¿qué día?

La piscina?

Capitulo XXI

Recorde mis años de secundaria exactamente el último año antes de entrar a la preparatoria esos días en los que le sonreia a la vida y ella a mi. Cuando tenia grandes amistades, cuando mamá me quería ,trenzaba mi cabello y reía conmigo. Esos días de verano que compartia con esas personas que adoraba,  esas con las que surfeaba y me sentía viva. En esos días en los que no tenía culpa, que me sentía segura y feliz. Recorde esas veces que mamá me reprendia con actitud serena por hacer algo mal o llegar tarde de mis salidas a la playa, y aunque sus regaños eran sumisos siempre me sentía mal por fallarle. 

Ese sentimiento me estaba mortificando en ese momento como si estuviera fallandome a mi misma. 

Por que carajó no dije "no" en cuanto me invitaron a jugar, yo siempre decía que no a todo aunque me dejaba llebar por otras cosas mi respues siempre era no.

Moví la cabeza rotundamente de un lado a otro en señal de negación agachando la cabeza. No quería estar a solas con el.

-No que Levana? - inquirió Cristopher divertido.

Levanté la vista y la enfoque en David, quien me miraba en cuestión. 

Bufé fastidiada poniéndome de pie mirando a mi alrededor en retrospectiva.

Caminé en dirección a las escaleras de la sala esperando por el. Con una mirada inquisitiva mire sobre mi hombro para comprobar que si venia detrás. Iba a detener mi andar hasta que doblo la esquina tomando el primer escalón para subir. 

Seguí de frente sin prestar mayor atención. No quería mostrarle que me encontraba nerviosa y con las palmas de mis manos sudando.

Abrí la puerta del baño que nos indicó Fink. Al parecer era el único qué no estaba ocupado,  y el que él acababa de utilizar para cumplir su reto.

Ingrese al sanitario recargando mi trasero en el lavabo esperando su aparición.

Conectamos miradas hasta que el entró por completo recargandose en la pared frente a mi.

 Parecía que la guerra de miradas duraría todas mis reencarnaciones por que aunque yo me encontraba perdida en el tándem griseaseo que parecían sus ojos sintiendo mil emociones, el no parecía flaquear, ni inmutarse por mi mirada. Erá como si no existiera una emoción que cruzara el color tormenta de sus ojos. 

Suspiré molesta subiendo mi cuerpo a la barra del lavabo y bajando la mirada a mi reloj de mano,  soló había pasado un minuto y a mi me pareció una eternidad.

-Ese suspiro que quiere decir ? - Escuche decir de sus labios.

Me encojí de hombros restándole importancia sin mirarle.

-Por lo menos mírame - Ordenó con rigor.

Giré los ojos molesta. Quien se creía para hablarme así? 

Alce mis soles a sus tormentas enfadada haciendome notar sin decir una palabra. El arrugaba el entrecejo con firmeza, pronto quería saltar del lavabo y desacerle esa arruga con mis dedos.

-Estas molesta? - Pregunto expectante.

-Y a ti que más te da?- Dije alzandouna ceja enfadada.

-Qué estas en tus días?- Cuestiono en tono hostil.

Giré los ojos irritada.

-Que quieres de mi? - Volvió a preguntar.

Lo seguía mirando molesta, muy muy molesta por su altanería que no tenía sentido.

-Que dejes de acercarte,  de mirarme,  y besarme como si fuera una de tus putas - Adverti chispeante de enojó.

Sonrió ladino.

-por que mierda sonries? - Dije enfurecida.

-Tu estas celosa! - Afirmo seguro y dando un paso al frente.

Sonreí irónica

-Celosa de ti? - reí con gracia- que soñador eres Kozlov- volví a reir en su cara. 

Se acercó amenazante a mi advirtiendo con suficiencia que nada saldría bien.

Puse mi mano alfrente deteniendolo y borrando mi sonrisa de inmediato.

-Pues debes saber - Contesto tomando mi cintura con delicadeza pero con poseción a la vez pegándome a el en la orilla del lavabo- que es cierto - continuó tomando mi mano que estaba sobre su pecho impidiendo que se acercara mas a mi y la bajo para posarla en su costado- que tus besos son con los únicos con los que sueño Allen- informó hundiendo su nariz en la curva de mi cuello- como tu olor único y embriagador - dejo un beso sensual que duró demasiado en mi cuello subiendo lentamente por mi barbilla,  mi mejilla hasta la media luna de mis labios.

Hace calor aqui? O por que me estoy derritiendo. Que lleguen los paramédicos en cualquier momento voy colapsar por las corrientes eléctricas que viajan por mi.

Cerré los ojos disfrutando la sensación intentando tomar la cordura.

-David yo..

Gruñó sobre mis labios tomandolos con determinación mezclado su aliento con el mio. Tan refrescante, tan irreal. Pestañe aturdida por la sensación y abrí mas mis labios permitiendo que robara todo de mi.Con sensualidad,  con pasión y furor , así eran dos besos. Lo escuche gemir sobre mis labios  y pegarme mas a el por la cintura. Suspiro sobre mi mejilla tomando aire aun invadiendo mi cavidad.

Pronto respirar resultó necesario y la única razón que nos hizo apartarnos.

David chocó su frente con la mía respirando pesadamente como si se estuviera contuviendo, con los labios inchados por el besó  lo cual me pareció sexi, y con ojos cargados de pasión.

Pronto sentí que palidecia y me separe bruscamente de el bajando del lavabo de un saltó. Que demonios pasaba conmigo? Se supone que debía separarme de el, no volver a caer en sus redes.

Tome la manija con rapidez escuchando mi nombre a las espaldas.

-No Levana espera, aun no pasaba el tiempo - Grito David.

El tiempo? ,y una mierda yo me largó.

Camine a paso apresurado detrás de los chicos con los que jugabamos. El círculo aun permanecía,  solo que unos fumaban y otros se comían la boca. 

-Hey! Chut, chut, chut - Escuche que decían - A donde crees que vas Levana? - Dijo Cristopher con determinación y una sonrisilla en los labios.Detuve mi andar para mirarlo.

-Que no parece? -Pregunte como si el estuviera idiota - Me largó - Avise volviendo a caminar.




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