CAP 7

Me detuve en seco y casi escupía la comida que tenía en la boca cuando escuché a León decir "¿Count? ¿Mantienes contacto con él?"

Mire a León y dije con un ligero tono serio -¿Que estás revisando?-

-¿Que pensaste que revisaría? Sabes que odio a ese tipo.- Dijo León, con un tono irritado.

Yo lo mire por unos momentos... No sé si me daba ternura la forma en que curvo los labios en una mueca de irritación, o me excitaba la forma en la que me reclamaba. -Bueno, después de hacer las pases con él, estuvimos hablando un tiempo. Por lo que me agrado y comenzamos a hablar más seguido.-

-¿Al punto de quedar para verse mañana en el centro? No soy estúpido, Spike. ¿Porque mierda sigues hablando con él?-

-¿Porque no puedo hacerlo? El echo de que tú y el tuviesen problemas no me incluye en su dinámica odio-odio, por lo que no veo nada de malo en estar hablando con él.-

-No. Tú no. Yo si veo mucho de malo en que MI mejor amigo esté hablando con un imbécil al que odio completamente.-

Suyo...

-Bueno, entonces, ¿Que quieres que haga? ¿Que le deje de hablar y cuando me pregunte decirle: "Lo hice porque León me dijo que te dejará de hablar, y lo hice porqué lo prefiero a él."?-

-...- se quedó serio un momento, luego curvo los labios en una sonrisa y me miró ladeando la cabeza. -¿Me prefieres a mi antes que a él?-

Maldita sea, no debí haber dicho eso...

-Ugh, maldita sea... Bien. Lo haré, ¿Feliz?-

-Bien, entonces yo lo bloqueo de una por ti.-

Dijo con una sonrisa antes de volver a fijar sus ojos en la pantalla del celular. Escribió un mensaje texto y lo mando antes de bloquearlo, pude divisar satisfacción en los ojos de León... Ahh, me encantaban esos ojos que casi eran grises. ¿Porque mierda no puedo confesarme? Tal vez... Porque ambos somos alfas, si el fuese un Delta o al menos yo... Podría decirle que me gusta, que lo amo, que lo quiero para mí, que quiero que sea mío... Pero como sea, el ama a otra persona. No puedo quitarle esa sonrisa del rostro, ya lo vi llorar y derrumbarse en mis brazos más de una vez, ya lo vi odiarse a sí mismo, ya lo vi sentirse débil y pequeño, ya lo vi ser como un insecto en mis manos... No quiero verlo así de nuevo.

No puedo verlo así de nuevo... No de nuevo.

He visto sus partes más débiles, he visto sus momentos más grandes de desilusión. Lo he visto llorar y encogerse, acurrucarse mientras duerme. Me ha mostrado todo lo que tiene para mostrar... Se ha derrumbado en mis brazos así como duerme tan cómodo en ellos, me ha contado muchas cosas mientras estamos abrazados, lo veo encogerse cuando lo tengo entre mis brazos, esas sonrisas que me dedica cada vez que está feliz... Ah... Él es tan perfecto... Es hermoso en todos los sentidos, aún con cicatrices tan grandes él tiene partes tan bonitas... Así como oscuras.

La voz de León, de nuevo, me saco de mi subconsciente, mientras me pasaba el celular por encima de la mesa.

-Bueno, ¿Y Michael? ¿Que estabas hablando con él?- pregunto, cosa que me saco de todos mis pensamientos.

-Ah... Hablamos de unas cosas, nada interesante. Solo que mañana voy a conocer a mi tutor. Rowan dice lo mismo de siempre y... Jaja, mis bebés, Alicia y Eliotte van a irse por un mes a casa de mis abuelos... No quiero que se vayan, pero dice mi papá que se irán por un mes porque ellos quieren vivir cerca del lago. Mis abuelos tienen una cabaña allí, mis padres la mandaron a restaurar y por lo tanto ellos se irán allá con mis abuelos... Y yo...-

-A Roma, ¿No?-

-¿Vienes conmigo?- pregunté, antes de verlo a los ojos.

-Supongo... Si, iré.-

-Pfff... Cada vez que te pregunto eso, siento que te estoy preguntando algo que es más... Como de cierto modo, amoroso.-

Él se quedó callado un momento. -¿No me amas?- dijo con unos ojitos de cachorro, esos ojos de alguien que parecía no romper un plato.

-Dejense de estupideces los dos.- interrumpió Hell. -¿Te vas a Roma? ¿Porque tus padres te mandan tan lejos sin motivos?- pregunto, con un tono sarcástico.

-¿Porque los tuyos mandaron a Matthew hasta Alemania a los diez años? Es duro y cruel mandar a un niño a un internado con locos por doquier... Lo abandonaron. Eso es algo que no siquiera los perros hacen a sus crías.-

-Ah, ¿Y crees que tus padres son diferentes a la mierda? En el puto infierno.-

-Ah, y era más fácil para ellos regalar a su hijo en vez de criarlo, ¿No? Eran unos malditos.-

-Tu no vas a estar hablando así de mis padres, imbecil.-

-Bueno, buenos padres tengo muy en claro que no son... Y tú tampoco eres diferente a ellos.-

-Oh, ¡¿Y CREES QUE TÚ ERES MEJOR QUE YO?!-

-¡MEJOR HIJO Y HERMANO QUE TÚ SI SOY!-

-¡JA!, lo dice quién ni siquiera a un perro puede amar.-

LEÓN

Sentí como mi corazón se contrajo al igual de el de Spike, también su rostro. Yo creí que se lanzaría a golpear a Hell en cuanto oyera eso... Pero no fue así, su rostro tembló, su mandíbula se tenso. Se quedó callado antes de acercarse un par de pasos hacía Hell. Le Dio un golpe en el rostro, que fue suficiente para hacer que Hell caera sosteniendo se el rostro.

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Cuando Spike era un niño tenía un cachorro, un labrador del Terrier que tenía más o menos 3 meses. Clunter, el padre de Spike también tenia un perro...aunque el de Clunter era un Cane Corso.

Clunter desde que Spike estaba pequeño le dio una crianza muy diferente a la de sus hermanos, Spike crecería para ser un sucesor tanto de su empresa en imagen pública, como de su mafia y su identidad interna.

Cuando Spike tenía 10 años Cove le había regalado a su perro, el cachorro que tenía Spike. Clunter le había enseñado a Spike a no encariñarse con nada ni nadie...