¡¿qué es esto en mi barriga?!

30. ¿Soy tan poca cosa?

No sabia si lloraba de felicidad o de tristeza. Sí me dolía el pecho porque tenía mucho boca abajo o porque estaba dolida. No sabía qué día era y ni me importaba.

Me puse boca arriba cuando me empezó a molestar el vientre. Lo mire fijamente en silencio y luego deje salir un sollozo. Todavía recordaba la última vez que había hablado con Keidan. Lo llame cuando llegue del ultrasonido, ninguna de las diez me contesto. Ya cuando me había resignado vi su número en llamada entrante. Hubiera deseado no contestar.

Después de que Sharon soltara su veneno conmigo me puse a llorar. ¿Y es qué como no hacerlo con todo lo que me había dicho? No sabía si Keidan estaba de acuerdo con todo lo que me había dicho ella, pero si no había venido ni una sola vez era por algo. Ya había decidido irme a casa de los abuelos. Lisa dijo que no. Que no iba a huir solo por un idiota cobarde. Y tenía razón.

El único que había venido era Axel, era al único que le importaban sus sobrinos. Como se había proclamado serlo.

No me había animado a preguntarle por Keidan.

No valía la pena llorar por alguien como él; eso había dicho Lisa. Tal vez tenía razón.

Era aquí donde me arrepentía de no tener experiencia, solo un novio había tenido en mi vida. Y no era tan lindo a decir verdad, yo no lo recordaba tan lindo.

Decir que estaba bien equivalía a 100 caídas de una montaña. No era tan buena mintiendo y eso lo sabía mi amiga. Me había traído mínimo 5 botes de helado. Me había terminado solo uno y no sabía porque.

Tanto que me gustaba el helado y ahora no tenía ganas ni de comerlo.

Uno de los bebés había pateado por primera vez exactamente el 5 de Diciembre. Se sentía tan lindo, era algo que no podía describir, algo que solo yo podía sentir. Al principio me había asustado, casi gritaba que llamaran a una ambulancia, Lisa dijo que solo había pateado y me tranquilice antes de empezar a llorar. Todo el día entero había estado aplastando levemente con tres dedos un poco mi vientre para sentirlo moverse. Así sentía que tenía algo dentro de mí que yo cuidaba.

Algo que tenía que proteger con mi vida y lo haría.

No podía esperar a que llegara el día de conocerlos.

Planeaban hacerme un baby shower, la verdad no lo veía tan necesario. ¿A quién iba a invitar? Además, tenia 7 meses, se supone que los hacen cuando tienes 8 o 9 máximo. Pero no, mi mejor amiga tenia miedo de que se adelantaran y no hacerme nada.

La pequeña depresión que había tenido hace dos meses ya había pasado casi totalmente. Con ayuda de Axel, Mark, Mat y claramente Lisa.

De Dean no había sabido absolutamente nada, me dolía que de repente me dejara de hablarme, ni siquiera lo miraba. Mi amiga me había dicho que planeaba irse por un tiempo según le había dicho el novio de la rubia. Me parecía un poco absurdo que dejara de hablarme así de la nada, ¿tanto caso le hacia a Kaidan? Que obediente era. A veces creía que me llegaría a quedar sin amigos, perdí a los del colegio y a los que había hecho últimamente, pero de algo si estaba segura. Los que ya no estaban conmigo me dejaban en claro que no eran verdaderos amigos. Si mis amigas del instituto se hubieran preocupado porque no volví a asistir a la escuela me hubieran buscado o aunque sea le hubieran preguntado algo a Lisa.

 Pero no.

Acaricio mi vientre cuando siento el movimiento leve, lo único que ahora me hacia feliz eran las dos nenas que se encontraban dentro de mi. Era por lo que me levantaba todas las mañanas, lo que me hacia ir a trabajar de lunes a sábado  y lo que también me hacia comer bastante. A veces me preguntaba si Kaidan ya lo sabia, si ya sabia que tendría dos niñas o no le interesaba en lo absoluto. Mentiría si dijera que no me dolía, estaba como el principio, sola y abandonada. 

—Oye, ¿y yo que?—escucho la voz de mi mejor amiga a mis espaldas, tal vez pensar en voz alta no era lo mas correcto.

volteo a verla y elevo una ceja antes de contestar: —No hablo de ti, tu nunca me haz dejado sola ni abandonada.—le sonrío débilmente—. Excepto las veces que te vas con Derek a su departamento, ahí si me dejas sola.

La rubia enfrente de mi se sonroja un poco, no cabía duda que cuando se desaparecía con Derek no era para buscar conejitos. Hacia tiempo que no me sentaba a platicar con ella como antes, y lo extrañaba, quería contarle a alguien como me sentía pero al mismo tiempo no quería agobiar a nadie con mis problemas internos.  

—No desvíes el tema principal, Riley.—siento a Lisa sentarse a mi lado. Salgo de mis cavilaciones volteándola a ver—. A ver nena, cuéntame tus pecados, ¿qué es lo que ocurre? ¿Por qué esa carita triste?

—¿Soy tan poca cosa, Lisa?—mis palabras salen un poco temblorosas.

No me había a sentado a pensar claramente lo que ocurría, yo Kaily Riley me sentía poca cosa por el simple hecho de haberme acostado con Keidan después de que me dejara en una cama completamente desnuda haces seis meses sin saber que ya no era virgen, luego de saber que estaba embarazada desaparecerse tres meses y aun así volviera para caer en la palma de su mano, me había acostado con él sabiendo lo que hacia, sin una gota de alcohol en mi sistema. Y no me había parado a preguntar si era lo único que quería de mi, conocía a los chicos como Keidan Wells. Te endulzaban el oído para obtener lo que querían. Era una estúpida al pensar que formaría mi propia familia, aunque, no se necesita un padre en ella. Yo podría ser padre y madre par ellas. Las sacaría adelante aun si yo no comía nada.

 

GRACIAS POR LEER, SIGANME EN INSTAGRAM <3

@CLUMSYFLOWERSX Y @LIZMRC._




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.