco Modelos de Combate.

–Jojo, ahora realmente veremos el valor de tu aplicación Cuarto Portador.

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Agarrando una silla de madera desde el respaldo uno de los hombres lo utilizaba para intentar mantener alejada a su compañera de trabajo, en realidad quería mantener alejada a sus venas que parecían finos tentáculos enredándose en el objeto mientras ella gritaba de dolor y suplicaba por ayuda. Al mismo tiempo el otro hombre sostenía una larga lámpara rota que utilizaba para empujar las puntas de las venas y evitar que los tocaran, ambos no solo se protegían a sí mismos, sino que también a su otra compañera aterrada a sus espaldas.

De un momento para otro, más vasos sanguíneos brotaron de los omoplatos de Catherine y con eso ella soltó un desgarrador grito de dolor, las venas acumuladas en su espalda similares a alas aumentaron su tamaño y pequeñas espinas blancas brotaron en sus puntas. Utilizando estas espinas las venas se aferraron con fuerza a la silla y lograron destruirla en pedazos con una fuerza superior a la de dos hombres.

El oficinista que la sostenía quedó desarmado, su compañero intentó ayudarlo usando la larga lámpara para ahuyentar a los vasos sanguíneos pero estos se enrollaron alrededor del dispositivo para arrebatárselo. Era una situación complicada para la señora Ramírez, su compañera parecía ya no tener lagrimas para llorar y gritaba por ayuda a la vez que sus venas parecían estar a punto de asesinar a sus compañeros.

Los vasos sanguíneos se extendieron como raíces, gatearon y se enrollaron en ambos brazos de uno de los oficinistas. Sus pequeñas espinas en las puntas atravesaron su piel como las garras de un felino salvaje y sus gritos desesperados aumentaron más cuando las propias venas de su cuerpo empezaron a salirse por los agujeros de las espinas, como si se estuvieran fusionando al cuerpo de Catherine.

Su otro compañero no dejó pasar esta oportunidad y mientras el hombre era asesinado él tomó a la señora Ramírez del brazo y escaparon por el pasillo ignorando los gritos de ayuda.

De repente se generó un sepulcral silencio, la mujer volteó la cabeza y se encontró con un escenario particular, pero eso debía ser imposible. Rápidamente su línea de pensamiento cambió al notar a una niña no mayor a 16 años con otros cinco jóvenes más altos que ella acompañándola, por un segundo pensó haber visto a su hijo.

El monstruo formado por venas móviles notó esa presencia en medio de su alimento y le puso un freno al aperitivo para capturar más comida, los vasos sanguíneos soltaron a su presa actual y ambas alas formadas por venas se lanzaron hacia el grupo de seis personas.

En un principio la señora Ramírez cerró los ojos con fuerza mientras corría tirada del brazo por su compañero, si oiría la carnicería que estaba por desatarse al menos no quería verla. Aunque para su sorpresa los gritos de dolor y carne desgarrada nunca llegaron, rápidamente ella volvió a abrir los ojos confundida y vio como las uñas de la niña morena se iluminaron de un rojo anaranjado.

La joven hizo la forma de una pistola con la mano y de su dedo índice salió disparado un rayo láser que cortó a la mitad las venas de ambos lados como una tijera podando el exceso de ramas en un arbusto. Un olor a carne asada se desprendió y las venas cayeron al suelo formando un rio de sangre que lo manchó todo –Disparen –ordenó.

Los cinco hombres a sus costados obedecieron, estos vestían armaduras negras con cascos que cubrían casi toda su cabeza, lentes negros y barbijos también del mismo color. Sus armas no soltaban balas ordinarias sino lo que parecían pequeños cilindros hechos de luz celeste que parecían quemar la piel viva de las venas expuestas, la mujer en medio de todo el caos dejó de gritar y parecía como si se hubiese dormido; su cabeza colgaba de un lado con los ojos cerrados.