Capítulo 3

Mientras terminaba de arreglar sus cosas entablaron una conversación y se sorprendieron al saber que ambas estaban becadas, una por mérito académico y la otra joven por recursos económicos , al terminar se retiraron de la habitación para conocer un poco más el campus.

Al salir quedaron anonadadas ante el gran terreno en el cual se encontraban, y eran únicas,  ya que en su recorrido se encontraron con otros estudiantes que estaban igual de sorprendidas que ellas.

Les obsequiaron unos folletos en los cuales redactan la historia de la universidad, y la historia sobre su fundador.

Un empresario petrolero llamado Erick Heinz nacido en Ecuador, pero radicado en Estados Unidos. La razón por la cual fundó la universidad fue volviendo realidad el sueño de su difunta esposa, la cual quería fundar una universidad en la cual los estudiantes de bajos y altos recursos pudieran estudiar las carreras que deseen y obtener becas completas, ya que como ella en su adolescencia no tuvo una buena educación, quiso darle la oportunidad a los demás jóvenes. Pero su sueño quedó inconcluso, ya que la enfermedad que padecía la llevó a la muerte.

Continuaron su recorrido, hasta que llegó la hora de regresar a su habitación.

Los días que siguieron fueron iguales, adaptándose a la universidad, sus clases, horarios y docentes respectivo. Se concentraba tanto en sus clases, que obtuvo certificados académicos por sus logros.

Culminó su primer año sacando las mejores calificaciones, obteniendo así un reconocimiento por sus logros en ese año, y el encargado de entregarle el premio fue el Fundador de la universidad, acompañado de sus hijos.

Las fiestas de navidad iniciaban, mostrando que su segundo año empezaría en menos de un mes, compartió con su familia y amigos de toda la vida, así como también con sus nuevos amigos que hizo en la universidad.

Su segundo año inicio, así como también sus clases más esperadas, las prácticas que tanto anhelaba recibir. Así como su primer año, este se trató de sus clases, docentes, horarios, añadiendo unas pocas salidas con sus amigos, aunque no le gusten las fiestas los acompañaba de vez en cuando.

Al cursar la mitad de su segundo año, conoció al que sería su compañero de vida, ambos compartían su amor por la medicina, su concentración al estudio, respeto hacia su familia, y lo más importante en toda relación, la confianza mutua.