Sofía se encuentra presentando su segundo avance, y aún tiene varios asuntos pendientes. Aunque en la primera reunión no mencionó las dificultades y resistencia que enfrentó, ahora se da cuenta de la importancia de ser honesta y transparente con sus hermanos. Reflexionó sobre la importancia de compartir las lecciones aprendidas y posibles soluciones a los desafíos que han enfrentado. A pesar de competir con su propia familia, decide ser franca sobre las dificultades superadas y las que aún enfrenta, confiando en sus propios méritos para afrontar las reacciones.
Los tres han enfrentado obstáculos y no ha sido fácil para ninguno de ellos. El agotamiento ha comenzado a afectarlos, por lo que su padre les sugiere tomar un merecido descanso de tres días para reconectar como familia y cuidar su bienestar.
Mientras el hermano menor muestra señales de desgaste emocional y escepticismo frente a los desafíos, el mayor y Sofía se mantienen firmes en su determinación de superar obstáculos y cumplir las expectativas de su padre. El período de descanso les brinda un alivio temporal y la oportunidad de renovar su determinación. Aunque se avecinan pruebas difíciles, están enfocados en lograr el éxito.
Dos semanas más tarde, después de estar apagando fuegos, de pronto entra Nacho a su oficina sin previo aviso y coloca sobre su escritorio dos piezas:
Sofia no sale de su asombro, este mecánico ya se pasa de la raya.
Sofía estaba en shock, y antes de poder asimilar, el mecánico salió abruptamente como llegó. Tomó las dos piezas y las estaba observando cuando entraba su secretaria, inmediatamente las escondió.
Sofía se inclinó avergonzada sobre su escritorio, que acababa de pasar. Cómo podría pensar Gina, que ella, Sofia Salamanca, podría interesarse en un hombre maleducado, sin educación y operario de su empresa. Dudaba si era conveniente advertirle que no comentara nada al respecto o mejor olvidar el asunto. No se dejaría afectar por esto, nadie que la conozca podría creer algo semejante. Ahora tenía que aterrizar y centrarse en lo realmente importante.
Las dudas iban en aumento, no podía subestimar lo que ocurrió. Nadie sabía que tenía prohibido prescindir de los servicios de cualquier trabajador, así que todos se desempeñaban correctamente so pena de ser despedidos. Por esto, no tenía sentido su actitud altanera, había algo importante que debía descubrir.
Revisó para asegurarse, aunque ya lo había aprendido, que el chasis se elaboraba con aleaciones de alta resistencia y así lo demostraban las órdenes de compra.
Por fin llegó la noche y se dirigió al taller. La esperaba el insoportable, nunca lo había visto furioso y tenía que admitir que, si se veía interesante, haciendo honor a su apodo entre las chicas. Sonrió por un momento, si ellas supieran por quien suspiran, no perderían su tiempo ni esfuerzos por llamar su atención.
Sin preámbulos, cuando la ve, comienza a explicar:
Nacho la voltea a mirar con expresión de exasperación; piensa que ese hombre no la respeta.